Capítulo 39 "-No irás"

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Largo día.

Hemos despertado todos bastante temprano para poder ir junto a Renata y Beth.

Adam, quien durmió plácidamente conmigo, me prometió tolerar a Alex solo porque será él quien me salve, pero dijo exactamente que le daría su merecido si volvía a hablarme de aquella manera tan peculiar frente a él.

El hechicero parece tentar su suerte, pues cuando despertamos lo primero que hizo fue abrazarme y hacer todo un guión teatral sobre lo hermosa que me veo en las mañanas.

He conversado con Daniel acerca de lo ocurrido. Al parecer Adam no le dicho nada sobre David, y realmente se lo agradezco. Es mi mejor amigo, pero no estoy lista para decírselo de frente.

Por otro lado, yo he amanecido mejor, tengo unos cuantos hematomas nuevos pero nada grave.

Hemos venido hasta aquí, la gran biblioteca y casa de Renata. Todo el camino transcurrió en un incómodo silencio. Los tres chicos parecen no tolerarse entre sí, aunque debo admitir que he notado a Daniel y Adam más calmados, como si empezaran a llevarse mejor y eso me pone muy contenta.

Debí haber grabado la expresión de Renata al ver a su mayor ídolo, Alex Kanish, en persona. Su reacción fue digna de una película. Ella se quedó atónita por unos largos minutos mientras sus ojos amenazan con salirse de órbita.

Beth también se sorprendió pero reaccionó más al hecho de que estaba de vuelta.

Después de que Renata haya técnicamente acosado a su ídolo, estamos todos aquí, sentados alrededor de la gran mesa.

-¿Entonces dices que puedes sacar el hechizo? -pregunta Daniel con ese tono de hermano mayor sobreprotector.

Alex sonríe ligeramente y asiente.

-Necesitaré una cosa muy importante, pero si la conseguimos todo será muy fácil -alega.

-¡El anillo de Zeus! -exclama Renata emocionada.

Todos clavamos nuestros ojos en ella quien se disculpa por hablar tan fuerte.

Alex, por otro lado, sonríe con ternura y aprobación.

-Sí -contesta -Eres una muy buena hechicera.

Renata suelta un pequeño grito reprimido de la emoción y yo no puedo evitar sonreír ante la escena.

Si yo conociera a Imagine Dragons estaría de la misma manera...

-¿Y cómo lo conseguimos? -pregunta Adam con una seriedad que asusta.

-Está en el museo de los Dioses -hace una mueca -Y claramente no es en Estados Unidos. Está en Skeepter un lugar muy poco conocido, solo los seres mágicos sabemos de su existencia.

Un escalofrío recorre mi cuerpo al escuchar el nombre de aquel lugar.

-Skeepter fue despoblado hace siglos -habla Renata con el ceño fruncido.

Alex sonríe y niega con la cabeza.

-Eso es lo que nos hicieron saber -dice -Pero hay sobrevivientes, pequeños grupos de personas... O mejor dicho, de monstruos que son capaces de comer hasta su propia carne.

Trago saliva. Esto es tan subrealista y lo peor es que entiendo las cosas a media.

-Entonces no hay porqué seguir esperando -habla Adam poniéndose de pie -¡Vámonos!

Renata y Alex se miran y estallan en carcajadas.

Esto es incómodo...

-Siéntate -le susurra Daniel.

ADAM (EN EDICIÓN)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora