Capitulo 9: Fuego.

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Debería cambiar el sonido de esa alarma, más que un sonido pareciera que estuvieran gritando, me levanto de la cama y voy hacia el baño, me miro al espejo y noto que se me han formado unas ojeras bajo los ojos, tendría que poner una cuchara en el ...

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Debería cambiar el sonido de esa alarma, más que un sonido pareciera que estuvieran gritando, me levanto de la cama y voy hacia el baño, me miro al espejo y noto que se me han formado unas ojeras bajo los ojos, tendría que poner una cuchara en el refrigerador pero prefiero ducharme primero.
Cuando salgo de la ducha me pongo un Jean negro con una camiseta blanca básica y mis zapatillas Vans y también llevo una campera finita en el brazo, no sé si hace frió pero nunca está de más, como siempre dejo caer mis ondas naturales sobre la espalda pero esta vez me levanto el flequillo con dos invisibles, luego me pongo corrector para taparme un poco las ojeras y por suerte ya no se ven, me pongo bálsamo labial y me hago una fina línea arriba de mis pestañas con el delineador líquido y un poco de mascarilla de pestañas y ya estoy lista, agarro mi celular, las llaves de casa y los meto en el bolsillo delantero del bolso, pero antes me fijo la hora y son las 07:13 así que hoy si decido desayunar, bajo las escaleras y me doy cuenta de que no hay nadie, agarro una taza y me hago una chocolatada con galletas de agua, al terminar me dirijo hacia la puerta y la abro, me doy cuenta de que corre un poco de viento, por suerte traje mi campera, y como es temprano aun, prefiero ir caminando tranquila, cierro la puerta y me voy vuelta para seguir caminando, es entonces cuando lo veo, hoy lleva puesto uno jean negro y una remera mangas cortas color gris, ¿No tendrá frió? Pues ahora yo no, cuando lo vi sentí que me quemaba por dentro, siento que mis mejillas se tornan rosadas, y de repente miro hacia el suelo para no parecer una tonta enamorada, cosa que no lo estoy, empiezo a caminar, y al pasar por su lado se me caen las llaves, la verdad es que no se si lo he hecho a propósito o que, pero me siento una tarada, me inclino para levantarlas es entonces cuando veo su mano agarrarlas primero, entonces me levanto rápidamente y mi cabeza se golpea con la suya y me duele, hago una mueca de dolor y llevo mi mano hacia mi frente, seguro que luego se me hará un moretón, lo miro y el sonríe y me tiende las llaves, yo se las agarro y toco su mano y siento un escalofrió y la guardo en mi bolsillo.

- ¿Estas bien Mel? – Pregunta y me derrito cuando pronuncia mi nombre, no se porque suena raro cuando el lo dice y es lo que mas me gusta, creí que no se iba a acordar de mi nombre.

- Si, gracias.-Respondo y saco la mano de mi frente, el levanta la mano y la apoya sobre mi frente, todo mi cuerpo empieza a arder en llamas, no se que decir.

- Si no te pongo hielo ahora mismo se te va a inflamar, ¿puedes acompañarme? – Dice y como no encuentro palabras solo asiento.

- Ven, acá adentro hay una heladera. – Dice mientras me dirije hacia un garaje gigantesco, hay muchos autos, todos de ultimo modelos, deben ser carísimos, luego veo tres puertas y el abre la del medio, esta nos dirije hacia una cocina chica, donde hay una heladera como el dijo, una cocina, una mesada, una estantería y un mueble, pero esta cerrado, también hay una pequeña mesa y tres sillas.

- Siéntate mientras yo busco hielo y un repasador.- Yo obedezco y me siento en una de las sillas, entonces es cuando me entrega un repasador lleno de cubitos de hielos y yo los apoyo en mi frente, pero cuando siento todo el frió lo quito rápidamente, el lo agarra y lo lleva a mi frente.

- No te lo saques porque lo que quiero es que se te desinflame.- Dice mientras lo sostiene en mi frente y yo me quedo quieta sin decir nada.

En eso suena mi celular y yo rápidamente lo busco en mi mochila, cuando lo saco atiendo.

- ¿Hola?-

- Hola ¿donde te metiste? Ya van a comenzar las clases de historia, ¿vas a venir?- Pregunta Joan del otro lado.

- Hubo un inconveniente, pero ya voy, ¿no me puedes pasar a buscar? Estoy en mi casa.- Miento.

- No, hoy llegue temprano y la directora hablo con migo, me han puesto 5 observaciones y han puesto cámaras de seguridad, y como no estabas no han podido hablar contigo, así que apúrate o llamaran a tu papa.

- Okey ya voy corriendo.- Digo y cuelgo, en eso me levanto rápidamente, guardo mi celular en el bolso y abro la puerta de la cocina, cuando me agarra del brazo hasta darme vuelta y quedar cara a cara. Me quedo sin habla, con los ojos como plato, temblando de miedo por lo que pueda llegar a pasar, y sin respiración.

- Mel...

Mi vecino y yo.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora