Akop. [COMPLETA]

Capítulo 38.

Esta vez no hubo necesidad de tantear y avanzar lentamente en las escaleras ya que la luz del interior era suficiente para permitirle ver los escalones en los que pisaba e inclusive los detalles de lo andrajosas que se encontraban y las grietas y astillas que tenían y hacían que diera la impresión de que tarde o temprano ellos iban a caminar por allí y la madera cedería bajo su peso.

Alleah y Fabricio habían colocado varios materiales de los cuales desconocía su utilidad en una mesa en la esquina frente a la escalera y estaban haciendo algo con ellos.

—-Creímos que algo te había pasado. —- le dijo Meléndez en cuanto lo escuchó bajar por los escalones.

—-O que ya no estarías dispuesto a volver. —-continuó Alleah quien parecía haber dejado fuera todas sus preocupaciones y lucía calmada y sonriente como si lo que fueran a hacer no fuera una locura, a Jonathan la hubiera visto hermosa de no haberse encontrado en un lugar como ese y en las mismas condiciones.

—-Solo tuve un pequeño altercado afuera ¿Me perdí de mucho? —- intentó quitarle importancia a la situación pero su voz no se lo hizo fácil y se quebró después de las primeras cuatro palabras.

—-No demasiado, pero ya casi estamos listos para empezar.

—-¿Empezar qué? —- preguntó mientras observaba los cambios que había sufrido la habitación, ahora en cada punta de la estrella del suelo había una gruesa vela que permanecía apagada y en cuatro de los espacios vacíos entre punta y punta estaban escritas las letras "Y, H, W, H", también habían esparcido algunas cosas en el suelo que suponía Jonathan, eran los extraños brebajes de Alleah, tal vez incluso algo en honor a los muertos que pensaba liberar.

Ese pensamiento le llevó a comprender por qué se veía tan alegre y pacífica en ese momento, desde que comprendió lo del hechizo de enlazamiento había estado más sombría y triste que nunca. Estaba pensando en el alma de su madre, en que lo único que quedaba de ella se encontraba atrapado en un plano al que no pertenecía.

—-¿Alleah? —- la llamó sin darse cuenta ni siquiera.

—-¿Qué pasa? —- respondió esta sin notar la expresión de lástima y compasión en su rostro. "En verdad quiere hacer esto, no podrá vivir si no la libera".

—-Emm... —- pensó en qué decirle para evitar demostrarle su compasión tal y como había estado a punto de hacer —- ¿Qué significan las letras Y, H, W, H?

—-Es una palabra, "YHWH", significa Yahveh, Jehová o Dios.

—-¿Por qué lo escriben así?

—-Porque en cuanto le colocas un nombre pronunciable a algo tan inmenso e infinito como Dios —- intercedió Fabricio en lugar de Alleah —- solo le estas quitando su poder, el ser humano tiende a hacer eso con algo que no entiende para lograr comprenderlo y lo ha hecho desde el inicio de los tiempos.

Jonathan prefirió no contestar y dedicarse a no estorbar allí, en donde todos excepto él tenían una tarea entre manos y sabían qué hacer. Fue entonces cuando divisó algo extraño en lo que no se había fijado hasta ese momento: La madera del suelo en el centro del pentáculo en donde se encontraba Akop estaba negra, como si hubieran hecho un pequeño incendio formando un círculo exacto con las llamas para dejar marcada esa forma.

—-Enserio no puede salir de allí. —- dijo Jonathan en voz baja pero en aquel lugar tan encerrado su voz se escuchó fuerte y clara como si un eco la siguiera.

—-¿No pensaste que fuera cierto? —- Alleah estaba a su lado y le colocó en su mano una bolsita con un cordel similar a la que habían usado antes.

—-Sí pero... No así —- respondió tomando la bolsita y colocándosela al cuello. Cuando lo hizo un poco del frío que lo había acompañado hasta ese momento se disolvió, pensó que se debía a algo psicológico, a que su mente le decía que con eso puesto iba a estar a salvo. Pero la ausencia de ese frío le permitió percatarse de algo que había ignorado hasta ese momento, algo le aprisionaba el pecho y el abdomen, algo así como un ardor leve que más que ser doloroso, era molesto.

No prestó demasiada atención a esa sensación ni tuvo la oportunidad para hacerlo. Fabricio avanzó hacia ellos y les pidió salir a solas un momento para meditar antes de comenzar con el ritual, le encomendó a Alleah seguir con los preparativos que ya estaban casi listos y a Jonathan acompañarla y ayudarla en lo que hiciera falta y subió las escaleras para salir por la trampilla dejándolos solos allí.