Capítulo 75: ¿Qué más podría pedir?

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Era una fiesta sorpresa para Romi, pero creo que a la sorpresa también me la lleve yo cuando abrí la puerta de mi casa, no dude en abrazarlos a ambos.

- ¿Cómo puede ser que estén acá?- Les pregunto entre lágrimas.

- Sorpresa.- Dijeron Mathi y Guadalupe.

- Los extrañe tanto.- Digo cuando los suelto.

- Nosotros también a vos, era mentira eso de que no íbamos a venir, ya conseguimos casa, una cerca de... em una de por ahí.- Dice Mathi.

- Hola Romi ¿Cómo estás? Tanto tiempo.- Dice mi mamá y la saluda.

- Muy bien, contenta de que hayan podido venir, Mel estaba muy triste, creía que no los iba a volver a ver, me alegra tanto que se queden.- Dice y se abrazan.

- Siento mucho lo de Juan, me hubiera gustado despedirme.- Dice mi mamá a Romi.

- Sí, yo también lo siento, pero sé que está orgulloso de que sus hijos estén juntos, ¿Quieren ver a Nacho?- Pregunta y ellos suben.

Cuando el resto de los familiares se fueron, Mathi y mi mamá me mostraron dónde quedaba su nueva casa, era una casa preciosa, también era grande como la anterior, pero más bonita, tenía casi las mismas cosas, también me hicieron una pieza a mí, eso me llenaba de alegría. Tocaron la puerta y yo atendí, era Dami, ¿Cómo sabía dónde estaba?

- ¿Qué haces acá?- Le pregunto confundida.

- Mathi me lo dijo, necesito que vengas.- Dice extendiéndome la mano.

- ¿Paso algo?- Pregunto aún confundida.

- Anda Mel.- Dice Mathi detrás de mí, me empuja hacia él y cierra la puerta, yo sigo sin entender nada, me subo al auto de Dami y él me lleva al mar, recién me doy cuenta que la casa de Mathi queda cerca del mar y que voy a poder venir las veces que quiera, la casa de Romi no queda tan cerca del mar, pero queda más cerca de la casa Joan y de Dami.

- Llegamos, sé que sabes que acá está el mar, pero esa no es la sorpresa, así que te tengo que vendar los ojos.- Dice, rodea el auto y me abre la puerta para que yo baje, al hacerlo me venda los ojos con una bufanda. Estoy muy ansiosa, él abre el baúl y luego lo cierra, me lleva de la mano, pero vamos despacio porque tengo miedo a caer, él me promete que no me va a pasar nada, igual sigo sin comprender que hacemos acá.- Acá es, espérame un segundito.- Dice y se va a no sé dónde, ya no siento su olor, entonces dudo en sacarme la bufanda de los ojos.

- ¿Dami?- Pregunto pero no me contesta nada.

- Ahora podes sacarte la bufanda.- Dice, yo le hago caso y me la saco, miro hacia el mar y veo cómo se va escondiendo el sol, es una vista hermosa, miro a Dami y veo que tiene dos copas de Champagne, él me entrega una copa mientras no para de sonreír.

- ¿Y esto?- Pregunto sonriendo también.

- Voy a brindar por la mujer más linda que vi en mi vida, porque quiero que seas la madre de todos mis hijos, porque no me veo en un futuro sin vos, porque espero que algún día nos casemos, y porque quiero ver esa sonrisa.- Dice y mientras me toca los labios, juro que si sigue hablando voy a llorar.- Todas las mañanas, es por eso que quiero brindar, brindo por vos, por nuestro amor que me hace tanto bien, pero, no sólo quiero brindar, si no que quiero hacer realidad todas las cosas que dije, y voy a empezar por una, yo te dije que quería ver esa sonrisa todas las mañanas, y para eso te tengo que tener viviendo conmigo, busca en el bolsillo de tu campera.- Dice y yo meto las manos adentro del bolsillo, toco unas llaves, las saco y las miro.

- No, ¿Es lo que yo creo que es?- Digo y las lágrimas caen por mis mejillas.

- Es la llave de nuestra casa mi amor, ¿Querés vivir conmigo?- Dice y yo lo abrazo.

- Sí, claro que quiero vivir con vos. Digo y le doy un beso. Al soltarlo chocamos las copas y nos tomamos la bebida, cuando lo termino él me saca la copa de la mano y la deja en el suelo, es entonces cuando se agacha, busca entre su saco y saca una cajita.

- Pero no es lo único que quiero cumplir de mi brindis, Melody, ¿Te querés casar conmigo?- Dice, abre la cajita y saca un anillo precioso, yo me agacho cubriendo mi cara con mis manos sin dejar de llorar y el me abraza.

- Sí, sí quiero casarme con vos, te amo.- Digo entre lágrimas y él me pone el anillo en el dedo anular. Lo beso, no paro de besarlo, saber que voy a tener un futuro con él es el mejor sueño hecho realidad.

Tengo un hermano mellizo y un medio hermano que los amo, tengo un padre que me mira desde el cielo y me cuida de todo, tengo una madre que hace poco la conocí y que siento que la conociera de toda la vida, tengo una mamá/amiga/mamá de mi medio hermano que siempre me quiso y yo a ella, tengo a mi mejor amiga que estuvo en todo y que sin importar nada nunca dejo de quererme, tengo a mi esposo, que lo amo más que a mí vida, ¿Qué más podría pedir? Por fin soy completamente feliz.

Mi vecino y yo.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora