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SOPHIA.

Los días pasaban con velocidad y mis bebes crecían cada vez más, actualmente tenían los cuatro meses de edad y su crecimiento era el adecuado según la doctora.

Los balbuceos ya eran constantes e incluso empezaban a reír lo cual alegraba cada vez más mi día. Thiago era mucho más tranquilo que Alice que se movía con mucha frecuencia y no se quedaba quieta.

Ahora mismo nos encontrábamos en la cocina mientras preparaba sus papillas para comer. Ambos se encontraban sentados uno al lado del otro en sus pequeñas sillas mientras juegan con sus juguetes.

- Alice, no jales el gorro de tu hermano. – Dije en cuanto vi como lo jalaba hasta donde estaba ella.

Ella solo me miro un segundo antes de reír. Me encontraba sola con ellos ya que los demás tenían cosas que hacer, sabía que Mike y Ethan estaban al pendiente de mi con cualquier cosa extraña que pase lo cual me aliviaba.

- Ok pequeños, hora de comer. – Dije sentándome frente a ellos con el tazón de la mano. – Abre la boquita hermosa Alice. – Ella me miro sonriente y abrió la boca cuando acerque la pequeña cuchara hasta ella. – Ahora tu mi príncipe. – Dije y el de inmediato abrió su boca haciéndome suspirar de ternura.

Termine de darles de comer y decidí salir con ellos al jardín con los niños para esperar a Caleb y Cat y poder comer el almuerzo. Coloque varias mantas en el césped donde me senté junto a los niños. Thiago jugaba con mis manos mientras Alice balbuceaba y daba vueltas sobre si por lo que tenía que estar muy al pendiente de ella.

- Hola Sophia. – Ethan camino junto con Mike hasta donde estábamos.

- Hola Chicos. – Dije levantándome mientras ellos cargaban un bebe cada uno.

- ¿Cómo están los niños de la casa? – Dijo Mike mientras hacía muecas a Thiago que solo reía.

- Están muy bien gracias a Dios. Aunque Alice...- Ethan me interrumpió.

- Esta súper inquieta. – Dijo mientras s ella se movía en sus brazos. – Creo que quiere que la baje.

Ethan se agacho un momento dejándola en el suelo mientras yo seguía hablando con Mike.

- ¿Han visto a Caleb hoy?

- Ha estado resolviendo problemas de la manada, al parecer se han visto enemigos dando vueltas por aquí.

- Si, han sido muchos. – Dijo Ethan mientras se levantaba un momento para hablarme, hice una mueca.

Justo en ese momento la alarma de la manada comenzó a sonar indicando el inicio de un ataque. Mire a los lados observando como extraños lobos comenzaban a verse por el lugar.

- Alice. – Susurré y justo en ese momento en cuanto volteamos a verla escuchamos su llanto lo que me alarmó y me asuste más aun cuando vi la escena.

Un horrible lobo la tenía en su boca mientras ella lloraba, el lobo no era normal, era de color blanco pero su pelaje era transparente y no se veían sus patas, era como un fantasma con sus tenebrosos ojos completamente negros.

- ¡Alice! – Comencé a correr tras de el en cuanto me transforme, sabía que Mike se encargaría de Thiago junto con Ethan.

Esquivaba los arboles con rapidez mientras sentía el terror al escuchar a Alice llorar a gritos. Corrí aún más rápido pensando en que podría hacerle daño a mí bebe.

Estaba a punto de golpearlo cuando otros de esos lobos golpeo mi costado, choque con una roca soltando un quejido y trate de levantarme con rapidez siendo de nuevo golpeada. Mire como el lobo se perdía mientras escuchaba el llanto de Alice alejarse, trate de liberarme del lobo pero este me gruño y me hizo golpearme con la roca haciéndome una herida y dejándome aturdida.

La Venganza de las Sombras • COMPLETADonde viven las historias. Descúbrelo ahora