Revenge #X-MenAwards

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-¿Cómo te sientes? -Dijo Erik sentado en mi cama.

-Bien, solo me duele un poco el cuerpo.

-Va a pasar. Te traje la cena. Y buenas noticias, comeremos juntos.

-Erik... gracias.

-Debes comer.

-No, gracias por salvarme. -Me levanté de la cama y me acerqué a pocos centimetros de su rostro. -Te amo. -Lloré de nuevo.

-Yo también mi princesa. ¿Por qué lloras? -dijo secando mis lágrimas.

-Porque de verdad te amo y odio hacerlo. -Lo abracé y estalle en llanto. Me enamoré de un instante a otro. Y lo seguía odiando. ¿Que iba a hacer ahora? No podía matarlo, pero tampoco ignorar la muerte de mi padre.

Comimos juntos en medio de bromas. Ya podía moverme sin problemas. Una vez terminada la cena, saco un chocolate de su bolsillo y me lo dio.

-Gracias Erik, es mi favorito.

-Lo se. -Sonrió. Abrí el paquete, partí dos pedazos. Uno lo comí y el otro lo coloque en mi boca entre mis dientes. Me acerqué a su boca y lo deje allí.

Cuando deje de hacerlo, sus manos en mi espalda me acercaron más a el y me besó.

-No me imagino una vida sin ti. -Sonrió entre besos. Le devolví la sonrisa y me acomodé entre sus piernas.

-Veo que estas mejor.

-La carne quemada me dio energía.

-No te burles de mis pobres dotes culinarios. -Reímos.

Un beso llevó al otro y terminamos haciendo el amor.

-Tengo miedo de lo que pueda suceder. -Le dije. Estaba acostada con mi pecho sobre el suyo y mis piernas enredadas con las de el.

-Hay que mantenernos unidos. Y conmigo a tu lado, nada va a pasarte.

-¿Lo prometes? ¿Pase lo que pase vas a amarme?

-Si, pase lo que pase.

Le sonreí. 

A la noche fue difícil conciliar el sueño. 

Un beso en la mañana me despertó. 

-¿Cómo dormiste? -Pregunté.

-Mejor imposible, ¿tu?

-También. Me quedaría todo el día así.

-Nada nos impide hacerlo, mi amor. -Me besó la frente.