Louis me deposita en su cama. Mis piernas han estado entrelazadas alrededor de su cintura en todo momento para que nuestros cuerpos se mantengan en contacto. Por unos segundos, nos separamos para así poder deshacernos de nuestros respectivos zapatos.
Entonces, se acerca hacia mi con una enorme sonrisa dibujada en su rostro.
Luego, sus manos están en todas partes, al igual que sus labios... Sobre mi: mandíbula, cuello, detrás de mis orejas, en mi clavícula, sobre mis propios labios... Sus manos dejan suaves caricias en mi espalda, hace su camino por mi pequeña cintura y de pronto, su mano aprieta levemente mi trasero.
Un sonido poco extraño sale de mi boca y su gesto hace que yo misma lo atraiga hacia mí empujándolo con mis pies sobre su trasero. Prácticamente, cada uno ha tocado el trasero del otro.
Prácticamente, ya lo he desnudado con la mirada.
Y ahora mismo, la sensación más placentera que sentía era la constante penetración de su pelvis contra la mía. Cómo me encantaba estar así con él... Cuánto le quería...
Y si era posible, hoy sería el día en que le demostraría qué tanto lo quería. Porque estaría muy cerca de entregarle algo tan preciado como es la virginidad. Algo que una vez la entregas, no puedes recuperar. Había soñado mil y una veces con esa primera vez. Había imaginado mil y una situaciones en cómo se llevaría a cabo... Estaba totalmente convencida que algún día llegaría y quería tan condenadamente que este sea el día. Había prometido que esa primera vez sería por amor, que no tendría sexo con un chico cualquiera, sino que haría el amor por primera vez, con la persona que quisiera de verdad y quería hacer esto con él.
Con el primer chico que hizo que mi corazón pudiera latir en infinitos latidos por minutos que sería casi imposible que fuera de tal manera, con él porque sabía que después de todo el tiempo que habíamos estado juntos al fin pude saber lo que es estar enamorada con toda la definición de la palabra. Con él, porque no se trata de qué tanto tiempo lo conozcas, sino que en ese corto o largo momento en el que forma parte de tu vida, te haga sentir cosas que jamás hayas experimentado, y por último, porque siempre había creído que mi primera vez sería con la persona quien amara en verdad y eso era exactamente de lo que estaba cien por ciento segura. Yo lo amo tanto que estoy dispuesta a entregarle lo más preciado que tengo, aquí y ahora.
Él está absorbiendo con sus labios en la parte baja de mi cuello. La sensación es completamente nueva para mi, sin embargo, no es del todo desagradable. Sé a la perfección qué está haciendo ahora mismo, porque a pesar de que nunca me lo hayan hecho, no significa que nunca haya visto eso en otras personas. Prácticamente, estaba dejándome un chupón.
Sus caderas nunca dejaron de moverse. Por más que en momentos eran lentas sus embestidas, en otras aumentaban su velocidad y hacía que el bulto que se encontraba allí, en su entrepierna, sea mucho más fácil de sentir. La sensación que estaba sintiendo desde hace minutos atrás, era simplemente inexplicable en estos momentos, y aquella sensación que sentía de tan solo estar así, hacía que me preguntara cómo sería si los dos no tuviéramos nada en que se interpusiera entre nosotros y quería saber qué se sentiría estar de esa misma forma.
ESTÁS LEYENDO
Lo que siento por ti.
RomanceEmma Johnson, una adolescente con tan sólo dieciséis años, que después de pasar toda una vida trasladándose de ciudad en ciudad, tendrá que soportar otro cambio más en su vida. Aunque para ella, ya se ha hecho un ritual mudarse, ya no quiere seguir...