Viaje escolar

Tiempo libre, Kokuyo

Durante la reunión de los Arcobalenos y antes de que Bermuda hablase con Tsuna un grupo de invitados se encontraba en la habitación del guardián masculino de la niebla.

Los miembros masculinos de Kokuyo se encontraban con Mukuro, Ken porque estaba preocupado de que Vindice se llevase a Mukuro-sama y Chikusa sólo para pasar el rato.

–Lo preguntare por onceava vez, ¿Qué demonios quieren?–Preguntó el molesto dueño de la habitación.

–Nada realmente importante, Mukuro-san–Respondió Chikusa.

–Sólo me aseguro de que los Vindicare no se lo lleven de nuevo–Informó Ken, la piña los miro con incredulidad.

–¡Vindice no me llevara de nuevo!–Bufo molesto, sus compañeros lo miraron dudosos.

–En fin, hablemos de cosas interesante, ¿Sabía que Ken esta enamorado de Chrome, Mukuro-san?–Preguntó Chikusa, Ken enrojeció.

–¡No lo estoy!–Exclamó el rubio.

–Kufufufu~, sólo espero que mantenga sus manos alejadas de mi Nagi–Respondió Mukuro, a Chikusa y a Ken se les formo una duda, duda que deprimió a Ken.

–Mukuro-sama, ¿A usted le gusta Chrome?–Preguntó el chico de ojos naranjas deprimido, la piña lo miro incómodo.

–Realmente no sería extraño, después de todo Chrome esta enamorada de él –Comentó Chikusa, "Tan cruel" fue lo que pensó la piña al ver como su amigo rubio se deprimía.

–Ya he hablado con ella sobre esto, somos casi una misma persona, se podría decir que la veo como una hija, después de todo en teoría fui yo quien la devolvió a la vida y la hizo renacer–Comentó tratando de animar a su amigo, funciono.

–Oh, pero eso no quita el hecho de que ella siga enamorada de usted–Dijo Chikusa mientras jugaba con un yo-yo.

–En realidad ella ya no me ama de esa manera–Contraatacó Mukuro, el otro chico no sabía a quién creer.

–¿Cómo está tan seguro?–Preguntó Ken, los otros dos lo miraron, lucía tan deprimido.

–Estas olvidando que puedo saber todo lo que piensa, ella ya no me ve de esa manera, tenlo por seguro –Ken decidió creerle a Mukuro y Chikusa decidió rendirse.

–¿Mukuro-sama esta enamorado de alguien?–Preguntó inocentemente, la piña enrojeció cuando la cara de cierto monstruo come malvavisco visito su mente.

–Kufufufu~, eso es información confidencial–Respondió confundido.

Mientras los tres chicos seguían discutiendo sobre si a la piña le gustaban los malvaviscos o no, en otra habitación, cercana a la del guardián, se encontraban Chrome y M.M, las demás chicas habían sido llevadas a sus habitaciones y tenían prohibido salir.

–¿Al final lo que dijo Fran era mentira?–Preguntó la inocente chica de quince años a la francesa.

–¡Por supuesto que sí!–Exclamó alterada– quiero decir, ¿Crees que yo me sentiría atraída por él sólo por qué tiene unos ojos hermosos? Y una mirada enigmática, y un sentido del humor bastante extraño, y por que a ambos nos gusta molestar a Ken –Chrome miro a su compañera mientras balbuceaba sobre Chikusa.

–No me refiero a eso–Comentó confundida, W.W enrojeció.

–¿A qué entonces?–Preguntó avergonzada.

–Me refiero a lo que dijo cuando veníamos de regreso, sobre unirse oficialmente a Varia–Respondió la chica del parche.

–¿Fran hablo de eso?–Preguntó confundida, la otra chica la miro exasperada.

–M.M-san, deberías prestar atención a las personas cuando hablan–Dijo molesta la guardiana, su compañera recordó algo y sonrió.

–Oh~, creeme, yo escucho todo lo que se dice por la mansión –Dijo con una sonrisa pícara, la ilusionista la miro confundida.

–¿A qué te refieres?–Preguntó sin entender nada.

–Oh~, Chrome-chan eres tan inocente, ¿Crees que no escuche cuando conversabas con Kyoko? –Comentó inocentemente, la pelivioleta palideció.

–¿Qué escuchaste?, ¡No puedes decirle nada a nadie!–Exclamó la chica nerviosa, su compañera sonrió más ampliamente.

–Yo escuche claramente como Chrome-chan le decía a Kyoko que se estaba enamorando de Ken-kun–Se burlo la pelirroja, la chica del parche palideció.

–¡Oh, por Dios! Por favor, no se lo digas a nadie–Pidió la más pequeña, su compañera le sonrió con ternura.

–No se lo diré a nadie si tu olvidas lo que dije hace unos momentos sobre Chikusa–Propuso la pelirroja, la estudiante de nami-chū la miro perpleja.

–De todos modos no tendría a quien contarlo, así que esta bien–Aceptó, su compañera sonrió satisfecha.

Ambas chicas guardaron silencio por un rato, felices por el trato que hicieron, la pelirroja se avergonzaba de haberse enamorado de alguien como Chikusa, mientras que la pequeña del parche se sentía insegura con Ken, ya que el chico parecía tener siempre la necesidad de recordarle lo poco que le importaba.

M.M era consciente de lo que Ken sentía por Chrome, pero le había prometido al chico no decir nada, estaba mucho dinero de por medio, mientras que Chrome sabía lo que Chikusa sentía por M.M pero no decía nada porque sentía que no debía interferir. Además de eso, ambas eran conscientes de lo que el líder del grupo sentía por el líder de Gesso, de nuevo por parte de M.M su silencio era comprado, sin embargo por parte de Dokuro su silencio era parte de un trato con la piña.

De parte de los chicos las cosas no eran muy diferentes, Ken se había ganado un descuento con M.M cuando descubrió su secreto, llevaba enamorado de la chica del parche más de un año, Chikusa usaba los sentimientos de Ken y Chrome como su propio entretenimiento cuando se aburría y sabía lo confiable que era la chica así que no le preocupaba demasiado, por último Mukuro había perdido dinero con M.M y con otra ilusionista, léase como Viper, que llevaba un buen tiempo extorsionándole, por idea de Belphegor.

Sin embargo con Dokuro el tema era diferente, era verdad que él sabía todo lo que la chica pensaba, pero ese beneficio se vio afectado por la mala condición de sus poderes y también por que la chica empezaba a desarrollar aun más sus poderes, por lo que su gran ventaja se volvió en una espada de doble filo.

Ambos guardianes tenían un trato del que sólo eran conscientes ellos dos y el cielo, ¿Cómo lo sabía Tsuna? Esa es una duda que todos se hacen, el chico desarrollo la habilidad de saber los secretos de todo el mundo, pero esa es otra historia.

"Yo no digo nada y tu me ayudas a tener a quien quiero" ese pacto silencioso se sello cuando ambos guardianes les sonrieron a sus acompañantes.