Un paso detrás de ti [TERMINADA]

Capítulo 97

Me llevo a Diego y dejo que ellas sigan durmiendo. Cuando llego a la cocina están todos menos mis sobrinos.

Pablo:
-Buenos días!

Todos:
-Buenos días!

Tamára:
-¿Dónde están tus princesitas?

Pablo:
-Siguen durmiendo y me he traído al peque para que descansen.

Raúl:
-Ya me imagino como se te ha quedado la cara al despertarte y verlas dormiditas.

Pablo:
-La sonrisa se me forma sola.

Cuando llevamos un rato hablando alguien me agarra la pierna. Miro hacia abajo y veo a mi princesita sonriéndome. Estira los brazos y yo la cojo.

Daniela:
-Papá!

Todos:
-Oooh.

Carmen:
-Ay que me la como!!

Pedro:
-Oye ¿y Ana?

Pablo:
-Pues no sé, voy a buscarla.

Dejo a los niños con ellos y me voy a la habitación. Abro la puerta despacio y pillo a Ana en ropa interior. Cierro la puerta y me acerco a ella por detrás. Rodeo su cintura y apoyo la cabeza en su hombro.

Pablo:
-Buenos días.

Ana:
-Buenos días.

Pablo:
-¿Sabes? Estás muy sexy así. Dije empezando a besar su cuello.

Poco a poco fui bajando mis manos hasta su cintura.

Ana:
-Ummm..... cariño no sigas por ahí.

Pablo
-¿Por qué? Dije metiendo las manos por debajo de sus braguitas. Ella me paró y se dio la vuelta.

Ana:
-Porque pierdo el control y están todos fuera, ahora no puede ser.

Me dio un beso y volvió a su posición inicial para posteriormente vestirse. Hicimos la cama entre los dos y fuimos a la cocina. Cuando entramos Diego Y Daniela fueron corriendo hacia ella y Ana se puso a su altura para poder abrazarlos, era una estampa para enmarcar.

Daniela y Diego:
-Mami!

Ana:
-Buenos días pequeños!

Mientras ellos se daban los "Buenos días" yo salí de la cocina para hablar con mi madre.

Sofía:
-Ay hijo no sabes lo feliz que estoy al volver a veros tan bien.

Pablo:
-Se les echaba de menos.

Sofía:
-Y tanto, bueno ¿qué me querías decir?

Pablo:
-Te quiero pedir algo.

Sofía:
-A ver, dime.

Pablo:
-¿Os podríais quedar con los niños esta noche? Es que quiero invitar a Ana a cenar y pasar un rato a solas.

Sofía:
-Claro que sí, los niños nos los quedamos cuando queráis, mis nietos no molestan son unos niños fantásticos. Y no hace falta que me des explicaciones, así habláis vosotros tranquilos de vuestras cosas y recuperáis aunque sea unas horas de ese tidmpo perdido.

Pablo:
-Gracias.

Sofía:
-No hay de que cariño.

A media tarde nos fuimos a mi casa. Descansamos un rato, nos duchamos juntos y nos vestimos. Una vez más Ana estaba preciosa, me siento el hombre más afortunado del mundo cada vez que la miro. Cogimos nuestras cosas y nos montamos en el coche.

Ana:
-Bueno ¿y a dónde me vas a llevar?

Pablo:
-No he reservado en ningún sitio pero ya sé a qué restaurante vamos a ir.