PARTE SESENTA Y TRES

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-Quiero que el me lo diga, quiero que sea el propio Won Sik quien lo haga. Tu solo eres un pequeño hombrecillo celoso que no acepta el hecho de que ahora me quiere a mi. -Dijo Leo tratando de mantenerle la mirada a pesar de sentir unas nauseas espectrales.

-Tus labios venenosos serán sellados, lo prometo. No me he dedicado en cuerpo y alma para que mi pequeño termine con un pendejete como tu.

-A Ravi lo has convertido en nada una y otra vez. Acepto que jamás mencionó tu nombre y no lo hizo por que significa que ya no eres nadie.

N sintió hervir su sangre.

-Te equivocas, el amor que tenemos nos llevó a luchar contra nuestro infortunio. Ravi se prostituye para mantenerme vivo, así que dime tu, ¿Por que seguiría vendiendo su cuerpo si ya no siente nada por mi?

Las palabras del moreno no tuvieron sentido.

-No entiendo a que te refieres. -Inquirió el asombrado Leo.

-¿Eso no te contó? ¡Vaya! -La sonrisa se ensanchó en los labios de N quien presintió que su plan iría por buen camino. -Hubo un tiempo en el que nos amábamos como jamás te amara a ti, pero como te dije, soy alguien peligroso y eso implica tener enemigos.

Las nauseas en la garganta de Taek se intensificaron al punto de que el mismo olor del café le asqueo.

N continuo hablando.

-Me metí en problemas y Ravi me salvo, pero a cambio de venderse cada noche y dar parte de sus ganancias al hombre que tiene sus garras sobre mi. Se sacrificó en la oscuridad para que yo estuviera a salvo y lo sigue haciendo hasta ahora...

Leo recordó, en el departamento de Hong Bin, cuando Won Sik le dijo que se prostituía y que no dejaría de hacerlo, ahora sabía la razón.

-... Intenté con todas mis fuerzas lograr hacer las cosas bien y trabajar arduamente para liberarlo, pero cada caricia de hombres extraños fueron arrancándole el alma, pedazo a pedazo mi pequeño fue perdiendo humanidad y trago a trago, inyección tras inyección, el muchacho que conocí se volvió un saco de carne sin vida.

Taek miraba como la cara de Hakyeon se iba desfigurando de tal manera que se dio cuenta que intentaba evitar llorar.

-Por eso es mejor alejarlo de ti, has matado lo que había en el, yo puedo devolvérselo, conmigo estará mej...

-¡¡Una mierda!! -Gritó furioso N a la vez que golpeaba con el puño la mesita, atrayendo la mirada curiosa de todos los comensales del lugar. -¡No lo alejaras de mi, no lo permitiré!

El corazón de Leo brinco asustado. Los ojos inyectados en sangre del otro le advirtieron que sería un buen momento para irse, regresar a un lugar seguro, quería hablar con Ravi, escuchar su parte de la historia,  quería escuchar de su propia voz quien era este hombre, por que no confiaba en sus palabras.

-Eso lo decidirá él, no tu.

-Ni siquiera has escuchado la mitad de la historia. El y yo estamos conectados, tenemos una deuda uno con el otro. Quiero que veas que el jamás hará por ti lo que hace por mi, seguimos teniendo sexo aún cuando estaban juntos, me ha tocado como a nadie y ha declarado que su amor será eterno, no seas idiota Taek Woon, solo eres una novedad en su vida, nunca un hombre de tu categoría se ha fijado en el, una vez que se le acabe el asombro, volverá conmigo como siempre. Recuerda eso, solo eres un juguete nuevo, así c.omo el chico de la tienda, Hyuk, con el también paso por una etapa como la tuya donde me hizo a un lado pero solo era su curiosidad por quitarle la virginidad a un niño como ese. Y así como tu y Hyuk, otros 20 más. No sabes quien es o de lo que es capaz por satisfacer sus necesidades. Nadie lo sabe mas que yo, por que a mi me ama, los demás solo son los otros...

Leo se levantó del asiento saliendo de inmediato del establecimiento y caminando con paso veloz de regreso al hospital.

Se estaba asfixiando.

Cada palabra fue un golpe certero en su corazón.

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-¡Wow! Creí que eran tus amigos.

La cara de Hong Bin fue de repugnancia al escuchar eso de los labios del niño.

-Ravi si es mi amigo, el otro tipo sentado ahí no. Ni el oscuro que se cree dueño del mundo. Yo solo estoy aquí por Ravi, solo por el. Los demás no me importan.

-Ok, entiendo.

El ambiente en ese momento cambio de forma radical, ambos se sintieron incómodos.

Hyuk sintió que el chico bonito quería que se alejara de él.

-¿Crees que aún pueda aceptar tu invitación a comer? Si no es que perdí mi oportunidad.

Hong miraba al piso, estaba repasando lo que acababa de oír sobre que Won Sik se prostituía y que era un ebrio. Era muy  impactante enterarse así de alguien por el que tu mejor amigo ha sufrido tanto, es como decía su madre, "ni que valiera tanto para todo ese drama".

Alzó la vista para ver al niño y este le sonreía ocultando por completo sus ojos quedando una línea preciosa en su lugar.

Su corazón dio un traspié, la garganta se le secó y no pudo evitar quedarse embobado por esa carita tan linda... pero de inmediato se sintió ridículo.

-Sigue en pié, pero me contarás más sobre ti. ¿Estás de acuerdo? -Era clara su intención de sacarle información que ayudara a su amigo, de algo podría servirle esta atracción. Aunque eso provocara que su cabeza diera una advertencia.

El pequeño sonrió aún más y asintió con la cabeza. Presintió que sus mejillas estaban rojas ya que la cara la sintió caliente. 

-Te lo agradezco, salí de mi casa sin nada encima, me estas salvando.

Hyuk también se sintió ridículo pero lleno de vitalidad, este chico era como respirar una brisa fresca y no una llena de humo de cigarro o porquería que venía de su querido Ravi. 

TORTURADonde viven las historias. Descúbrelo ahora