No Me Olvides- 3 (Draco Malfoy)

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-¡Mierda!- gritó Leash

Se sostuvo el hombro izquierdo en dolor, intentando detener las punzadas de fuego que sentía en ella.

-¡Leash!- Trisha hizo que se recargara en ella- ¿Que tienes?- pregunto preocupada

Leash respiro hondo intentando no gritar de nuevo y alertar a toda la cuadra, ya que se en encontraban en la calle.

-¿Que tan mal se ve?- Leash se desabotonó los primeros botones de su playera, mostrando las venas negras y punzantes que salían de su pecho y se extendían hasta su hombro izquierda que estaba ya casi cubierto y su cuello.

- Muy mal- dijo Sade- Seguro están teniendo sexo- comentó al ver el estado de Leash

Aún en dolor, está le metió un golpe en el brazo, haciendo que Sade soltara un gruñido de dolor.

- No seas imbécil- le dijo rechinando los dientes- Esto no es algo de carne, ni sexual, si esto me está doliendo así- suspiro con tristeza

- Es por amor- dijo Trisha

- Déjame, ya estoy bien- mintió, soltándose del agarre de su hermana, aún con el dolor presente en su piel

Trisha asintió y regresó a la casa a asegurarse que el resto de los planes se cumplieran, dejando a Sade y Leash solos en la calle vacía.

- No había visto que te doliera tanto- señaló Sade- ¿Nos has estado mintiendo o desde hace cuanto llevas así?- pregunto

Leash lo miro enojada, pero Sade y ella eran los más cercanos, no podía fingir con él, Sade mas que nadie la conocía y sabía como esto le estaba afectando, solo estaba preocupado por ella.

- Desde el primero de Septiembre, pero se está poniendo peor- admitió- Al principio eran pequeños dolores, unos más fuertes que otros, supuse que eran coqueteos ¿Pero esto?- señaló su cuello- Esto es mucho más, tengo que recuperar ese collar antes de que ese tonto me debilite más- negó con la cabeza

No lo admitiría, pero a Leash no le molestaba el collar, ni si quiera estaba enojada, Leash estaba devastada, le destruida saber que Draco no la recordaba y que no la amaba y aún peor, que se estaba enamorando de alguien más.

-¿Y ya sabemos a quien le vamos a cortar la cabeza?- pregunto Sade

- A ti si sigues haciendo preguntas estupidas- lo miro enojada

- Vamos ¿Me estas diciendo que no estas ni un poco molesta con la chica que te lo está quitando?- se burlo Sade

Leash se detuvo de caminar y volteó a ver a su hermano

- Se perfectamente quien es- contestó Leash calmada- Sin embargo eso no me importa, por que si así quisiera, lo puedo recuperar- dijo segura sin embargo no lo estaba- Aparte, deja de meterte en mi vida amorosa, yo jamás te pregunto de la tuya, no seas entrometido- le reclamo

- La diferencia es que tu vida amorosa marcará el destino de todos, así que si, debes mantenerme al corriente de tu vida amorosa- le sonrió con descaro- Y sobre la mía, no hay nada que contar ya que no me dejas ver a Zack- suspiro al decir su nombre

-Encuéntrale una cura a su maldicion y te aseguro que se casa contigo- le sonrió de regreso

-¿Segura que estas bien? Por que lo que te espera tampoco es fácil- señaló a la tienda de los Weasley-¿Quieres que vaya contigo?- pregunto

- No, quédate afuera por su necesito algo, pero haré esto sola- Sade asintió

-¡George!- gritó Fred- ¿Donde dejaste el cargamento de hoy?- Fred salió de la pequeña oficina que tenían en la parte de atrás

-¡George!- lo llamó de nuevo, lo encontró en frente de la puerta principal, de espaldas a él, sin moverse- ¿Donde está eso?- pregunto de nuevo

Fred ahí noto que había una persona en la puerta observando a George, pero el cuerpo de su hermano no le dejaba ver bien.

-Hola, ya estamos cerrando pero si necesita algo podemos atenderle- ofreció Fred con una sonrisa, acercándose a la puerta, pero se detuvo al ver la cabellera roja sangre

- Hola Fred- sonrió Leash nerviosa