La Venganza de las Sombras • COMPLETA

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SOPHIA.

Luego de dos días recuperándome completamente en el hospital me dieron de alta para poder irme a casa con mis bebes. En estos días había recibido la visita de Cat, Ethan, Mike y Amelia. Al parecer Rosaly, Eric y Derek habían estado ocupados con algunos asuntos y se les había dificultado venir.

Con felicidad tome a mi princesa en brazos mientras Caleb tomaba a mi príncipe y juntos salimos del hospital con una gran sonrisa. Nos dirigimos con cuidado a casa y me sentí aliviada y emocionada cuando llegue a la puerta de nuestro hogar. Un hermoso cartel se encontraba colgado en la sala junto con un par de globos de color Rosado y Azul. Rosaly, Cat, Derek, Eric y Amelia nos esperaban allí con una gran sonrisa y regalos en sus brazos.

- Oh que hermoso. – Dije acercándome a ellos.

- Pero miren que preciosidades. – Dijo Cat mientras se acercaba a mi. Miro a la princesa descansar con tranquilidad. – Eres bellísima, vamos a ser grandes amigas. – Toco con delicadeza su pequeña nariz para luego acercarse a Caleb. – Mire al príncipe de la tía, vas a ser mi consentido. – Dijo haciéndonos reír.

Los demás también se acercaron mientras veían a los bebés y nos felicitaban.

- Hola pequeños, Soy la tía Rosaly y él es el tío Eric. – Dijo mientras ambos miraban a los bebes. – Y este es su primo Cameron. – Cameron miro a los bebés con curiosidad hasta que su mirada quedo en fija en Alice sonriendo.

- Yo también quiero verlos. – Dijo Isabel con timidez acercándose a nosotros. – Pero si son los niños más adorables que he visto.

- Sophia ¿Puedo cargarla? – Asentí pasándole a Alice. Cat algo nerviosa la tomo con delicadeza luego de un par de recomendaciones de Rosaly y sonrió.

- Hola hermosa. – Dijo en un susurro. – Que pequeña y adorable eres. – La miro con ternura mientras la bebé empezaba a moverse en sus brazos haciéndola sonreír. Mire a Derek quien la observaba con un brillo en sus ojos y una gran sonrisa. – Amor, ven a ver a tu sobrina. – El ser acerco de inmediato a ella tomándola de la cintura y observando a Alice con amor.

- Yo quiero cargar al príncipe. – Cameron bajo de los brazos de Rosaly empezando a jugar con sus juguetes.

- Por supuesto. – Dijo Caleb pasándole a Thiago.

- Este bebe saco bueno genes. – Dijo ya teniéndolo en sus brazos. Todos la miramos confundidas. – Mírenlo, se ve que será guapísimo. Todo lo guapo lo saco de ti. – La miramos aún más extrañados. - Olvídenlo.

- ¿Cómo han decidido llamarlos?

- Alice y Thiago. – Respondí con una sonrisa.

- Hermosos nombres. - Dijo Amelia encantada. Cat le paso a la bebita a ella quien la recibió encantada.

- Fueron idea de Sophia. – Dijo Caleb abrazando mi cintura.

- Si, se nota. Si hubiera sido tu idea hubieran sido nombres horribles. – Dijo Cat haciéndonos reír a todos excepto a Caleb que la miro con disgusto.

- Van a ser unos niños excelentes. – Asentí sonriendo.

- Muchas felicidades. – Dijo Max entrando en la sala.

- Gracias. – Respondimos Caleb y yo.

- Ven a verlos Max. – Dijo Isabel con entusiasmo. El sonrió encogiéndose de hombros haciéndome reír y se dirigió a ella.

Luego de conversar un buen rato y de que todos conocieran a los bebes. Todos se fueron a sus respectivas casas ya que habían decidido que era mejor dejarme descansar a mí y a los bebes.