-Eres tú, en verdad eres tú- suspiró por quinta vez Jayden
Los mortifagos habían huido en cuanto Leash apareció, los cuerpos de muchos estaban tendidos en el piso, todos estaban apenas procesando lo que había pasado. Caminando alrededor de los cuerpos que había en los alrededores
-Números- dijo Leash a nadie en específico
-30 de ellos- respondió Marelyn aún sorprendida- seis nuestros-susurró sin poder verla a la cara- Me salvaste- repitió aún sin poder creerlo
-Debieron haber sido cero de nuestra parte- dijo Leash con un gruñido- Nombres-
-Melanie, James, Niam, Roland, Nala- se detuvo para tragar saliva- Y Lidia- susurró con tristeza
Leash cerró los ojos e hizo puños sus manos, la casa permaneció en silencio, nadie se atrevía a decir nada.
-Eres tú- repitió Jayden rompiendo el silencio
Leash volteo rápidamente y lo observo, haciendo que el chico temblara en su lugar. Era un poco más alto que los demás, con el cabello blanco y ojos verdes que caracterizaba a todos
-Deja de repetir eso Jayden- susurro calmada
El chico abrió los ojos sin poder creerlo, volteó a su alrededor para estar seguro que los demás también habían escuchado.
-¿Sabes mi nombre?- dijo en lo que apenas fue un susurro
Leash río y todos la observaron confundidos, no sólo era la primera vez para muchos que la conocían, pero escucharla reír hacían la situación aún más bizarra. Lo que sabían de Leash era que esa chica era su hermana mayor, una bruja entrenada para pelear, una de las más poderosas brujas y personas, no esperarían escucharla reír.
-Sé el nombre de absolutamente todos- dijo dando una vuelta para poder verlos- Son mis hermanos, ustedes son mi familia- aseguró- Y justo por eso, deben entender que esta casa es la reliquia familiar más importante- camino por la casa, con su multitud detrás de ella.
Volver a caminar esos pasillos la llenaban de calor y felicidad, Hogwarts era un lugar que ella estimaba mucho, pero esta casa, esta casa era su hogar.
-Madre y yo vivimos en esta casa por muchos años, ocultándonos de los Slytherin- dijo la pelirroja acariciando las paredes
-¿Ocultándose de padre?- dijo alguien
-Sí, ocultándonos de padre- dijo Leash un poco tensa- Aquí refugiamos a varios magos, amigos, criaturas, incluso hasta muggles- todos murmuraron, Leash volteo los ojos- Sé que todos ustedes fueron criados por sangres puras y que les han creado demasiadas ideas erróneas sobre ellos y los sangre mestiza y "sucia"- dijo haciendo comillas con las manos, se volteó para darles la espalda
El resto de los hermanos mayores estaban en el comedor, observando como los jóvenes seguían a Leash, era sorprendente la forma como podía entrar al cuarto y tener absolutamente todo el control de este.
-Sin embargo, eso no es así, la mayoría de ustedes son muy jóvenes, acaban de abandonar la casa de padre, jamás me habían conocido- Leash les sonrió con compasión- Están asustados y tienen cada razón para estarlo, esta guerra, va a ser de lo peor que se van a enfrentar- asintió, sin embargo fue interrumpida
-¿Vas a guiarnos?- preguntó una vocecilla en la multitud
-Jenny- sonrió Leash una vez que la identificó- No tengas miedo, levanta la voz- la motivó
-¿Vas a guiarnos?- Jenny habló más alto- ¿Vas a llevarnos a la guerra? ¿Vas a lanzarnos a una guerra en la cual no tenemos ningún tipo de experiencia?- Jenny, al igual que todos, tenía el cabello blanco y ojos verde esmeralda, más ella lo tenía corto y cargaba unos lentes que cubrían sus ojos, se fue abriendo paso hasta llegar frente de Leash- Por que puede que sepas nuestros nombres, pero la verdad es que no sabes nada de nosotros-Jenny era de las más pequeñas, había salido de la casa de padre hacía solo 5 meses
ESTÁS LEYENDO
No Me Olvides- 3 (Draco Malfoy)
FanfictionPara ganar una guerra se deben hacer sacrificios. Leash Salazar sabía eso y estaba dispuesta a enfrentar las consecuencias de sus actos, pero todos los que la rodeaban no estuvieron listos para aquella decisión. La oscuridad ha llegado al mundo mági...