Entre Hermanos (Terminada)

Capítulo 39.

Dos semanas después
(POV ALEXA)

Aún no podía moverme ni abrir los ojos, hacía todo lo que podía e intentaba todos los días hacer algo por mi misma, pero no tenía la suficiente fuerza para querer volver.

Mucha gente había venido a verme y a hablar conmigo, a pesar de no poder responderles si podia escucharles. Todo el mundo había venido incluyendo Melanie e Ian, pero aún no había escuchado la unica voz que quería oir, la de Ryan.

-Ale, necesito que despiertes, te necesito aquí, no quiero perder a nadie más en mi vida- era la voz de Daniel, lloraba, podía sentir como sus lágrimas caían en mi pecho, yo estaba muy enojada con él por lo que me había hecho, pero solo quería despertar para abrazarlo y decirle que lo perdonaba por todo.

-Quiero confesarte que, fui yo quien envió esas fotos a "S", quería que pagarás por escogerlo a él y no a mí, pero ahora solo quiero que despiertes y que estes bien, y si puedes perdonarme algún día sería muy feliz- dijo susurrándome al oído, no entendía porque susurraba si estábamos solos.

-Chico, se terminó el tiempo de visita, es hora de que te vayas- dijo la voz de mi enfermera, ya me había acostumbrado a su voz, era dulce y todos los días trataba de imaginar cómo era su cara -Y usted también señor Collins, es hora de que se vaya, ha pasado mucho tiempo aquí ¿no le gustaría descansar?

-No gracias, quiero estar aquí hasta que despierte- por dos semanas no había escuchado su voz, pero estaba ahí presente todo el tiempo en mi habitación, él no quería hablarme. Una lágrima corrió por mi rostro, era la cosa más buena que me había pasado en las dos semanas que llevaba dormida, había llorado, pero también era lo más doloroso que podía sentir, Ryan no quería hablarme.

-Ey, ¡enfermera!- Ryan grito.

-¿Si?

-¡Alexa está llorando! Es una reacción ¿no?- su voz sonaba alegre -¿Eso es bueno cierto?

-Si, es muy bueno.

-porque crees que haya sido- preguntó esta vez en un susurro.

-Bueno, tal vez fue por el chico que se acaba de ir, o por qué oyó tu voz- dijo la enfermera -No había oído nunca una palabra salir de tu boca en el tiempo que llevas aquí, tal vez ella tampoco, o ¿le hablaste alguna vez?

-No

-Intenta hablarle, te dejare unos minutos a solas y luego tendrás que irte, ¿está bien?- no respondió con la voz pero pude imaginar cómo asentía con la cabeza -Bien pues, voy a contarle al doctor que hemos tenido un avance con esta preciosa, no tardes mucho.

La lista de personas que habían venido a visitarme era larga, pero nadie tan importante como él.

-Ale, lo siento- empezó a llorar fuerte, su voz era temblorosa, lágrimas salían de mis ojos cerrados -Lo siento mucho, todo esto es mi culpa, no sabía cómo hablarte ni cómo disculparme, pero te amo, te amo más que a nada en este mundo, debí ir tras de ti, debí haberte seguido- depósito un pequeño beso en mis labios como si con eso fuese a despertar como la bella durmiente, aunque trate de hacerlo para que fuera como un cuento de hadas pero no pude, aun no podía abrir mis ojos.

-Me merezco que Ian me haya golpeado, después de que salieras corriendo, me amenazó con que si algo te pasaba me iba a matar, cuando escuchamos la noticia de tu accidente realmente quería que me matará, por favor perdóname

Quería despertar ese maldito momento, pero había una parte de mi que me decía que nada iba a cambiar, que si despertaba yo debía seguir con mi vida y el con la suya, no me quería seguir dañando a mi misma.

-Si no quieres volver a verme lo entenderé, me iré de casa y te dejaré vivir tu vida, te mereces a alguien mejor que yo, pero porfavor, despierta.

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