Ella es Melody, una chica con problemas familiares, creció no creyendo en el amor pero eso cambiara, deseara no haber nacido nunca antes que sufrir tanto, ¿sabrá como ponerse de pie y luchar? No lo se, solo ella lo sabe...
Si les gu...
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Salgo de la habitación y voy a la sala de espera, rápidamente se pone de pie Dami, me acerco a él y me da un cálido y confortante abrazo, sus brazos me rodean la espalda completamente, me da un beso en la frente y nos sentamos, luego de un rato me duermo apoyada en su hombro mientras su brazo izquierdo abraza a los míos.
< Otra vez me encuentro en ese baño, tirada en el suelo y sangrando, otra vez esa misma mujer aparece, otra vez me dice que ella me cuidara, que todo estará bien, sin embargo esta vez le creo, y siento que la conozco de algún lado, su figura se me hace conocida, como si alguna vez la hubiera visto, no le puedo ver bien la cara, porque me estoy muriendo, pero aun puedo oír como susurra la palabra: -En el sótano.- Ella me abraza.- Si, en el sótano. >
Me despierto alterada, y agitada, otra vez ese sueño, < En el sótano. > Esas palabras retumbaban en mi cabeza, no entendía que significaba, ¿acaso tenía que ir a algún sótano? En mi casa que yo sepa no hay ningún sótano.
- Ey ¿Soñaste otra vez con esa mujer?-
- Sí, pero esta vez fue un poco más raro.- Admito.
- ¿Y eso porque?
- En el sótano.
- ¿En el sótano?
- Eso fue lo que me dijo, En el sótano.
- Quédate tranquila solo fue un simple sueño.- Me dice.
- ¿Qué hora es?- Pregunto un poco confundida
- Son las 8:37
- Debería llamar a Joan y contarle todo lo sucedido, aunque dudo que este despierta.
- ¿Y porque no le dejas un mensaje?
- Eso voy a hacer...- Agarro mi celular del bolso y marco su número, como era obvio no me atiente, así que decido dejarle un mensaje de voz.
-Hola Joan soy yo, al final no hubo ninguna cita, en este momento estoy en el hospital con Dami, Juan tomo demasiado, luego te explico todo no te preocupes.- Digo y cuelgo.
- ¿Pudiste dormir algo?- Le pregunto a Dami que no para de bostezar.
- La verdad es que muy poco.
- Si querés anda a tu casa, yo me quedo.
- No, no te voy a dejar sola.- Dice y yo me acerco a él y le doy un beso en los labios.
- Gracias por quedarte conmigo.- Digo y le doy otro beso más, me siento a su lado y vuelvo a apoyar mi cabeza a su hombro y entrelazamos nuestras manos.
- Hola chicos.- Dice Romi y rápidamente nos separamos, nerviosa me paro y le doy un abrazo.
- ¿Se han quedado toda la noche acá?- Pregunta abriendo los ojos como platos y yo asiento con la cabeza, esta vez se nota que está tranquila, se ha bañado y se ha puesto una calza negra con una camisa blanca y una chaqueta beige, y unos zapatitos negros, también se nota que ha descansado, lleva la cara al natural, no tiene puesta ni una gota de maquillaje y aun así esta preciosa.
- Vayan a descansar yo me quedo.- Dice y nos abraza a ambos. - Gracias Damián por quedarte con ella.-
- No hay problema, ahora llevare a Mel a su casa, y yo me iré a la mía, cualquier cosa que necesites me llamas a mí, la paso a buscar a Mel y aquí nos tendrás ¿okey?- Dice Dami muy seguro de sí mismo. La verdad es que no quiero ir a mi casa y estar sola, no quiero volver a esa casa y recordar esos últimos días que estuve ahí. - ¿Vamos?- Pregunta, yo asiento y nuevamente le doy un abrazo a Romi.
Al salir del hospital empiezo a tiritar, tengo frio en las piernas, porque llevo una pollera, arriba llevo la chaqueta así que no tengo tanto frio, rápidamente Dami me abre la puerta y entro. Como sigo tiritando un poco el prende la calefacción, yo me apoyo a la ventana y me vuelvo a quedar dormida.
La luz de la ventana entra y no puedo evitar gruñir y taparme los ojos con las manos, un olor exquisito invade la habitación, es un olor a comida, un postre quizá, poco a poco abro los ojos, pero me doy cuenta que esta no es mi habitación, estoy en una cama de dos plazas y media, acá entrarían como 6 personas, la habitación es enorme, tiene un sillón de cuero blanco, al frente hay una mesita en la que hay una pecera y unas hojas, después hay un escritorio blanco con cuadros alrededor, con una silla, al frente de la cama hay un televisor y a los costado hay estantes en los cuales hay libros, adornos, cuadros, etc. Por donde entraba la luz no era una ventana, eran unas puertas corredizas que dan a un patio supongo, al lado hay un armario blanco, todo en esta pieza es blanco o beige, y por ultimo las mesas de luz también blancas con la cama grande en la que estoy sentada, en ¿dónde estoy? ¿De quién es este dormitorio? ¿Quién me trajo hasta acá? De repente escucho un ruido...
