Capítulo 15

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PETER

Hoy invite a Lali al cine, quería estar solo con ella porque en la última semana siempre estábamos con alguien, sea Euge y Nico o Gaston. Quería hacer algo distinto, pero no sabía qué hacer, quería sorprenderla con algo.

Fuimos al cine y ella escogió la película, vimos una de comedia. Me da más gracia su risa que la película en sí, siempre me gusto su risa, su sonrisa, sus ojitos brillantes y las paletas, era imperfecta, pero increíblemente perfecta para mí.

Comimos pocholos y compre muchos dulces, nos divertimos un montón. Luego la lleve a plaza donde nos sentamos y aprovechamos para estar abrazados y mirar los niños jugando. Siempre imagine un hijo nuestro, más bien una hija, sería la princesa de papa, la imaginaba chiquita como Lali, con su boca y sus ojos grandes y con su personalidad. De mi solo quería que sea calmita, que no sea de armar quilombos como la madre, sonreía imaginándonos cuidando a un bebe, y despertando a la noche, y me acostar con los dos en cama, todo era un sueño.

-  ¿La?

-   Mmm?

-   ¿Te gustaría ser mama?  -tocio alejándose de mí y me mirando a los ojos-

-   ¿Como?

-    Si te gustaría ser mama... sabes, veo a estés nenes jugando y me imagino a vos embarazada, con una panza mayor que vos y me muero de amor.

-   ¿Enserio quieres eso mi amor?

-   Obvio que quiero. Serias la madre más hermosa del mundo.

-   Vos decís... posta, ¿posta ser padres?

-    No estoy diciendo ahora, ahora, ¿pero... en un tiempito quizás?

-  ¿Vamos viendo sí? No apresuremos nada y si viene, seremos los papas más felices del mundo. -sonreí asintiendo y le besé la punta de la nariz. -

Nos besamos y volvimos a mirar los nenes jugando, la nostalgia de que en un tiempo sea un hijo mío ahí jugando me mata, por mí ya no quería imaginar, ya quería tenerla o tenerlo en mis brazos, pero no quiero forzar la cosa, que fluya normalmente.

LALI

Siempre pensé en tener una familia con Peter, pero nunca me vino en la cabeza que él estuviera haciendo lo mismo, cuando me pregunto si me gustaría ser mama me sorprendí mucho, era obvia la respuesta, me encantaría ser la mama de sus hijos. 

No quería ser mama AHORA, pero en un tiempo quizás. Después de eso me llevo a casa y a la hora de despedir me beso y me dijo que a las ocho estuviera arreglada para salir, iríamos a un restaurante, me dijo que tenía una sorpresa, pero no me quiso decir que era, él sabe que no me gustan las sorpresas, odio no saber las cosas.

                  
PETER

Me puse un blazer con una camisa polo, unos jeans oscuros y zapato social. Puse también el perfume que a Lali más le gusta y la fui a buscar.

Llegando allá toqué el timbre y me atendió Euge, estaba en pijamas y con el pelo todo enmarañado, pero aun así se veía tierna la hija de puta. Solté una carcajada y le di un abrazo, luego me dijo que Lali ya casi estaba y me senté para esperar.

Bajo las escaleras con un vestido rojo hasta los pies pegado a su cuerpo, marcaba perfectamente su figura. También tenía la boca roja y un maquillaje sencillo.

Me miro y sonrió, esta bellísima, le tomé de la mano y besé para luego darle un pico.

Llegamos al restaurante y ella arrebato todas las miradas, era increíble lo bella que estaba y era casi imposible que nadie la mirara, me quede un poco celoso, pero me seguro de la mano, me dio un beso y me quede tranquilo.

  La cena transcurrió tranquila, llena de risas, charlas y miradas llenas de amor. Estaba tan completo junto a ella, con solo mirarla me hace bien. Al final la lleve a la orilla de la playa y extendí un paño en la arena, nos sentamos y nos quedamos mirando a las estrellas. Era la noche perfecta, nosotros, el atardecer y la playa.

LALI

La noche fue completamente romántica, Peter se superó hoy. Cenamos, nos sentamos en la orilla de la playa y miramos a las estrellas. Mi vida estaba completa, no veía un futuro sin el y está perfecto para mí.

Después de un tiempo me tomo de la mano y me empezamos a caminar, no sabía a dónde íbamos, pero confiaba en él.

Llegamos al Hilton y lo mire boquiabierta, no me imaginaba eso. El por su vez me sonrió y me llevo adentro, subimos y cuando entré a la habitación lo miré aún más incrédula, era enorme, con vista hacia la playa y una cama mayor aún.

-   ¿Qué es esto?

-    Tu sorpresa. ¿Te gusto?

-    ¿Si me gusto? ¿Me estas jodiendo? Es perfecto Peter, no tenías que gastar tanta plata en mí.

-    No, no tenia, pero quise y acá estamos.

-     Te amo.

-     Yo también te amo.

Me llevo a conocer el lugar que era realmente gigante, tenía todo, seguro gasto muchísimo con esto, es un loco lindo.

Por fin llegamos al cuarto, la parte más esperada de la noche. Me tomo de la mano y me llevo hacia el abrazándome, y susurro un ''te amo'' en mi oído antes de empezar a sacarme el vestido lentamente, me quede solo en ropa interior de encaje negro, otra de las cosas que lo volvía loco. Me miro pícaro y me sonrió, me gustaba provocarle. Me dio besos en todo el cuerpo, ninguna parte quedo sin sus caricias.

PETER

Después de besar todo su cuerpo le bese la boca, un beso tierno y calmado, pero eso no duro mucho, cada vez más se fue volviendo más agitado y necesitado, la cargue y la lleve a cama depositándola con cuidado, era como una muñeca de porcelana, tenía miedo que con algún movimiento brusco la quebrara.

Le di un beso más en la boca y fui bajando por su mejilla, pasando por el cuello y en el medio de los pechos, le saque el corpiño y di toda mi atención a sus pechos, los mordí y chupe hasta cansarme, ella me tomaba del pelo y pujada, estaba jadeando de placer en mi oído.

Hoy quería complacerla, daría todo de mi para que su placer sea inmenso. Fui besando su vientre y bajando por los muslos, llegué a su parte más íntima y le di un besito, cosa que le puso la piel de gallina. Bajé sus bragas y ahora mi atención fue directamente a su parte más íntima, la volví loca, su respiración se volvió entrecortada y se deshizo en mi boca, sabia de maravilla su sabor.

Intento sacarme la camisa, pero negué con la cabeza.

-     Hoy yo estoy en el mando, te volveré loca y te correrás para mí una y otra vez.

LALI

Cada palabra que salia de su boca me excitaba mas, sin dudas me estaba volviendo loca, puso su boca en mi entrepierna y le tome del pelo, me estaba dando el segundo orgasmo en cinco minutos.

Después se sacó la ropa y me penetro lentamente besando mis labios, de pronto de embistió de una y grite, eso sí que fue inesperado. Y de ahí comenzó nuestra noche de amor, que contó con millones de besos, caricias y seis orgasmos, no lo puedo creer lo que hice, me quedé exhausta, no tenía fuerzas para nada. La ultima cosa que recuerdo fue yo diciéndole un último ''te amo'' y el dándome un pico diciéndome ''yo más''.

Después de tanto tiempo... [TERMINADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora