Un paso detrás de ti [TERMINADA]

Capítulo 70

Nos tomamos el café tranquilamente y Pablo sacó mi maleta para empezar a hacerla.

Ana:
-Espera, tengo que hacer algo antes.

Pablo:
-¿El qué?

Fui a las habitaciones y arranqué el papel que tapaba los nombres. Y pos último destapé el de Pablo. Me quedé de pie mirando la pared y Pablo se levantó de la cama y me abrazó por detrás apoyando la cabeza en mi hombro.

Pablo:
-No me había dado cuenta de que eso estaba ahí. ¿Sabes?, pensé que lo habías quitado. La última vez me dijiste que solo lo ibas a quitar si pasaba algo muy muy fuerte o si yo te lo pedía.

Ana:
-Ya... Los iba a quitar pero no me sentía con fuerzas y no quería quitarlo, aunque cada vez que lo veía me derrumbaba. Por eso Ruth tomó la iniciativa de taparlos. Eso me ayudó bastante. Ahora me alegro de que haya hecho eso.

Pablo:
-¿Por qué?

Me giré y agarré su cara.

Ana:
-Porque al final todo era mentira. Y porque has vuelto.

Pablo:
-Nunca me hubiera rendido. Tenía muy claro que no te iba a dejar escapar. Te quiero.

Ana:
-Y yo a ti. Dije antes de besarnos.

Preparé la maleta y nos subimos al coche rumbo a.... lo desconocido, para mí. Llegamos al aeropuerto y bajamos las maletas y entramos.

En el avión...

Ana:
-¿A dónde vamos?

Pablo:
-Es una sorpresa, no te lo puedo decir.

Ana:
-Venga porfaa.

Pablo:
-Te digo cuando estemos en el hotel.

Ana:
-Cuando estemos en el hotel ya no hará falta que me lo digas porque ya lo sabré.

Pablo:
-Muy bien!! Has aprendido algo!!

Ana:
-Ja ja ja.

Horas más tarde...

De camino al hotel no podía parar de mirar a mi alrededor. Era alucinante. Llegamos a la habitación y me abalancé sobre mi chico dándole besos por toda la cara.

Ana:
-Gracias, gracias, gracias. Te quiero, te quiero muchísimo.

Pablo:
-Jajaja y yo a ti. ¿Te gusta?

Ana:
-Me encanta.

Pablo:
-¿Habías estado alguna vez?

Ana:
-No, pero siempre he querido venir. ¿Y tú?

Pablo:
-No, estaba esperando para venir con mi pareja.

Ana:
-¿Y por qué no has ido con las demás?

Pablo:
-Pues a parte de que no he estado con muchas chicas, con algunas he tenido relaciones cortas. Con las dos que he estado más tiempo son Carolina y Adriana. A Adriana le daba miedo subir en avión y con Carolina pues, no sé, no me salía esa cosa de traérla. Es como si no lo sintiera de verdad.

Ana:
-¿Y conmigo si lo sientes?

Pablo:
-Desde el principio.

Ana:
-Que mono eres.

Pablo:
-Además quería traerte para que te olvides de los problemas por unos días. Y sobretodo para que te olvides de lo de Carolina, me siento culpable por lo que te hizo. Dijo mientras agachaba la cabeza.

Lo agarré de la barbilla y levanté su cabeza pegando su cara a la mía.

Ana:
-Escúchame bien. Tú no tienes la culpa de nada. Tú no controlas la mente de Carolina, ni la de Hugo. No sabías que eso iba a pasar.

Pablo:
-Ya pero te pegó para que dejaras de estar conmigo.

Ana:
-Pero eso es porque ella se piensa que pegándome va a separarme de ti. Anda deja de pensar en eso y vamos a comer algo.

Pablo:
-Vale. Pero me das un beso antes.

Ana:
-Eso está hecho. Y le di no un beso, sino varios.