Capítulo 68

274 23 0
                                    

Hicimos la comida, comimos y estuvimos allí hasta por la noche. Llegamos a mi casa a las 2:00 de la madrugada. Nos pusimos el pijama y nos acostamos.

Me levanto temprano para prepararlo todo. Cierro la puerta de la habitación para no despertar a Ana y empiezo con los preparativos.

Narrado por Ana

Me despierto y en la mesilla hay una carta y una rosa.

Abro la carta y empiezo a leer.

No sé por donde empezar. Bueno sí, ¡Feliz Cumpleaños! Espero celebrar este y muchísimos más a tu lado. Espero que no te enfades, sé que no te gusta que te feliciten, pero no podía ser de otra manera, tenía que hacerlo. Te quiero dar las gracias. Por existir, por aparecer en mi vida y por hacerme feliz. Gracias por regalarme esa sonrisa cada mañana que hace que me derrita, por mirarme con esos ojazos que hacen que los diamantes no valgan nada a su lado, por darme esos besos y esos abrazos que hacen que el tiempo se detenga. Y que más decirte, que eres la mujer de mi vida. La más preciosa de todas. Y la más bonita. ¡Feliz Cumpleaños princesa! Te amo, te amo muchísimo.

Mientras leo las lágrimas van brotando por sí solas de mis ojos. Me levanté y salí de la habitación. Cuando llegué a la planta baja me dirigí a la terraza. Y allí estaba. Corrí hacia él y lo abrazé como nunca había abrazado a nadie.

Ana:
-Gracias.

Pablo:
-A ti, por aparecer en mi vida.

Ana:
-Te amo.

Pablo:
-Y yo a ti enana. ¿Desayunamos?

Me llevó hacia la mesa, donde había variedad de comida para desayunar. Zumo, café, tostadas, fruta, galletas, bollería y tortitas con chocolate. Me senté encima de él y desayunamos entre besos y mimos. Después de desayunar nos pasamos el día haciendo el amor en la cocina, el salón, la cama... en todos lados. Estábamos en la bañera, yo estaba sentada encima de Pablo, agarrada a su cuello y nos estábamos besándonos muy acarameladamente.

Pablo:
-Princesa...

Ana:
-Dime.

Pablo:
-Tenemos que vestirnos.

Ana:
-¿Por qué? Yo me quiero quedar aquí contigo, saboreando tus labios.

Pablo:
-A mí también me encanta estar así contigo pero todavía te quedan sorpresas.

Ana:
-¿Más?

Pablo:
-Sí.

Ana:
-Eres el mejor. Dije besándole.

Pablo:
-Anda vamos a vestirnos.

Salió él primero. Se envolvió una toalla en la cintura y después salí yo y me puso el albornoz.

Pablo:
-Espera aquí, ahora vengo.

Cuando volvió traía varias cajas. Las dejó en una silla y me dio la más pequeñita. Tenía una llave con un llavero de un casco y una moto.

 Tenía una llave con un llavero de un casco y una moto

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Ana:
-¿Y esto?

Pablo:
-Las llaves de tu nueva moto.

Ana:
-¿¡Qué!?

Pablo:
-Sal a la calle y la verás.

Salí pitando incluso con albornoz y chanclas. Llegué a la puerta y cuando abrí allí estaba. Encima de la moto había un casco y una caja. Abrí la caja y saqué una chaqueta de cuero y unas botas para la moto. (En la historia voy a hacer que la moto tenga la caja para guardar las cosas)

Me giré y besé a Pablo, que se había puesto un albornoz para no salir en toalla

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Me giré y besé a Pablo, que se había puesto un albornoz para no salir en toalla.

Pablo:
-¿Te gusta?

Ana:
-Me encanta, gracias mi amor.

Pablo:
-No me tienes que agradecer nada princesa. Vamos a vestirnos anda.

Cogí las cosas de la moto y entramos en la casa. Abrí el armario para ver lo que me ponía pero Pablo lo cerró y me sentó en la cama.

Ana:
-¿Qué haces?

Pablo:
-No te vas a poner nada de eso.

Ana:
-¿Por qué no?

Pablo:
-Porque ya me he encargado yo de elegirte la ropa. Dice mientras me da otra caja.

Ana:
-Pero Pablo ¿más regalos?

Pablo:
-Venga ábrelo.

Dentro de la caja había un vestido azul con algo de transparencia en en el escote, unos tacones negros con unos detalles plateados y un brazalete dorado.

Dentro de la caja había un vestido azul con algo de transparencia en en el escote, unos tacones negros con unos detalles plateados y un brazalete dorado

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Ana:
-Me encanta.

Pablo:
-Pensaba que no te iba a gustar. Es que yo soy muy malo con la ropa.

Ana:
-Qué va!! Me encanta, gracias mi amor. Y le di un beso.

Nos vestimos, me maquillé un poco y me dejé el pelo suelto. Cuando estábamos saliendo...

Pablo:
-¿Cómo consigues estar siempre así de preciosa?

Ana:
-Anda no seas tonto. Que me pongo colorada.

Pablo:
-Jajajaja. Oye, ¿quieres qué vayamos en la moto y así la estrenas?

Ana:
-Por mí perfecto pero tendría que cambiarme los zapatos y tú no tienes casco.

Pablo:
-Por eso no hay problema.

Subió a la habitación y cuando bajó traía las botas que me regaló y un casco blanco.

Ana:
-¿Y ese casco?

Pablo:
-Me lo he comprado para ir con mi chica en su moto. ¿Te gusta?

Ana:
-Está guapo pero el mío es mejor.
Pablo:
-Jajajaja. Anda ponte las botas.

M cambié los zapatos y puse los tacones en la caja. Nos pusimos los cascos y Pablo me fue guiando por el camino hasta llegar a nuestro destino.

Un paso detrás de ti [TERMINADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora