La Venganza de las Sombras • COMPLETA

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OMNISCIENTE.

Todos se encontraban en la casa de Rosaly y Eric con él bebe. Habían pasado pocos días y todos seguían igual de emocionados por su llegada. Era el consentido de todos incluso de Caleb, que por decisión de Rosaly y Eric, se había vuelto el Padrino de Cameron. El junto a Laura eran el padrino él y la madrina del niño.

Él bebe se parecía mucho a Eric, solo tenía los pocos cabellos del color del de Rosaly.

Rosaly estaba tan emocionada, no se separaba del bebe por nada y creo que empezaba a consentirlo a pesar de tener poco tiempo de nacido, bueno, todos lo hacíamos. Eric también lo estaba, al día siguiente de su nacimiento había anunciado el nacimiento del nuevo bebe con mucho orgullo. Todo su reino se emocionó y le trajeron regalos a casa.

Ahora nos encontrábamos celebrando en su castillo haciendo una buena parrillada junto con un agradable día en la piscina.

Algunos estaban bañándose en la piscina mientras otros solo nos quedábamos en las sillas debajo de las grandes sombrillas que allí se encontraban.

Caleb y Eric preparaban la comida mientras conversaban y me quede unos minutos observándolo. Mire a Laura y a Rosaly quienes veían al bebe con ternura. Rosaly nos hablaba pero yo solo estaba en mi mundo pensando.

Pensaba en cómo sería mi boda en un futuro y en cuando Caleb me pediría matrimonio. Estaba ansiosa por dar aquel paso pero no quería presionarlo, quería que él me lo pidiera cuando estuviera preparado.

- Sophia. – Rosaly chasqueo sus dedos frente a mi rostro. Negué rápidamente y le sonreí con inocencia.

- ¿Qué ocurre? – Pregunte a lo que ellas rieron.

- Estabas en tu mundo ¿En que estabas pensando? – Pregunto Laura, mire a Caleb reír unos minutos y suspire viéndola de nuevo.

- Solo pensaba en cosas del futuro. – Dije encogiéndome de hombros. Ellas me miraron esperando más. – pensaba en...- No pude continuar porque sentí un peso en mis hombros.

Antes de poder voltear sentí que dieron varios besos en mis hombros descubiertos hasta llegar a mi cuello donde dejo unos cuantos.

Me sonroje mientras un escalofrió recorrió mi cuerpo que fue bastante notorio por lo que hizo reír a Laura, Rosaly y a Eric que acababa de llegar.

- ¡Vengan a darse un baño! – Grito Cat desde la piscina antes de que Derek la tomara en brazos.

- Mejor vengan ustedes a comer. Ya está todo listo.

- ¡Comida! – Grito Ismael saliendo como pudo de la piscina haciéndonos reír a todos.

• • •

En cuanto oscureció y acabamos de comer decidimos entrar a casa. Todos estábamos en la sala, Caleb, Eric y Ezequiel se encontraban hablando mientras Sophia, Laura, Rosaly, Ismael y Ethan jugábamos un Monopolio que Ethan había traído para divertirnos. Mike se había ido a casa, él bebe estaba durmiendo y Cat y Derek estaban casi dormidos en el sofá viéndonos jugar.

Todos estaban jugando entre risas hasta que una pelea empezó.

- ¡No se roben el dinero! – Exclamo Sophia en un gritillo mientras Laura, Rosaly y Ezequiel tomaban los billetes falsos y se reían de su enojo.

- Amor, no te enojes. Solo es un juego. – Dijo Caleb mientras reía con los chicos. Sophia se cruzó de brazos.

- No, devuelvan el dinero. Se supone que esto es un juego serio.

- Esta bien. - Los chicos bufaron pero entre risas devolvieron todo el dinero.

- Iré a buscar sangre en la nevera ¿Tienes cierto? – Pregunto Laura a lo que Rosaly asintió concentrada en sus billetes falsos.

- Sip, como crees que no tendría. No soy Sophia. – Dijo con aburrimiento fingido.

Laura rio y camino hacia la cocina, tomo una de las típicas copas de Rosaly y saco de la nevera una bolsa de sangre. Coloco la copa en la mesa y con cuidado sirvió el contenido de la bolsa en ella.

Al terminar boto la bolsa y tomo la copa entre sus manos dando un trago de esta refrescándose por su sabor. Empezó a caminar fuera de la sala hasta que un dolor de cabeza llego a ella lo que indicaba una visión, pero esta fue distinta.

Se detuvo en su lugar mientras sus ojos se teñían completamente de negro, la copa que se hallaba en sus manos cayó al suelo haciendo un estrepitoso ruido al romperse en pequeños pedazos a sus pies.

El ruido llamo a los presentes en la sala quienes con extrañeza vieron hacia allí.

- Laura. – Llamo Rosaly mientras se levantaba del suelo. – Esa niña torpe, ya es extraño de por sí que no se le derrame la bebida. – Todos rieron mientras ella caminaba para ver qué había pasado.

Llego hasta allí observando a Laura de pie sin moverse lo cual le extraño. Se acercó a ella observando como la copa estaba destruida a sus pies y como sangre a rodeaba.

- Siempre dejando caer las bebidas. – Busco un trapo y se extrañó al ver que no se movía ni le respondía. – Laura. – Se acercó a ella con lentitud y fue donde pudo darse cuenta el color de sus ojos lo cual la asusto al instante. - ¡Laura!

El grito de Rosaly alerto a todos en la sala, el primero en correr hacia allí fue Ezequiel quien era seguido de Sophia.

Él se acercó a ella y la inspecciono buscando alguna herida, tomo el rostro entre sus manos sin que ella reaccionara y se preocupó al ver sus ojos totalmente negros.

- ¿Qué está pasando? – Pregunto Sophia preocupada mientras veía los ojos de Laura y esperaba alguna respuesta de Ezequiel.

- Está teniendo una visión. Pero esta vez es más grave, sus ojos nunca cambian. – Dijo mientras seguía inspeccionando a Laura quien solo se encontraba fija en su lugar.

- ¡Caleb! – El nombrado llego al lado de Sophia preocupado. – Tienes que llamar a Amelia ¡Rápido! Necesito que venga.

Caleb tomo su teléfono y antes de poder marcar el número Eric lo interrumpió.

- Recuerdo donde vive. – Dijo. – Iré a buscarla.

- ¡Corre Eric! – Exclamo Rosaly.

Eric salió a toda velocidad de casa mientras los demás esperaban expectantes. Con todo el alboroto se escuchó el llanto del bebe indicando que había despertado. Rosaly fue de inmediato mientras los demás nos quedábamos en la cocina con Laura.

Luego de unos minutos los cuales parecieron eternos para los presentes Laura cerró los ojos, se dejó caer en los brazos de un asustado y preocupado Ezequiel quien la tomo en brazos.

- Llévala a la habitación Ezequiel. – El asintió y subió escaleras arriba perdiéndose de vista.

Cinco minutos después llego Eric quien de inmediato dejo a Amelia en el suelo, Sophia le explico rápidamente a la situación. Amelia hizo una mueca y subió las escaleras para revisarla. Todos se sentaron en la sala para esperar hasta que pasos se escucharon en las escaleras por lo que todos voltearon a ver hacia allí levantándose de sus asientos.