No Me Olvides- 3 (Draco Malfoy)

21

Astoria y Draco ya no regresaron con Blaise, Daphne y Theodore y eso estaba matando a ella.

-Ese hijo de puta- dijo Daphne caminando de lado a otro en el compartimiento

-Dale un descanso, ha tenido unos meses muy difíciles- dijo Theodore acostándose en uno de los asientos y Daphne dejó de caminar.

-¡Ah!- exclamó ella- Y por qué se ha estado sintiendo mal ¿Debo dejarlo que se aproveche de mi hermana?- preguntó molesta

-¿Aprovecharse de ella?-preguntó Blaise confundido- Tan sólo se fueron a hablar Daphne- le recordó Blaise señalando la puerta

-¿Y por qué no ha regresado?- le preguntó

-No es mi asunto y tampoco tuyo- le recordó con severidad- Además, Astoria no es ni una niña pequeña, ni tonta, ella sabe tomar sus decisiones- afirmó

Daphne sabía que tenía razón, pero no podía evitar preocuparse por su hermana, cada decisión que tomaba, la tomaba por ella y Astoria no lo podía ver en ese momento pero Daphne lo estaba dando todo para protegerla y no quería que Malfoy lo arruinará.

El tren se detuvo haciendo que todos se levantaran de sus asientos, Astoria se levantó y observó a Draco.

-¿Vienes?-le preguntó

-Si, en un minuto-asintió, Astoria asintió también y salió del compartimento, Draco esperó unos minutos para que todos salieran y cuando lo hicieron cerró las dos puertas que daban acceso a su vagón y con una sonrisa volteó hacia la zona de equipaje.

-Buen intento Potter-río- ¡Petrificus Totalus!-apuntó hacia Harry haciéndolo caer en el piso

Harry, incapaz de moverse, no tuvo oportunidad de escapar, Draco le arrebató la capa de invisibilidad de encima para poder observarlo

-Creo que nunca te cansas, siempre metiéndote en lo que no te incumbe-acto seguido le dio una patada en el estómago- Ese Weasley y tú deben aprender de dejar de meterse en asuntos ajenos-golpeó a Harry directamente en la nariz haciendo que chorros de sangre cayeran de esta.

-¿Qué esperabas escuchar Potter?-le preguntó con desprecio-¿Qué crees que estoy ocultando?-lo observó con curiosidad

Pero Harry no pudo contestar, el tren anunció que iba a regresar a su zona de partida, por lo cual Draco se apresuró a cubrir a Harry de nuevo y tomó sus pertenencias para salir de ahí.

Para cuando Draco llegó a los carruajes, ya sólo quedaba él y cuando volteó a su espalda, Harry y Luna se acercaban, el chico con la nariz sangrando así que Draco se dirigió a subirse a los pocos carruajes que quedaban, pero se detuvo al observar los animales que jalaban de estas.

Eran una especie de caballos esqueléticos, su color era entre gris y negro y parecía que sacaban humo de ellos.

-¿Qué es eso?- preguntó Draco confundido, había estado usando los carruajes desde su segundo año y jamás los había visto

-Thestrals- dijo Luna que al fin había llegado, Harry guardó sus instintos de regresarle el golpe a Draco y sólo se quedó al lado de la chica.

Draco la miró confundido, aquella chica era muy extraña, pero si tenía respuestas, estaba dispuesto a escucharla.

-¿Qué hacen aquí?- le preguntó

-Siempre han estado aquí- dijo Luna- Pero hasta ahora se han revelado a ti- explicó- Solo lo pueden ver las personas que hayan visto la muerte- le dijo

Draco quiso hablar, explicar que él no había visto a nadie morir, pero un relámpago verde cruzó por su memoria y el sonido de algo romperse lo hizo quedarse callado. Le pasaba seguido, tenía rayos de fragmentos de momentos que no recordaba, pero jamás había tenido ese y lo había aterrorizado.

-¿Estás bien?-le preguntó Astoria

Se encontraban sentados en el Gran Comedor en la mesa de Slytherin, Potter estaba limpiándose la sangre del rostro con un trapo mojado y Dumbledore estaba hablando acerca de unas reglas.

Draco miró alarmado a su alrededor, sabía cómo había llegado ahí, apenas había pestañado, estaba con Luna en las afueras del castillo y ahora estaba en el Gran Comedor.

-¿Qué pasó?-preguntó confundido

-Te quedaste dormido-dijo mostrando lo obvio

-No, cuando el tren se detuvo, ¿Qué pasó?-preguntó intentando asimilar todo

-Te quedaste en el tren, te espere en las carretas y después de unos 8 minutos viniste un poco pálido, llegamos aquí y te quedaste dormido-explicó Astoria- De verdad creo que no estás bien Draco- dijo Astoria preocupada

-No, no, en verdad estoy bien, solo cansado-dijo tratando de convencerla, tomó su mano en un pequeño apretón y lo volvió a sentir, sin embargo resistió y luego apartó su mano con más calma, otro rasguño se alojaba en ella, como si algo no quisiera que estuviera con Astoria.