En multimedia: los moretones de Emma.
Vuelvo a despertarme tarde.
¿Qué sucede conmigo?
Esto en serio ha empezado a preocuparme, no es normal. Aunque hoy me desperté más temprano que antes, a las dos de la tarde para ser exactos.
El agua tibia se filtra por los poros de mi piel. Es tan gratificante tomar una ducha. Siento como todo el estrés de los días anteriores se drenan por el desagüe.
Al acabar de tomar la ducha, me cubro con la toalla y voy a mi habitación.
Me paro frente a mi gran espejo blanco, observo como las pequeñas gotas caen de mi cabello, luego me fijo en mi rostro y me sorprendo al ver horribles ojeras de un negro intenso bajo mis ojos. Bajo la mirada a mi clavícula y me acerco más al espejo para poder observar bien, hay un pequeño moretón. Frunzo el ceño.
No recuerdo haberme golpeado... Y mucho menos la clavícula. Dejo caer mi toalla, quedando completamente desnuda frente al espejo.
-Oh por Dios... -intento aguantar las náuseas llevando ambas manos a mi boca.
Mis piernas están cubiertas de moretones, horribles y profundo moretones. Me quedo un momento observando el espejo, sin poder afirmar si es real o solo un espejismo. Los moretones son tan intenso que no solo son morados, sino que agarraron un color rojizo y amarillento en los centros.
Respiro hondo un par de veces y para cuando me doy cuenta, mis mejillas yacen cubiertas de lágrimas.
Cuando por fin logro tener las agallas de alejarme del espejo, me pongo ropa interior cómoda y una camiseta. Busco mi celular en la mesita de noche y lo agarro, busco el número de mi "jefa" y marco.
Suena una vez, nadie contesta. Suena dos veces, nada. Suena tres...
-¿Hola? -habla la mujer -Alquiler de películas "Destello", ¿en qué puedo ayudarle?
Su tierna voz me hace sonreír, a pesar de que las lágrimas sigan bañando mi rostro.
-Hola -trato de contestar con un tono de voz normal -Soy Emma. Lamento mucho esto pero la llamo para decirle que hoy no podré ir a trabajar.
-¡Emma, cariño! -exclama e inmediatamente su voz se carga de preocupación -¿Por qué? ¿Estás bien? ¿Sucede algo?
Suspiro dramáticamente antes de contestar.
-He tenido algunos problemas en casa. Pero no se preocupe, mañana posiblemente estaré allí.
-No importa que vengas o no -dice un poco enfadada -Tú debes estar bien.
-De acuerdo -sonrío -Gracias por entender y preocuparse.
-Gracias a ti por avisar, cariño. Cuídate.
Y sin nada más que decir termino con la llamada.
Respiro hondo y trato de calmarme.
"Si tienes miedo, llámanos"
Las palabras de mamá retumban en mi mente.
¿Tengo miedo?
Absolutamente sí.
Sin embargo, si la llamo vendrán enseguida, no disfrutarán su viaje y eso sin mencionar que me acribillaran con preguntas de las cuales no tengo respuestas. Porque estos moretones realmente tienen mala pinta.
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ADAM (EN EDICIÓN)
Fantasy-¿Quién eres realmente? -le pregunto mientras mis piernas tiemblan a penas sosteniendo mi peso. Sus ojos se iluminan y por un segundo creo verlos cambiar con un brillo dorado. Instintivamente retrocedo, pero él me sostiene de la cintura, evitand...