Revenge #X-MenAwards

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Estaba enojada, pero no sabía si conmigo, con Charles o con Erik. Bajé a la cocina por algo para beber.

-¿Todo esta bien Ally? -Preguntó Scott que estaba también allí.

-No realmente.

-Sabes que puedes hablarlo conmigo. Tantas veces he tenido problemas y tu me has ayudado.

-Es una larga historia, gracias por esto Scott pero prefiero no hablar.

No sabía que hacer. No quería ver a nadie, no quería dormir porque sabía que iba ahogarme en mis pensamientos. Por un rato, caminé por la escuela. Cuando pasé por la habitación de Hank, escuche unas voces.

-Ella no va a hacerlo, Charles.

-Sabes todo lo que puede lograr Erik y mas enamorado.

-Ella es... diferente ahora. No se dejara manipular.

-Ya perdí a Raven, no quiero perderla a ella. -Seguía enojado. -Tu sabes perfectamente que mi preocupación no es en vano. Si ella se va, algo grande va a comenzar. No quiero pelear contra ella. Cientos de nosotros moriremos.

Un silencio se apodero de la habitación.

Sin saber como me sentía, caminé hasta mi habitación.

Al llegar, Erik estaba en la puerta.

-¿Acaso nadie duerme aquí? -Grité y entré a mi habitación con el segundo portazo de la noche dejándolo afuera.

-¿Que sucede mi amor? -Dijo Erik entrando.

-No quiero hablar.

-¿Peleaste con Charles?

-Dije que no quiero hablar. Agradecería que te fueras de aquí.

-Pero...

-Adios. -Dije sacándolo de allí.

Como pude predecir, fue imposible dormir. Logan no me había querido contar sobre mi porque era una de las mutantes mas peligrosas del mundo, era una asesina. No podía imaginarme matando a alguien inocente. Y menos mutantes y aún mucho menos los alumnos de la escuela Xavier. Era ilógico, lo que mas amaba de mi vida era ayudar a los que llegaban a la escuela escapando, aterrados o solitarios. Eso me hacía feliz, y no asesinarlos. Esa era mi manera de proteger a los míos.

Cuando la alarma sonó, ya estaba tomando un baño. No quise cruzarme con nadie, asi que no desayune y fui a mis clases.

-Ally, ¿Todo esta bien? -Preguntó al final de la clase Bobby, el joven que controlaba el hielo. Saber que se preocupanan por mi, me llenaba el alma

-Lo estara pronto. -Le sonreí mientras tenía mi mano en su hombro.

-Me encantaría ayudarte tanto como me ayudaste cuando llegue.

-Voy a estar bien, solo tengo que aclarar unos pensamientos. Gracias.

Cuando se fue, apareció Hank, que estaba detrás mío.

-Ellos te aman.

-Yo a ellos.