Después de tanto tiempo... [TERMINADA]

Capítulo 1

A veces cuando menos esperas encuentras a ese ''alguien'' con quien compartir tu vida y que crees que sin el no seguís o que nunca mas encontrarías otra vez el amor .
  Esto me paso a mi, me encontraba totalmente enamorada de Mariano y creía que era el hombre de mi vida, pero que al final fue todo lo opuesto a lo que me imagine.

  Cuando sos chica imaginas encontrar tu príncipe azul y que serán felices para siempre, y cuando creces ves que en realidad nada es así, no hay cuentos de hadas reales y príncipes que te salvan del peligro. Solo hay vos, que tenes que luchar día a día por sobrevivir en este mundo que esta cada vez peor.

Pero todo no fue siempre así, yo ya fui feliz y enamoradiza, lo que pasa es que me robaron la confianza que tenia en las personas, me robaron partes de mi corazón que se que no volverán jamás. Perdí parte por parte de mi corazón cada vez que una persona importante para mi se fue, amigos, familia, amores... En fin, todo lo bueno que tenia se fue por un ''amor'' que creía ser el centro del mundo y que al final fue lo peor que me paso.

  >> No te acerques a el, no me da buena espina<<

>>No me cae bien La, escúchame no vallas con el<<

>>Es solo una calentura luego se le pasara y vos vas a sufrir<<

  Cada vez que recuerdo lo que me decían, como me alentaban, me cuidaban y que ahora ya no están, ya no me cuidan y sufro por ser tan cabrona y no hablarles de nuevo.
  Tantas veces me dijeron para no ir a vivir con Mariano, que no les caía bien y que solo era una calentura, me decían que no iba a cuidarme pero no les creí, de una me fui y intente creer que el era bueno para mi, que me amaba solo a mi y que me iba a ser fiel siempre.

   Los extraño tanto.

  MI vida nunca mas fue la misma después que se fueron de ella. Los quiero conmigo de nuevo, quiero abrazarlos tan fuerte y nunca mas soltar.

Quiero besarle. La persona que mas extraño es el, el si me cuido, me amo y nunca hizo nada para lastimarme. Pero de cabeza dura y por una calentura lo deje, lo destroce, lo sé, pero lo que mas quiero ahora es que me abrace y diga que va a estar todo bien.

  Ya paso dos días trancada en casa con miedo a salir, con miedo de encontrarlo y que me haga mal de nuevo. No quiero verlo, no quiero que me toque, que me mire, ni que piense en mi. Me da asco recordarlo. Me da asco lo que me hizo. Me da asco no tener fuerza para llamar a mi hermilla y ser capaz de pedirle ayuda.

  No soporto mas nada, no puedo mirarme al espejo y no llorar, llorar por ser tan ingenua, por no tener el valor de pedir ayuda, por no ser lo suficientemente fuerte como para pegar el teléfono y simplemente llamarla. Se que me irías ayudar, la conozco y por mas que este enojada me ama y haría cualquier cosa por mi.

De quien estoy hablando? De una de las personas que se que realmente aun se importan conmigo. O eso creo no.

Euge.

Mi hermana del alma, que amo con el alma y que no se como aun sobrevivo sin ella a mi lado.

No se cuanto tiempo estoy con el teléfono en la mano, con su numero en la pantalla creando coraje para llamar y pedirla que me ayude y que nunca mas me deje.

  Por fin como ya no tengo mas fuerzas para pasar por eso sola. La llamo. Toca una, dos, tres veces hasta que escucho su vos, su hermosa voz que no oía hace mucho.

- Hola?-hubo un silencio en la linea porque no podía hablar, solo de escuchar su vos me daba ganas de llorar y solo decir ayúdame.- Hola?-hablo de nuevo y ahí tuve finalmente el coraje para soltar una pocas palabras.-

- E..Euge?-casi me rompí solo con decir su nombre.-

- Lali? Que paso, Porque mes estas me llamando?-pregunto extrañada pero con razón, hace tanto no hablamos que hasta yo no me lo iba a creer-

- Te necesito-fue lo único que pude decir, si hablaba algo mas me rompería en llanto y no quería hacer eso ahora.-

- La!!-extranãba escucharla llamarme así- Estas en casa?-conseguí murmurar un ''si'' bajito pero audible- Espérame. Estoy yendo ahora.-y colgó. Sabia que no me iba dejar en banda, por eso la amo tanto.-

  No paso como diez minutos y escuche el timbre. Sabia que era ella así que me levante y abrí la puerta. Sabia que me veía mal, pero cuando sus ojos se posaron en mi y se agrandaron tanto supe que estaba peor de lo que pensaba.

-Lali?-fue lo primero que dijo y lo que basto para largarme en sus brazos y romperme en llanto. Necesitaba tanto este abrazo. Me llevo al sillón y me recostó en sus piernas en cuanto me acariciaba el pelo, sabia que eso me calmaba. Cuando por fin pude calmarme un poco, después de que creí que fueron horas con ella ahí cuidándome, me levante y la mire a los ojos. Esos profundos y penetrantes ojos verdes que demostraban una gran preocupación y estaban rojos, seguro había llorado al verme así en cuanto dormía.