Capítulo Tres: Compañeros de viaje

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Andrew

-Usted es...-

-Es una historia realmente divertida, verás, yo bajé aquí para buscarte. Me molesté un poco porque no sabía como eras y cuando me senté lo primero que pasó por mi mente fue...-

-¿Buscar diversión?-

-No- dije rápidamente -Odio desayunar sólo, tú no estabas y yo...-

-¿Buscaba compañía?-

-Sí, digo, no. Es que en verdad odio...-

-Basta- sonrió -No empezamos con el pie derecho señor Wilde, ¿Qué le parece si comenzamos de nuevo?-

-Me parece perfecto- suspiré -Andrew Wilde, pero dígame Andrew y háblame de tú por favor. El señor Wilde es mi padre y yo aún no me he casado para que me digan señor- sonreí pero ella no

Vamos ¿Qué tan difícil puede ser ésta mujer?

-Soy Annie Cavalier, me puede llamar Annie y también me puede hablar de tú- sonrió

-Un placer- besé su mano

-Igualmente- dijo y alejó su mano

-Bueno. Debido al incidente, me gustaría invitarte a cenar esta noche, para que te quites esa mala imagen de mí-

-Por supuesto- sonrió

Wow. O estaba borracho, o esta chica tenía la sonrisa más hermosa que había visto en mi vida.

-¿Te parece desayunar primero o arreglar la junta?-

-Desayunar suena bien- sonreí

-Está bien-

Hice una señal al mesero y él de inmediato vino.

-Un café americano, unos waffles con miel de maple y un jugo de naranja- dije

-Claro caballero- dijo y anotó -¿Para la señorita?-

-Un frapé de galleta, una orden de hot-cakes y un café dulce por favor- sonrió

-Claro señorita-

Miré su sonrisa al igual que el chico que nos atendía, se ruborizo y después de anotar la orden de Annie se marchó.

-Lo que hubiera dado porqué me hubieras sonreído así...- murmuré mirando mi menú.

-¿Perdón?- la miré

-Sí. Que me hubiera encantado que me sonrieras como lo hiciste con el mesero cuando te conocí-

-Perdón, pero el respeto se gana-

-¿Qué?- fruncí mi ceño

-¿Has notado que te la pasas dando órdenes? Esperas a que todos te obedezcan por el simple hecho de que eres bien parecido e hijo de una familia millonaria-

-No, yo...-

-Parece que no sabes modales, no dices por favor ni gracias si no crees que la gente con la que estás lo merece-

-Annie, no me conoces...-

-En efecto, hace unos minutos eras un chico coqueto que intentaba ligarse a la primera chica sola que encontró porque a la que buscaba no la encontró. Seré una "hija de papi" según tú, pero no soy tonta Andrew, te vi mirar a aquellas chicas hasta que notaste que tenían hijos o que estaban en compañía de otro hombre-

-Te equivocas, te estaba buscando y no sabía cómo eras.-

-Claro- bufó -Hoy en día puedes buscar mi nombre en google y encontrarás miles de fotos mías-

Amor Por Contrato ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora