Viaje escolar

La decisión final, fin del juego

Cuando Nono recibió la llamada de Reborn hablándole sobre el ataque de una mafia rusa se altero un poco, por lo que sin pensar demasiado en lo que tenía y no tenía que hacer decidió culminar aquel absurdo recorrido y llevar a los estudiantes de regreso a la mansión.

Al ver los destrozos casi se desmaya, ¡No tenía tanto de haberse ido! ¿Cómo era posible que algo así pasara? Definitivamente necesitaba dejarle el puesto de jefe a alguien más, de preferencia a Tsuna, su viejo corazón no podía con esa clase de trabajo.

–¿Qué demonios paso aquí?–La pregunta de Gokudera transmitía los sentimientos de todos los presentes.

–Eso es una muestra de lo malo que puede ser dejar a Mukuro y Hibari solos–Respondió un hombre de fedora, Timoteo sonrió al verlo, al parecer las investigaciones de su nieto resultaron más efectivas que las de él.

–¿Quién es usted?–Preguntó Mochida.

–Un amigo de Boren, pueden llamarme Reborn –Informó el mayor.

–¿No es ese el apodo de Boren-sensei? –Preguntó Osamu.

–Es por mi que le dicen así, ahora si me disculpan Nono y Décimo tienen una importante conversación pendiente–Nono miro extrañado a su joven amigo.

Los estudiantes estaban perplejos, no sabían que decir, además de Reborn notaron a otras personas extrañas y uno de ellos llamo la atención de todos por sobre los demás y ese era el hombre que se parecía demasiado a Hibari, era como una versión adulta del ex-prefecto que sonreía y parecía relajado, la sola imagen era atractiva y tenebrosa.

Reborn llevo al actual jefe de Vongola a la habitación donde se encontraba el castaño, Kyōya seguía presente por pedido del menor, para disgusto de Reborn.

–¿Qué esta pasando?–Preguntó el hombre de canas a los presentes.

–Dame-tsuna asegura haber tomando una decisión sobre como mantener a salvo a sus guardianes–Informó Reborn y Nono se puso nervioso.

–Abuelo desde un inicio siempre has sabido que no quería formar parte de algo tan peligroso como la mafia–Nono asintió dándole la razón–He tomado mi decisión y quiero que todos la sepan así que debes realizar la ceremonia de sucesión.

Lo dicho por el más joven sorprendió a los tres hombres, no estaba aceptando el cargo de décimo ni lo estaba rechazando, sólo estaba ordenando que se llevase a cabo la ceremonia para allí dar a saber su decisión, ¿Qué estaba planeando?

Durante las próximas semanas por más que Reborn trato de sacarle información no logro nada, lo mismo pasaba con Kyōya, incluso recurrió a interrogarlo durante sus encuentros pero el resultado era el mismo, nada.

Tsuna se encargo de informarle a la pelirroja de ojos azules, la verdadera Geraldine, sobre la muerte de Béatrice, Marco y la chica de quince años habían estado destruidos al saberlo, sin embargo no culpaban a Tsuna de nada, le aseguraron que la chica de ojos verdes debía de estarse burlando de ellos por el drama que hacían.

Los estudiantes retomaron el juego y la búsqueda de los guardianes, tardaron casi una semana en encontrar a Chrome, y ni se diga de encontrar al guardián de la nube, al final del juego sólo nueve estudiantes encontraron a Sawada, les dolía el ego al tener que aceptar la superioridad de Tsuna pero no se quejaron, la parte más difícil fue la tercera prueba, Reborn les propuso buscar la verdad sobre Vongola y sólo cinco la encontraron y fueron recomendados a formar parte de CEDEF, a pesar de las quejas del castaño.

Habían pasado varios meses desde que todo había terminado, era el día en que se llevaría a cabo la ceremonia de sucesión y todos los invitados esperaban ansiosos al castaño, para sorpresa de todos el espíritu de Giotto sería el encargado de la ceremonia, ¿Cómo era posible? Nadie lo sabía, con aquel fantasma estaba toda la primera generación de Vongola.