Capítulo 2

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Nos quedamos mirándonos por lo que creí varios minutos hasta que ella decidió romper el hielo y aun llena de preocupación hablo.

-        ¿La? ¿Estas mejor?  -asentí, con su presencia quien no estaría bien, me hace feliz solo que tenerla a mi lado sosteniéndome para no caer. - Ahora decime que paso. Porque cuando me llamaste te juro que casi me muero escuchándote hablar de aquella manera. -no me lo puedo creer que después de todo lo sucedido aún se preocupaba tanto por mí, aun me ama como si fuéramos aquellas hermanas de siempre. -

-        Lo primero de todo lo que quiero y tengo que hacer es pedirte perdón-intentó negar con la cabeza, pero no la deje seguir- No déjame a mi ahora. Quiero pedirte perdón por todo lo que he hecho, por lastimarte, lastimarlos en el caso, por no confiar en ustedes y ser tan cabeza dura. Te extraño Euge, extraño poder abrazarte, tenerte a mi lado siempre y cuando te necesite, extraño nuestras jodas y nuestras rondas de amigas, extraño absolutamente todo lo que hacíamos. Hasta cuando te ponías en pedo y yo tenía que encargarme de todo. -reímos, también extraña su risa- Por favor perdóname, no necesito que todo sea como antes sé que no podrá serlo, pero necesito saber que perdonas-termine soltando algunas lágrimas que me las seco con la punta de sus dedos-

-        Ya te perdoné hermanilla. Hace mucho quería llamarte y decirte que te extrañaba, a lo mejor te extrañábamos, TODOS. -sonreí al saber que me extrañaban, pero mismo que por un segundo creer que él me extrañaba- Y si... él es el que más extraña, después de mi obvio-solté una carcajada, es tan bueno que me haga reír cuando estoy en este estado-

-        No sabes lo mucho que los necesito China. -la abrace, no aguantaba más-

-        Ahora dime, porque estabas así, nunca te vi de esa forma.

No me quería soltar de su abrazo, sabía que en algún momento tenía que hablar pero aún no estaba lista, quería tenerla así calmita por un poco más de tiempo hasta que explote la bomba en su cara. Sabía que estaba preocupada, que quería que soltara todo luego, pero no podía, no puedo decirle todo lo que pase por un error que fue solamente mío, y claro que tenía que arcar con las consecuencias.

-        Euge yo...-me calle, estaba un poco más lista que antes pero aún no estaba segura del todo.- Sabes que cuando nos peleamos me fui a vivir con Mariano no?-asintió un poco confusa- En el principio todo iba muy bien, me trataba con amor y me cuidaba. Pero después de un tiempo se volvió otra persona, una que nunca conocí. De un día para el otro empezó a emborracharse y a pegarme cuando llegaba en casa-me miraba aterrada por todo lo que estaba diciendo y yo empezaba a quebrarme- Lo suportaba porque pensaba que era por el estrés del trabajo y que luego iba a pasar.-suspire- Y como ves no paso, empeoraba cada día mas, me pagaba casi todos los días que pensé que no iba aguantar mucho tiempo hasta que un día llego muy, pero muy ebrio que me agarro a fuerza y me lanzo a la cama-ahí sus ojos se agrandaron y lágrimas empezaron a salir- Me saco la ropa, como era más fuerte que yo no lo pude detener y me hizo suya a la fuerza-sollocé- Fue la peor cosa que me paso en la vida Euge, y no fue solo una vez, pasaron varias y varias veces hasta esta semana que se fue a Londres para un negocio de la empresa. Me quede estés días creando coraje para llamarte o simplemente dejar de llorar, necesito salir de eso, necesito que me ayudes a salir de eso porfavor-ahi me largue, no aguante más y llore como una niña  con su madre-

-        Cálmate mi chiquita... yo no lo puedo creer que este bastardo te hizo eso. Si Peter supieras.-me estremecí con solo escuchar su nombre otra vez- Lo mato, te juro que si lo veo cerca tuyo otra vez lo mato-decía abrazándome cada vez más fuerte- No te preocupes La, todo va a estar bien ahora, me tienes a mí, nunca me perdiste.-agradezco por tener elegido la mejor amiga del mundo- Vamos...-la mire extrañada- Que? ¿Crees que te vas a quedar acá esperándolo? Vas a venir a vivir conmigo dale, agarra tus cosas y vámonos.-le di otro abrazo bien fuerte y fui por mi cosas, sabía que no sería capaz de decirle no, no otra vez.-

  Me fui por mis cosas y agarré todo lo que pude, luego nos fuimos a su casa que quedaba un poco cerca de la mía.

  Cuando llegamos me quede parada en la puerta, hace tanto tiempo que no vengo que me hace extraño volver, y justo en esa situación.

Euge me miró y me agarro el brazo para correrme adentro de la casa, sabia por lo que estaba pasando así que solo se limitó en colocar mis cosas en el cuarto y sentarse a mi lado. Me abrazo y no dijo más nada, la agradezco tanto por eso, no necesito preguntas ahora, solo alguien que me abrace y me deje llorar en paz.

Se pasaron treinta minutos hasta quedarme totalmente dormida en sus brazos, con ella acariciándome el pelo y diciéndome que todo estaría bien. Me lo dijo tantas veces que hasta soñé como con cuando éramos chiquitas y re unidas, cuando éramos inseparables y nada ni nadie nos podía detener.

Después de tanto tiempo... [TERMINADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora