Llegada a la mansión

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El avión aterrizó doce horas después del despegue, como es obvio, en un aeropuerto italiano, los estudiantes estaban agotados, y por lo visto no tendrían ni un minuto de descanso, después de todo apenas eran las dos de la tarde en Italia, cuando salieron del aeropuerto otra fila de limusinas los esperaba, entre ellas destacaba una de color blanco de la cual un hombre de cabello negro y bigote salio para recibir a todos.

Los grupos fueron cambiados debido a el aumento en el número de personas presentes, pero debido al cansancio nadie se quejo al respecto, mucho menos cuando el hombre abrió la puerta de la limusina blanca para que el grupo de Tsuna y Kokuyo ingresaran, una vez dentro saludaron a Dino.

–Ciaossu, dame-Dino–El rubio le dedicó una mirada molesta a su ex-tutor.

–Ciao, es bueno verlos chicos, hace un tiempo ya que no nos veíamos en persona–Comentó el potro bronco.

–Hmm, sigues siendo un herbívoro–Saludó Kyōya a su tutor.

–Siempre tan amable, en fin, ha sido una sorpresa el que todos ustedes hayan venido, sobretodo por que tenia entendido que Tsuna aun no aceptaba el puesto de décimo, cuando Nono me informo que tendría que venir a buscarlos la verdad es que todos se emocionaron–Comentó mientras los demás le dedicaban pequeños gesto de saludo.

–¿Los demás? ¿A quiénes te refieres, Al Extremo?–Preguntó Ryohei confundido, su novia le miro aburrida.

–¿No lo saben? Todos están en la mansión Vongola, debido a una de las reuniones semanales que Nono realiza–Respondío confundido, todos vieron como un pequeño conejo se ponía pálido.

–Con todos te refieres a...–Empezó Tsuna, pero sus acompañantes lo interrumpieron.

–¿Squalo?–Preguntó la lluvia.

–¿El príncipe idiota?–Preguntó la tormenta.

–¿Lussuria, Koyo? –Preguntó el sol.

–¿El monstruo de malvavisco?–Preguntó Mukuro.

–¿Fran?–Cuestionó Chrome.

–¿Arcobalenos?–Consultó Reborn extrañado.

–¿El padre de Tsu-kun/Tsuna-san/Sawada?–La pregunta de las chicas alerto a Tsuna.

–¿Vindice?–Preguntaron los Kokuyo.

–Todos menos Iemitsu, tengo entendido que se encuentra en una misión importante junto a Basil y que no regresara en los próximos días, aunque tal vez llegue a tiempo para celebrar el cumpleaños de su hijo–Respondió el rubio, el castaño se sintió aliviado y al mismo tiempo molesto.

–Cuando dices que están todos, eso incluye a Bermuda y el hecho de que planean quedarse por un tiempo, ¿Verdad?–Preguntó el cielo, el potro le dedicó una mirada significativa.

–Tu visita parece estar relacionada con lo que Nono denomino tiempo en famiglia y lamentablemente para ti todos los mencionados son tu familia, en especial Xanxus ya que él es tu itoko*–Respondío serio, el castaño le envió una mirada horrorizada, si Xanxus lo oía decir que ambos eran primos seguro no volvería a ver a Dino nunca más.

Luego de lo que sería conocida como la lógica suicida de Dino, Tsuna le pidió al mismo que hablara con Nono y los otros para que su puesto como candidato a sucesor quedara como un secreto confidencial por lo menos hasta el día de su cumpleaños, que seria en tres semanas como mínimo, y sobretodo que le pidiera a Jager y a Bermuda el favor de reunirse con él en cuanto todos los estudiantes de nami-chū se acostasen a dormir, el caballo desbocado acepto el hacer llegar los mensajes a sus respectivos destinos sintiéndose extrañado por la urgencia que tenia el castaño de reunirse con los vindice.

El resto del viaje fue normal entre las risas de unos, los kamikosoru de otro, los kufufufu de otro y los disparos de alguno, llegaron a su destino, al bajar de la limusina los estudiantes estaban demasiado cansados como para notar que su ex-profesor de ingles estaba presente, una vez dentro de la mansión fueron enviados a sus respectivas habitaciones y una vez fuera de la vista de todos la servidumbre se dedico a recibir con brazos abiertos al que consideraban su japones favorito.

–Es bueno verlo, Juudaime –Saludaron al unísono, el susodicho les dedicó una dulce sonrisa.

–Lo mismo digo yo chicos, veo que siguen tan amables como la ultima vez que vine de visita–Comentó el de ojos miel.

–Juudaime, sus guardianes pueden dirigirse a sus habitaciones, ya los demás estudiantes han sido llevados a sus habitaciones y no saldrán de allí hasta la cena–Le informó una pelirroja de aparentes diecinueve años, el castaño le sonrió.

–Muchas gracias, Geraldine, luces tan hermosa como siempre–Ante el comentario la chica enrojeció y el ex-prefecto enfureció–Chicos pueden dirigirse a sus habitaciones, aunque M.M si deseas salir de compras debes de llevar a un escolta.

La mencionada se sorprendió de que el chico le permitira salir acabando de llegar, estaba muy agradecida, aunque obviamente no lo admitiría.

–Lo dices como si no lo supiera desde antes de llegar, sin embargo es agradable que seas consciente de que tu mansión no me provoca quedarme aquí–Y sin más la srta. Orgullosa se fue llevándose con ella a Chikusa y a uno de los mayordomos.

–¿Por qué se llevo a kakipi?–Preguntó Ken a los presentes.

–Ni idea–Respondieron.

Luego de la retirada de todos los demás a sus respectivas habitaciones Geraldine llevo al Cavallone a la habitación donde se encontraban reunidos las demás famiglias y a Sawada lo llevo a la oficina de Nono.

Una vez en la habitación, el cielo saludo a su abuelo y le dedico una mirada dura.

–¿Eres aunque sea un poco consciente del montón de problemas en los que me meterá Reborn en los próximos días?–Cuestionó, Timoteo le dedico una mirada llena de compasión.

–Sólo quería pasar un poco de tiempo en famiglia con mi nieto y mi hijo, después de todo ustedes son las únicas personas que me quedan vivas como familiares–Comentó el hombre del bigote, el más joven suavizo su mirada.

–Bueno, esta bien, sin embargo no veo la necesidad de llenar la mansión de invitados, y no me refiero precisamente a Uni y compañía –Ironizó, el hombre de canas le sonrió a su nieto con cariño.

–Yo sólo le dije a Reborn que tal vez llegaba a hora de ver las relaciones que mi nieto había formado desde su que empezó su entrenamiento–Ante lo dicho el castaño palideció.

Luego de una amena charla entre ambos cielos decidieron posponer cualquier tipo de reunión importante o el asunto de la sucesión por un tiempo más, Tsuna se sentía contento por ver a su abuelo, sin embargo su intuición le decía que algo muy grande estaba por pasar en el momento en que se encontrara con varia de nuevo.
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Itoko-primo

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