Entre Hermanos (Terminada)

Capítulo 18.

Llegue a casa y me extrañe al ver que Ryan ya no estaba, su auto no estaba en el garaje y la casa estaba vacía.

me recosté en el sofá y encendí la tele, había una película sobre un crimen y se veía muy buena porque era de terror. Cuando se terminó, inició un programa de anuncios publicitarios y algo muy curioso llamó mi atención, una máquina que te hace helados a solo 20 dólares, así que recordé el dinero que había dejado mamá para que sobre viviéramos esta semana.

Use el dinero para la máquina, pues era mucho lo que ella nos había dejado así que 20 dólares no iban a hacer falta, además tenía que verlo por el lado positivo, nunca tendría que esperar varias horas para que mis helados se congelen, solo con girar la máquina hará que salga mi helado en solo segundos, esto me emocionaba muchísimo, era como una niña pero que ahora tenía dinero para comprar sus juguetes de los anuncios.

Marque al numero que había en pantalla y espere, y espere y espere hasta que al fin una chica al otro lado de la línea atendió el teléfono.

-Buen dia ¿en que podemos servirle?

-hola, ¿esta es la empresa de las máquinas instantáneas para helados ?- sentí un peso a mi lado, alguien se había sentado conmigo en el sofá, no voltee a verlo pues ya sabia quien era.

-si señora, en que podemos ayudarle- dijo la chica al teléfono.

-quiero una de sus máquinas, ¿como seria el pago?

-¿que edad tiene señora?

-señorita, tengo 17 años

-pues creo que no tienes tarjeta de crédito, SEÑORITA, así que no podemos atenderla- la vieja esa se oía enojada, y yo la haría enojar más.

-pues mire, yo se que ustedes solo quieren maldito dinero, y yo les daré el maldito dinero así que o me atiende o perderá una cliente, tonta vieja amargada- y yo ya me empezaba a enojar también.

-esta bien niña, cálmese, cuantas maquinas quiere y a que ciudad, se lo enviaremos a pago contra entrega ¿le parece bien?

-Sí me parece bien

Le di todos los datos a la vieja para poder recibir mi envío y termine la llamada, según ella el envió llegaría en dos días y me recosté de nuevo aun sin mirarle la cara a Ryan, que estaba segura que era el, lo sentía aun a mi lado así que me acosté y puse mis piernas encima de sus piernas y me dedique a mirar mi celular.

-¿enserio vas a gastar dinero en una máquina para hacer helados?- pero esa no era la voz de Ryan, esa voz yo la conocía muy bien y sabía muy bien quien era, pero ¿este maldito como había entrado a mi casa?. Me paré de repente por el susto que me había dado y ahora si lo mire directamente a los ojos.

-Que haces en mi casa imbécil, ¿como entraste?

-Solo vengo a saludarte Alexa, ¡Porque eres así!- el idiota se levantó del sofá y me agarro la mano, la retire al instante.

-¡¿Cómo entraste a mi casa Luke?! -Luke era mi ex novio, duramos como cinco meses y me boto solo porque la maldita de Verónica le dijo que se acostaría con el si terminaba conmigo.

-El estúpido de Ryan dejó la puerta del Garaje abierta de la furia que llevaba, quien sabe con quien, yo iba pasando y quise ayudar así que la cerré.

-Oh dios mío, gracias por traer a este hombre para salvarme- noten el sarcasmo- cerraste el garaje adentrándote en el, ¿crees que te quiero aquí?

-ya Alexa por favor, sabes que me querías ver- el sinico este se volvió a sentar.

-no te sientes idiota, ¡quiero que te vayas ahora mismo de mi casa! Ya hasta creía que estabas muerto y ahora quieres aparecer de la nada, no te quiero ver y si no te vas llamaré a la policía.