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CALEB.

Cat, Sophia y yo nos encontrábamos en casa, esta tarde no había tenido problemas en la manada y las chicas se habían tomado un día para descansar por lo que pude estar una tarde con Cat Y Sophia.

Faltaba exactamente una semana para la boda, Sophia y las chicas estuvieron ocupadas para que todo quedara asombroso ese día.

Quería que el día llegara, quería que fuera mi esposa oficialmente, que estaría conmigo por el resto de la eternidad a pesar de que muchas veces ella me lo había recordado. Ella hacia que todo en mí se sintiera completo, la amo más de lo que alguien podría imaginarse.

Ahora mismo ella se encontraba junto a mí, estábamos acostados en el sofá, ella encima de mi pecho mientras yo acariciaba su cabello y veíamos como Cat buscaba alguna película por Netflix, quien está sentada en el suelo con una caja de Flips en el suelo.

- ¿Podrías dejar de una vez alguna bendita película? – Pregunte con frustración a lo que Sophia rio y Cat bufo.

- Saben que – Vimos cómo se levantó. – Iré a pasear, mi loba quiere salir un rato.

Mire a Sophia quien solo río un poco y tomo el control colocando una película, me dio ultima sonrisa la cual le devolví y se volvió a recostar en mi pecho.

Tome la cintura de Sophia y la acerque un poco más a mí comenzando así a ver la película. A mitad de la película me aburrí aunque Sophia se veía muy interesada en ella.

Metí mi cabeza en su cuello y aspire su delicioso aroma, le di un beso junto con una pequeña mordida. Sentí un escalofrió de su parte por lo que reí y empecé a hacer un camino de besos hasta llegar a su oreja.

- Eres totalmente Mia. Por fin podemos tener un momento para nosotros, y voy a aprovecharlo. – Dije mientras mordía el lóbulo de su oreja haciendo que soltara un gemido bajo.

Mis manos empezaron a jugar con el borde de su camisa, la subí un poco dejando su abdomen descubierto y empecé a acariciar mientras seguía besando su cuello. De vez en cuando dejaba su abdomen y acariciaba sus piernas descubiertas o daba apretones descaradamente su trasero.

Mire a Sophia quien disfrutaba de mis caricias tratando fracasadamente de concentrarse en la película. Escuche como bufo y me miro riendo, se dio la vuelta y se acostó sobre mí uniendo nuestros labios. Sin dejar de besarnos empezó a acariciar mi pecho descubierto y yo acariciaba su cuerpo recorriéndolo lentamente y dándole atención a cada parte como debía.

Nuestros labios se movían con sincronía, le daba pequeñas mordidas y su respuesta no se hizo esperar al morder mi labio inferior dándole un pequeño jalón haciéndome gemir. Lamí sus labios para que dejara que mi lengua entrara en su forma a lo que me negó riendo, gruñí y apreté su trasero y la acerque más a mí haciendo que gimiera al sentir que tan excitado estaba por lo que aproveche la oportunidad.

Recorrí su boca lentamente saboreando su dulce sabor, el beso se volvió más apasionado, ella coloco sus manos en mi cabello jalándolo un copo. Nos separamos un momento por la falta de aire viéndonos a los ojos, los de ella brillaban, sus labios estaban hinchados y rojos haciéndolos más apetecibles y sus mejillas estaban sonrojadas, una imagen realmente hermosa para mí.

Ella sonrío traviesa y estuvo a punto de acercarse a mí de nuevo hasta que el celular sonó ruidosamente. Ella dio un salto y cayó al suelo dando un gemido de dolor.

- Amor ¿Estas bien? – Pregunte mientras aguantaba la risa.

- Si, ve y atiende el teléfono puede ser importante. – Dijo sonando un poco frustrada.

Me levante y tome el teléfono atendiendo la llamada.

- Caleb.

- Hola Caleb, Soy Eric. – Rodé los ojos. Había llamado en un mal momento.

- ¿Qué tal? ¿Cómo esta Cameron?

- Esta muy bien, crece cada día más. – Dijo alegre y escuche como Rosaly le gritaba algo desde el fondo.

- Me alegra que estén bien. – Sophia me miro preguntándome quien era a lo que con mis labios le indique que era Eric.

- Oye Caleb te llamaba para decirte que Iremos a las montañas hoy, sacaremos a Cameron al aire libre por petición de Rosaly ¿Quieren ir?

- Claro. ¿Los esperamos aquí en casa o vamos al castillo?

- Espérennos allí y nosotros vamos hasta allá.

- Esta bien, nos vemos dentro de un rato. – Dije y el colgó.

- ¿Qué quería?

- Nos invitaron a ir a las montañas. – Dije mientras me acercaba a ella. – Supongo que debemos continuar en lo que estábamos luego.

- Podemos darnos una ducha. – Propuso a lo que sonreí tomándola en brazos.

- Entonces vamos a la ducha. – Ella sonrío y comencé a caminar subiendo las escaleras.

• • •

Luego de vestirnos cómodamente y recoger algunas cosas para llevarnos salimos de casa y esperamos a los demás.

Nos sentamos en unos bancos en el jardín y empezamos a conversar, tenía a Sophia abrazada de la cintura mientras ella me abrazaba, amaba tenerla siempre cerca de mí.

Luego de unos minutos esperando llegaron los demás, todos bajaron del auto y poco a poco los fuimos saludando. Laura, quien tenía a Cameron en Brazos, me lo paso para poder cargarlo también.

- Hola Cameron. – Hice una mueca rara a lo que el rio un poco y pensé en el futuro hijo que tendría con Sophia.

- Falta alguien. – Dijo Sophia mientras nos miraba a todos.

- ¿Dónde está Cat? – Pregunto Derek mientras la buscaba con la mirada.

- ¡Cat! Se me olvido decirle. – Sophia se alejó un poco y dio un gran silbido hacia el bosque. – Salió de casa esta mañana pero no ha regresado aun.

Esperamos unos segundos pero no recibimos respuesta por lo que empecé a preocuparme. Unos ruidos empezaron a escucharse desde el bosque, ramas quebrarse. Algo se acercó corriendo a nosotros, por lo que me puse en posición de ataque.

Me tranquilice al ver a Cat salir convertida del bosque. Se acercó a Derek quien la acaricio lentamente hasta que quedo transformada en humano frente a él. Cat lo abrazo y el beso su mejilla.

- Un momento ¿Los lobos no destruyen su ropa al transformarse? ¿Cómo es que ella tiene? – Pregunto Ismael sorprendido a lo que reí.

- Sophia hizo un hechizo que aprendió hace tiempo. Petición de ella, Derek y mía. – Dije encogiéndome de hombros a lo que los demás reímos.

- Bueno, es hora de irnos. – Dijo Eric y empezamos a caminar en el bosque hasta el lugar donde compartiríamos una linda tarde.

 – Dijo Eric y empezamos a caminar en el bosque hasta el lugar donde compartiríamos una linda tarde

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La Venganza de las Sombras • COMPLETADonde viven las historias. Descúbrelo ahora