Annie
Me dejaba acariciar mientras las señoritas del salón me arreglaban y preparaban para mi nuevo comienzo.
Diego leía mientras a mí me arreglaban un rato, creo que no le aburría estar aquí o simplemente trataba de apoyarme como el mejor amigo que era.-¿Rojo?- sonrió la señorita mostrándome un color de barniz para mis uñas
-Sí- sonreí
Ella asintió y comenzó a pintar mis uñas. Luego de un lavado ligero a mi cabello, comenzaron a pintarlo de un color chocolate, algo un poco más oscuro que el que tenía anteriormente, pero aún así me agradaba.
Diego dijo que de rojo se vería bien, pero después de una interminable lucha entre rojo y chocolate, terminó por ceder y sonreír.
Creo que adoraba a este hombre, era de los pocos que me daban la razón, o me dejaban ganar, sólo un poco.Después de unas horas más en el salón, terminaron y me llevaron detrás de una cortina. Digamos que quería revelar mi cambio de una manera sorpresa para Diego porque no me había visto en ningún momento desde que me habían hecho el cambio y quería que realmente se quedara sorprendido.
-¿Ya puedo verte?- escuché su voz
-Aún no- sonreí y terminé por acomodar mi cabello
-¿Ya?-
-Solo espera- reí
-Eso he hecho, tres o cuatro horas, la verdad es que perdí la cuenta- rió
-Pues espera un minuto- suspiré e intenté acomodar mi cabello
-¿Ya?-
-Eres la persona más desesperada que he conocido- reí cuando acabé y sonreí al ver mi resultado, bueno, el de las señoritas que me atendieron.
-Pues se nota que no te has visto en un espejo- lo escuché decir
-¿Es un cumplido?-
-No amiga mía, es un apresúrate porque Diego se está impacientando- bufó
-¿Listo?- reí
-Pero por supuesto que sí-
-Bueno...- suspiré
Hice de un lado la cortina y salí lentamente. Estaba maquillada de una manera distinta, mi cabello había cambiado de color y Diego solo podía decir...
-Órale- sonrió sorprendido
-¿Qué?-
La verdad es que no había entendido, digamos que a veces habla en otro idioma distinto al mío por su país de origen ya que Diego no era de aquí.
-Ay perdón, es mi idioma...- sonrió avergonzado -Es decir, que estás realmente... Wow-
-¿Ese es un cumplido?- sonreí -¿Verdad?-
-¿Lo dudas?- sonrió
Caminó hasta a mí y me hizo dar una vuelta completa para ver mi nuevo estilo.
-Wow...- sonrió
-¿Qué tal?- sonreí -¿Te gusta?-
-A mí sí- me miró -¿Y a ti?-
-Sí, me encanta-
-Bueno, si a ti te gusta, ¿Qué más da lo que piense la gente?-
-No importa- sonreí
-Eso- rió -Esa es la nueva Annie, la rebelde-
-¿Rebelde?- fruncí mi ceño
-Rebelde, loca, extraña- se encogió de hombros -Aún no he decidido gruñonsita-
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Amor Por Contrato ©
RomanceLos Wilde y los Cavalier, dos familias con un apellido que pesa y con dos hijos curiosamente herederos de ambas fortunas. Una amistad de años. Dos jóvenes inocentes. Y un sólo trato. Siempre hemos escuchado que en esta clase de matrimonios es la ch...