- Perdón equivocado.- Digo y cuelgo rápidamente, mientras exhalo la bocanada de aire que tenía dentro, la fulmino con la mirada a Joan y ella solo se ríe...
- ¿Cómo pudiste llamarlo Joan?- Digo molesta.
- Bueno pero ¿no fue divertido?- Dice riendo, yo miro para un costado y me rio, la verdad si fue un poco divertido.
- Casi me muero cuando escuche su voz.-
- Te brillan los ojos al hablar de él, así que te mueve el piso eeh.- Dice con una sonrisa pícara.
- ¿Me mueve el piso?- Pregunto
- Cuando te gusta un chico, te mueve el piso.- Me explica.
- Aah bueno, pero no me gusta, él tiene novia.
- ¿Y que tiene?- Pregunta como si en verdad eso no importara.
- Tiene que puede estar enamorado, y además a mí él no me gusta como ya te dije y no me va a gustar nunca porque encima ahora mi papa trabaja con él.
- Oh también vos sos muy negativa, porque no disfrutas un rato, hablando de disfrutar un rato voy a pedir unas pizzas para comer, ya está anocheciendo, y de paso vamos a alquilar algunas películas de terror ¿querés?
- Bueno está bien.
Volvemos a la cocina a buscar el teléfono, ella pide las pizzas y luego vamos al garaje donde tienen tres autos tienen uno para cada uno, ella agarra las llaves y presiona el botón desactivando la alarma para poder entrar. Ya adentro del auto salimos del garaje y nos dirigimos hacia el alquiler de películas, aunque ella no las alquila, ella las compra.
Al llegar compramos tres películas, dos de terror y una de comedia.
Cuando entramos a su casa no llegamos a hacer un paso que tocan el timbre, nos miramos y exclamamos al mismo tiempo:- ¡LAS PIZZAS!- Nos damos vuelta Joan abre la puerta y si, eran las pizzas, pero no venían solas, vienen con el repartidor, creo que es el repartidor más lindo que he visto en mi vida, a Joan también parece gustarle y aprovecha, le dice que pase y las deje sobre la mesada de la cocina porque Joan tiene que buscar la plata, ella le entrega la plata mientras yo busco un cuchillo, dos platos y dos vasos para la gaseosa, pero no le entrega solo la plata, también le da un papelito, y veo que al retirarse le guiña el ojo a Joan, y se va, ella cierra la puerta y me mira, nos miramos y nos reímos, nos reímos tanto que ciento el ruido de los tacos aproximarse a nosotras.
- ¿De qué se ríen tanto?- Pregunta Juana la madrastra de Joan, que trae puesto un magnifico vestido color beige, con un blazer, unos tacos también color beige y lleva un recogido, de seguro se va a una junta con su esposo Sebastián.
- De nada.- Dice Joan riendo por debajo.
- Bueno, mira Joan con Sebastián vamos a estar fuera del país hasta el domingo, ósea tenés viernes y sábado, pero no vas a estar sola porque esta Matilde la empleada doméstica, y si querés se pueden quedar a dormir algunas amiguitas suyas, y vos Mel quédate el tiempo que quieras, que no hay drama, lo único que te voy a pedir Joan es que no le hagan trabajar tanto a Matilde, que ya es una señora mayor y no va a estar cumpliendo caprichos, te dejo cinco mil pesos por las dudas que pase algo, además para los gastos de la comida y por si se quieren comprar algunas cosas, ya estas avisada, cuídate y por favor no salgan a la calle tan de noche.- Dice y nos da un beso en la frente a las dos y se va. Luego viene Sebastián y nos da un abrazo a las dos y nos pide que tengamos cuidado.
Luego de unos minutos Joan se gira al verme y me dice:
- ¡¡¡Parece que mañana hay fiesta!!! – Dice sonriendo.
- No Joan, ¿y si vienen y no está todo limpio? No y punto.- Digo.
- Mm bueno no sé yo solo decía...-
- Joan te conozco.
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Mi vecino y yo.
RomanceElla es Melody, una chica con problemas familiares, creció no creyendo en el amor pero eso cambiara, deseara no haber nacido nunca antes que sufrir tanto, ¿sabrá como ponerse de pie y luchar? No lo se, solo ella lo sabe... Si les gu...