No Me Olvides- 3 (Draco Malfoy)

19

-¡Ugg!- dijo Leash haciendo una mueca- Esto sabe horrible- se quejó

-Es tu receta- se justificó Zack tomando la botella de sus manos.

Leash Salazar no estaba viva, podía parecer que sí, que tan sólo estaba muy cansada y abatida, pero Leash Salazar no estaba viva, apenas se estaba recuperando, estaba en un pequeño espacio entre la vida y la muerte, sin estar en una u otra.

-Bueno, pero está funcionando- dijo señalándose

No había pasado ni una semana desde que Leash despertó y su cuerpo estaba desechando todo lo que se había acumulado desde su muerte, Zack la cuidaba de día y noche, dándole las dosis de la poción que esperaban, regresará a Leash completamente.

-¿Qué estabas haciendo en la escuela que pensaste "Oh sí, haré una poción para regresar a los muertos"?- la cuestionó Zack preparando una comida para los dos.

Leash se levantó con esfuerzo de la cama y se tomó unos segundos para incorporarse de pie.

-Tenía un amigo que era muy bueno en pociones, los dos queríamos ser mejor que los demás entonces decidimos crear nuestra propia poción- explico- Pero nos dimos cuenta de lo peligrosa que podía ser entonces nunca la probamos, no sabía si funcionaba- abrió la puerta del refrigerador y sacó una cerveza fría de ella y la abrió con la mano

Zack volteó al escuchar la lata abrirse.

-¿Es enserio Stephanie?- le preguntó molesto, señalándola con su cuchara de madera

Leash le dio un sorbido a la cerveza y le levantó el dedo con descaro y Zack la miró con desaprobación.

-Soy mayor que tú, cállate- lo regaño con una sonrisa

-Ah claro, usa la carta de la edad- dijo dándole la espalda, volviendo a la receta.

Leash se sentó en la silla del comedor a tomar su cerveza, se sentía horrible, increíblemente débil y cansada, pero cada día se sentía un poco mejor y si seguía tomando la poción, las cosas seguirían mejorando, pero lo que verdaderamente necesitaba era lo que le había dejado a aquel chico.

-Entonces- Zack puso un plato enfrente de Leash y le sirvió la pasta que había cocinado- ¿Cual es el plan ahora?- preguntó

Ahora que tenía otra adición a su casa, Zack había creado otra silla de madera que hiciera conjunto con su anterior, la acercó a la mesa y empezó a comer con ella.

-La poción logró despertarme y me mantendrá despierta por unos meses- le explico- Pero para poder regresar, verdaderamente- aclaró- Necesito tres cosas esenciales- se metió un pedazo de pan a la boca y cuando terminó de masticar, respondió- Esperanza, el recuerdo de alguien y amor- concluyó

-Suena como un cartel religioso- se burló Zack

-Pues esas tres cosas son más poderosas que cualquier tipo de magia- defendió Leash

-Pero ¿Esperanza, amor? ¿De quién?- preguntó

-Mías- dijo Leash como si fuera obvio

-No sé con quién crees que hablas pero vas a tener que ser más específica- le pidió Zack

Leash terminó de comer lo que le quedaba en el plato y se levantó para servirse más.

-Cuando cree esa poción en Hogwarts- explicó- Teníamos la teoría que la poción sólo ayudaría momentáneamente, se necesitaría algo más fuerte que eso, algo como sangre de unicornio- dijo regresando a la mesa- Pero usar sangre de unicornio es inhumano, entonces busqué cosas que tuvieran el mismo efecto que la sangre de unicornio-

-Las propiedades de un recuerdo dan el mismo efecto, pero al juntarlo con esperanza y amor, su fuerza es capaz de traer a alguien a la vida al instante- explicó

-Técnicamente solo se necesita el recuerdo y la esperanza- aclaró- Pero el amor da fuerza y yo necesito recuperarme, rápido- le recordó- Entonces, hace muchos años, extraje un poco de mi amor y esperanza, las tuve en mi casa y las guardé con instrucciones de entregarlas a las personas de mi testamento, yo volví a escribir mi testamento semanas antes de morir- concluyó

-¿Escribiste varias veces tu testamento?- preguntó Zack

-Cuando tienes tantos enemigos, tienes que asegurarte de dejarlo todo en orden- le explicó- Para que la esperanza y el amor tengan efecto, las deben cuidar gente que me den esas emociones- dijo comiendo- A Harry le deja la esperanza y Lidia ya la recuperó y el amor se lo deje a...- pero no pudo terminar la oración al recordar quien tenía la botella.

Se quedaron en silencio unos segundos, Zack jamás sabía que decir cuando ella lo mencionaba, ella tenía toda la razón para molestarse con el chico, pero Zack podía entender perfectamente por que lo había hecho, no quería decir que estuviera bien, pero si lo entendía.

-Ojala pudiera ir a ayudarte- dijo Zack con tristeza y Leash regresó a la conversación.

Estiró su mano hacia él y le dio un apretón a su mano.

-Yo sé Zack, pero hice una promesa, no puedo dejar que nada te pase- le recordó- Pero te prometo que en cuanto me recupere y pueda salir, buscaré a mi padre y acabaré con él y juntos buscaremos una solución a esto- le dijo decidida.

Zack asintió con la cabeza, sabía que ella decía la verdad, jamás le había mentido, por años, los dos habían buscado una solución a la maldición que él tenía, pero hasta ahora, todo había sido en vano.