Pinta un mundo para mí ©

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Tony.

-No te quites de encima suya por si acaso- dijo Alexia en un susurro- Espera un rato y cuando veas que es seguro lo dejas libre- salió de la habitación sin dejarme tiempo a decir algo.

-¿Qué le pasa?- preguntó Javier.

-Por tu puta culpa he tenido que soltarle mis sentimientos de una forma poco romántica- espeté furioso- Y me has mordido, tres veces.

-Lo siento- susurró- Por lo de Alexia, no por haberte mordido- reímos un poco- ¿Cómo lo ha hecho?

-Ni idea, majo- dije divertido- Me debes tu vida.

-Epa, relájate majo, en esta situación todo es incómodo- ambos reimos otra vez.

-Me alegro de tenerte de vuelta, cabrón- dije pegándole en el hombro.

-Fue Maya, verdad- asentí- ¿Qué ha pasado con ella?

-Una bruja muy insensible y malvada llamada Eider debe estar encargándose de ella en estos segundos- dije como si nada- Y David la acompañará.

-¿En serio?- preguntó asombrado y asentí- ¿Por qué ahora?

-Alexia será la próxima Alpha de la manada de Darío, yo su Beta- hice una mueca- Creo que después de lo que acaba de pasar me va a mandar a la mierda, así que olvida la parte donde te digo que soy su Beta.

-Vaya...- susurró asombrado- Sí que estoy desinformado.

-Mucho- asentí de acuerdo con él- Daemon se ha dado cuenta de que es homosexual y se ha marchado con un amigo de Alexia- aguanté mis ganas de reír.

-¡¿Qué?!- gritó asombrado- ¡Eso es imposible!

-Como te lo cuento- dije suspirando dramáticamente- Incluso se besaron delante mía y de Alexia. Después me dislocó un brazo amenazandome para no contarle nada a Eider.

-¡Deja de tomarme el pelo!- gritó divertido.

-Es verdad- la puerta de la habitación se abrió.

-¿Qué es verdad?- preguntó Alexia curiosa.

-¿No es verdad que tu padre se dio un beso con tu amigo?- le pregunté mientras miraba a Javier.

-Oh, sí- comenzó a reír y la cara de Javier se desencajó.

-¡¿Entonces es verdad que os ha abandonado por tu amigo?!- gritó histérico.

-¿Quién te ha dicho eso?- preguntó Alexia riendo y yo estallé en carcajadas.

-¡Pero serás maldito!- gritó divertido- ¡Te vas a enterar!- hizo una mueca- Cuando me sueltes- los tres volvimos a reír.

-Mi padre se llevó un beso de mi amigo por culpa de Tony- dijo divertida- Y después él se llevó su brazo dislocado a casa.

-Siempre igual- me dijo Javier- ¿Podéis soltarme ya?

-Sí- dijo amablemente Alexia.

-Yo estoy cómodo así- Alexia me miró mal y suspiré resignado mientras me quitaba de encima de él- Vete de mi cama ya.

-Creo que esta noche dormiré aquí- dijo divertido- Y Alexia dormirá conmigo- La atrajo hasta la cama y la abrazó. Yo no pude evitar gruñir.

-¡Suéltala!- gruñí quitando a Alexia de sus brazos- La próxima vez te los arranco- señalé sus brazos.

-Me la debías por la broma de Daemon- le saqué mi dedo corazón.

-¿Quieres algo?- preguntó Alexia- Llevas mucho tiempo ahí atado.

-Mucho, mucho, mucho agua estaría bien- dijo suplicando.

-A beber a tu casa, majo- le dije y él me sacó su dedo corazón- Yo también te amo- le hice un corazón con mis manos. Javier salió de la habitación y cuando iba a hacerlo Alexia la tiré hacia mí- ¿Podemos hablar?- susurré para que no nos escuchara Javier.

-Después- susurró ella y asentí resignado.

-Epa, como sigas así nos vas a dejar sin agua- comenté divertido.

-Si me estás dando agua del grifo, cabrón- espetó divertido Javier.

-Es lo que hay- levanté mis hombros en señal de no me importa una mierda.

-Oye voy a dar una vuelta, necesito andar urgentemente- dijo despidiéndose de nosotros.

-¡Eso! ¡Vete ahora, desgraciado! ¡Primero me quitas el agua y ahora te marchas! ¡Cobarde, que eres un cobarde!- grité y escuché como Javier cerraba la puerta riendo- ¿Podemos hablar ahora?

-¿De qué quieres hablar ahora?- preguntó Alexia avergonzada.

-No era mi intención confesártelo todo así- dije a la vez que me acercaba a ella- Lo siento- susurré besando su frente.

-A mí me ha encantado- susurró avergonzada- Si salí de allí después de eso era porque estaba muy avergonzada.

-Menudo susto me has dado, cuchitura- susurré aliviado- Esto me lo tendrás que compensar.

-¿Cómo?- preguntó riendo.

-Con un beso estaría bien- dejé caer la frase. Alexia negó divertida pero poco a poco comenzó a ponerse de puntillas para intentar besarme- Pero mira que eres pequeña, eh- reí para segundos después agacharme hasta poder besarla mejor. Cuando introduje mi lengua en su boca, mi amiguito comenzó a despertarse- Mierda- susurré nervioso.

-¿Qué te pasa?- preguntó confundida.

-Nada, cuchitura- susurré aún más nervioso- Es muy tarde y se me ha olvidado que tenía que ducharme, tú ve a ver la tele- sin esperar respuesta de su parte salí a correr a mi habitación.