Capítulo 8.

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─A ver si comprendo lo que está diciéndome, ─dijo el investigador Alexei Sexton por lo que sería la enésima vez ─ me esta diciendo usted que no fue alguien, si no algo, lo que mató a su hija durante la noche.

Había sido difícil convencer a Sexton de que se quedaran solos allí, el insolente general Wittham y el detective Cristopher Atenton se negaron rotundamente a ausentarse durante el interrogatorio hasta que Sexton notó que con ellos presentes Jocelyn Sanders no diría nada relevante.

─ Dígame entonces, según usted ¿Qué cosa la mató?

─ No lo va a entender.

─ Intente explicármelo, y veremos si consigo entenderlo. ─ el desafío era evidente en su voz, pero Jocelyn no sabía como explicarlo, no sabía como dar a entender algo que ella misma no entendía.

─ No puedo hacerlo. ─dijo susurrando.

─¿No puede o no quiere? ─ luego de varios minutos de silencio continuó ─ ¿Quiere que le diga lo que yo creo? Creo que prefiere no hablar porque no sabe como encubrirse a si misma.

 ─  No ¡NO! No es eso, es...

 ─ ¿Qué es? Ya déjese de juegos sin sentido. ─ Sexton estaba perdiendo la paciencia, nunca fue un hombre capaz de tolerar cualquier broma o pérdida de tiempo.

 ─  No me lo creería si se lo dijera, no... nadie lo haría, no a menos que lo viera por sí mismo. ─  los nervios estaban controlando su boca para hablar por lo que solo pronunciaba divagaciones.

 ─ ¡Dígalo! Admita que es culpable, usted asesinó a su hija y ya no tiene como encubrirlo.

 ─  No lo hice, el mismo diablo lo hizo. 

Akop. [COMPLETA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora