Entre Hermanos (Terminada)

Capítulo 52

(POV MELANIE)

Era un gran momento, estar con Nathan era demasiado perfecto, ahora que éramos una pareja oficial estaba bien, todo iba bien, la escuela había terminado y me había graduado con honores, obviamente no tenía nada que ver el hecho de que estuviera con Nathan para obtener ese lugar, yo siempre he sido muy aplicada, no lo digo con sarcasmo ni nada de esas cosas.

Mi amistad con Alexa seguía intacta, aunque ella se había distanciado un poco tenía que entenderla, ella me contó sobre sus líos con una gente extraña a la que les llamaban "los nórdicos", mafiosos si corazón probablemente, tenían a Ryan encerrado, ninguno de los dos había podido terminar la escuela y eso me daba mucha lástima, ni siquiera Nathan podía hacer algo por ellos, ya era más que obvio que la oportunidad de salir de la escuela había caducado para ellos.

Ahora tenía que preocuparme por mi y por mi futuro, ya había terminado la escuela y tenia que pensar en que hacer despues de esto. Mis padres decidieron dejarme elegir lo que yo quisiera hacer y a donde quisiera ir, yo no lo sabía aún y tenía que descubrirlo. Empecé a buscar por todas partes un buen sitio para estudiar lo que siempre había querido, derecho. No quería irme de la ciudad, aquí tenía todo lo que nunca tuve y no quería dejar lo bonito y poco que tenia de lado. Aunque Nueva Orleans no era muy grande, aqui tenia que encontrar un buen lugar para estudiar.

Nathan trataba de convencerme de irnos de aquí, de largarnos de Nueva Orleans e irnos a una de las grandes ciudades, como Washington o incluso a Nueva York, que el conseguiría trabajo en alguna parte, yo no quería irme a vivir con el aún, no sólo porque apenas llevamos como seis meses de relación, si no porque mis padres no lo iban a aceptar, estaban muy enchapados a la antigua y no me dejaran irme a vivir con alguien con el que no estaba casada. Yo no quería irme, me había enamorado tanto de esta ciudad que no quería abandonarla, y abandonarla sería dejar a Alexa, a mamá y papá, o a Ian.

Ian ya no era un problema, o eso creia yo, nos habíamos vuelto buenos amigos, hablábamos de todo tipo de cosas, ocupaba el espacio de Alexa desde que ella dejó de venir a la escuela, Ian era una buena compañia, era alguien agradable y había dejado de coquetearme o intentar algo conmigo, desde que le dije sobre Nathan dejó de insistir, lo cual me alegro y me tranquilizo, ya que no tenía que preocuparme por elegir a uno de los dos, a pesar de que Ian me había gustado mucho, yo estaba más que segura de lo enamorada que estaba de Nathan.

Pasaba mucho tiempo en casa de Nathan, ya le había dicho a mis padres de mi relación con el y extrañamente estaban de acuerdo, aunque mi padre no mucho, prefería estar en su casa que en la mía, donde siempre estaban presionando para elegir algo pronto.

-Preciosa, ¿quieres pedir algo de comer?, la tarjeta está en el bolsillo de mi chaqueta- Dijo Nathan desde el baño, cada vez nos estábamos haciendo mas gordos, pedíamos siempre cosas a domicilio porque Nathan cocinaba horrible y yo siempre hacía lo unico que sabia hacer, pasta, el ya estaba cansado de la pasta.

-Claro amor- Le grite para que pudiera oírme ya que se estaba duchando, busque en el telefono la aplicacion de los domicilios para pedir algo delicioso, busque Sushi pero todo estaba demasiado caro, no quería gastar mucho dinero de su tarjeta, decidí pedir dos combos de hamburguesas con limonada natural.

Escuche como el agua del chorro del baño dejó de correr, camine hacia la chaqueta para buscar la tarjeta y poder pagar online, busque en todos los bolsillos de la chaqueta pero no la encontre, lo unico que encontre fue una pequeña cajita negra, la intriga no me dejaba respirar, así que la abrí, un precioso anillo plateado se asomaba en ella, era realmente hermoso, las lágrimas me querian salir, el anillo tenía un diamante grande en forma de luna, sentí unas manos posarse en mi cintura.