Capítulo 34

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Narrado por Ana

Pablo:
-¿Qué hacéis aquí?

Ana:
-Me los he encontrado por el camino. Me han dicho que nos querían dar una sorpresa.

Saludaron a mi familia y colocaron sus cosas en la habitación.

Nerea:
-Tía Ana. Te he echado de menos.

Todos:
-Y yo!

Ana:
-Yo a vosotros también pequeños.

Daniel:
-¿Podemos ir a jugar al parque?

Ana:
-Claro. Y os voy a presentar a mis sobrinos.

Les presenté y se fueron a jugar. Dejé el bolso en mi habitación y volví al comedor.

Ana:
-Pero sentáos. Voy a traer más zumo, más café, más tostadas..... bueno, más de todo.

15 minutos después...

Llevé todo al comedor y serví a los demás.

Carmen:
-Ay cuñada, eres de lo que no hay.

Raúl:
-No hace falta que nos sirvas.

Ana:
-Pss, si no me molesta.

Pablo:
-Anda ven aquí y come algo.

Me agarró del brazo y me sentó encima de él.

Ana:
-Gracias, pero no tengo ganas. Además, me comí algo antes de salir.

En ese momento escuchamos la puerta. Me levanté y fui a abrir. No me esperaba que fueran ellos.

Todos:
-Holaa!!

Ana:
-¿Qué hacéis aquí?

Silvia:
-Queríamos haceros una visita.

Ana:
-¿Con la maleta?

Ruth:
-Es que como la otra vez se canceló lo de quedarnos aquí, hemos pensado que podríamos quedarnos esta semana. Y luego nos vamos juntos a Barcelona.

Ana:
-A mi no me importa pero es que no tengo sitio para los siete.

Falete:
-¿Pero no habías reformado la casa?

Ana:
-Sí, pero es que tenemos la casa llena. Está mi familia y la de Pablo.

Adrián:
-Pues entonces mejor nos vamos.

Todos:
-Sí.

Ana:
-Esperad, se me ha ocurrido una cosa. Aunque nosé si se podrá hacer.

Todos:
-¿El qué?

Ana:
-Después lo veréis. Pero ahora dejad las maletas en el salón que os voy a presentar.

Dejaron sus cosas y los llevé al comedor.

Ana:
-Familia han venido los compis de TCMS.

Pablo:
-Madre mía. Cuanta gente. Pero qué sorpresa!!

Se saludaron y les presenté a todos. De repente vinieron todos los niños corriendo hacia ellos, puesto que los conocían a todos de verlos en la tele. Y las niñas de aquella vez que fueron a Barcelona con nosotros. Se pusieron a jugar con ellos y yo me metí en mi habitación para hacer una llamada.

(Conversación telefónica)

Marcos: Anita!! ¿Cómo estás?
Ana: Muy bien ¿y vosotros? ¿que tal está la pequeña?
Marcos: Muy bien. Está empezando a caminar.
Ana: Qúe bien!! Me alegro mucho. Bueno, supongo que sabrás lo que te voy a pedir.
Marcos: Jajaja. Pues me supongo. Pide por esa boquita guapa.
Ana: Pues mira. Quería hacer otra habitación, añadir baños y agrandar un poco la mesa grande del comedor. Lo que pasa es que tiene que ser para esta noche y no sé si dará tiempi. Tampoco quiero presionarte, ni agobiarte, ni quitarte tiempo para tu vida personal.
Marcos: Tranquila. Tengo tiempo de sobra para mi familia y mi vida. Además con todo lo que me has ayudado... por ti hago lo que sea. Y sabes que tengo a la mejor plantilla de trabajadores. Venga dime.
Ana: Eso es verdad. Pues te digo, la habitación que tenga dos baños completos, 7 camas para adultos, ahí ya miras tú el tamaño que sabes más, y 4 roperos, ni muy grandes ni muy pequeños. Y que en la pared ponga Silvia, Ruth, Edu, Adrián, Falete, Vicky y El Sevilla. Y el logo de TCMS de este año. La mesa del comedor más grande. Como para 20 personas. Y... ya está. Sería para las 22:00 más o menos. Pero de verdad, si no puedes no pasa nada.
Marcos: Lo tendré hecho. Lo único que a lo mejor tardo una hora más.
Ana: Vale, me las arregleré. Oye muchísimas gracias. No sé como agradecértelo.
Marcos: No me des las gracias, ya has hecho suficiente por mí.
Ana: Tampoco es para tanto.
Marcos: Claro que lo es. Pues nada, estaremos en tu casa en 45 minutos. ¿Le pido las llaves a tu madre como siempre?
Ana: No, espérame en la parte de atrás de la casa y te las doy yo.
Marcos: Vale. Después nos vemos. Muchos besos para todos.
Ana: Igualmente.

Un paso detrás de ti [TERMINADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora