Él es Mi Idiota

Cap 18: Indirectas muy directas

¿Saben cual es la peor parte de una obra? Pues yo les diré.

Todo.

Estábamos ensayando las escenas y cada vez se acercaba más lo del beso con Johan.

¡Qué incomodo!

Erika me fulminaba con la mirada cada vez que podía, y eso me estresaba. ¿Acaso Johan es su novio o qué le pasa?

Habíamos avanzado bastante con el tema de la obra, la mayoría de los personajes ya se sabían el libreto, la escena que estaban ensayando ahora es la que Jasmine, una amiga de Jack le confiesa su amor.

Jasmine era interpretada por Erika.

La escena se trataba deque Jack corre a decirle a Verónica que la ama, pero Jasmine lo detiene.

—¡Jack, espera! — grita Erika,— No vayas, ella no te ama.

—Tendré que averiguarlo,— contesta Jack pero Jasmine lo vuelve a detener.

—¿Podrías concentrarte en mi? Yo soy la mujer que de verdad te ama. Toma este amor y convirtámoslo en una maravillosa familia,— decía Erika.

Traductor femenino: Ámame y dame 10 hijos.

—No me detengas Jasmine,— le dijo Johan,— Mereces a un hombre que te ame, que valore todos esos dones que Dios te dio. Y ese hombre no soy yo.

Uhh, golpe bajo.

—Ahora iré a buscar al amor de mi vida,— dice Johan mirando a la nada tocándose el corazón. Solté una risa,— Antes que sea demasiado tarde.

—¡Bravo! — gritó el profesor,— Ay, como amo mi obra. ¡Diez minutos de descanso y nos vamos con la última escena!

—La última escena es el beso,— me susurró Erick,— ¿Estas lista? ¿Te lavaste los dientes? ¿Quieres una menta?

—¡Ay, cállate! — grité y me fui al baño.

Luego de los diez minutos el profesor grita "Acción".

Mi personaje estaba tomándose un té y comienzo a decir,— Que mala suerte la mía. Me tendré que casar con un hombre al cual no amo,— dije a la nada,— Jack, mi amado Jack. ¿Por qué no luchamos más por nuestro amor? No era imposible lograrlo. Lastima que nos rendimos antes de tiempo,— tomé otro sorbo del té imaginario en mi mano.

—Verónica,— dice una voz masculina a mis espalda. Me levanto con cara de ilusión quedando en frente de Johan.

—Jo...Jack,— dije intentando no confundirme con el nombre de Johan.

—Mi amada Verónica,— dijo Johan.

—Jack, ¿Qué estas haciendo aquí?

Johan se acerca, me toma las manos y dice,— He venido a buscarte. Escapémonos Verónica, seamos libres, comencemos de cero.

Quitó las manos de su agarre y me di la vuelta frustrada,— No puedo hacerlo, mis padres...

—Ellos te han obligado a casarte con un hombre que no amas,— me toca el hombro y hace que me dé la vuelta mirándolo,— ¿Por qué no nos damos la oportunidad de amarnos?

—¿No lo entiendes Jack? Soy la heredera,— dije abriendo mis brazos en dirección al "público",— No puedo decepcionarlos.

Johan me toma de la cintura y el mentón haciendo que lo mire,— Y tu no puedes decepcionarte a ti misma. ¡Yo te amo Verónica!

—Y yo a ti Jack,— contesté.

Oh-oh, era el momento del beso.

Poco a poco nos acercábamos, pero cuando llegó el momento. La alarma de incendios sonó.