Capitulo 39

3.9K 187 45
                                    

Nos encontramos sentados alrededor de la mesa, veo a todos sonriendo y yo sonrió para mi misma, tomo el cuchillo y me acerco para cortar el pavo—¡ESPERA!—grita Harry—quiero tomar una foto—dice, yo volteo los ojos y me río, Harry prende rápido su celular y le pone el temporizador—vamos todos júntense—dice el rápido y todos los acercamos detrás del teléfono, el flash se muestra, dándonos a entender que la foto ya se había tomado, en mi cara se forma una gran sonrisa y mi corazón palpita rápidamente, jamás había sido tan feliz en la vida.

Todos nos sentamos y prosigo a servir en cada uno de los platos una porción de pavo, todos comemos juntos en la mesa, diciendo chistes y contando historias de cuando éramos más jóvenes, me da risa ver la cara de Mike cada vez que se entera de las cosas que Harry y yo hicimos antes de que se conocieran, sonrió como nunca había sonreído, siento como Alberto me toma de la mano.

Yo me volteo y le sonrió, nunca había amado tanto a alguien en mi vida, volteo a ver la hora y me doy cuenta que son las doce—muy bien es hora de abrir los regalos—digo, todos nos dirigimos al pino.

—Harry, mike—digo, ellos me voltean a ver —Alberto y yo tenemos un regalo muy especial para ustedes—digo, Alberto me toma de la hombros y me los aprieta suavemente.

Tomo un sobre que está puesto en el pino y se los entregó, mi corazón esta latiendo con fuerza por lo que se aproxima—es para que puedan pagar el pastel de su boda—digo, Harry se me queda viendo con cara de sorpresa y después niega—¿boda?, estas loca ally —dice Harry —no Harry no está loca—dice Mike y Harry se voltea, yo quiero llorar de la emoción al ver la cara de Harry cuando ve a mike de rodilla con un anillo—¿te quieres casar conmigo?—Mike pregunta.

Harry se queda callado unos segundos y después grita—SI, SI, SI Y MIL VECES SI—grita y se pone a llorar de la emoción.

Harry se levanta y se limpia las lágrimas—ahora nos toca a nosotros darles su regalo—dice el.

Harry nos entregan un sobre con las escrituras de algo, Alberto y yo lo miramos confundido—es un mini departamento, mike me dijo que se los diéramos y nunca supe por qué hasta ahora, está en Mónaco el departamento—no termina de hablar cuando yo ya me encuentro abrazándolo—gracias—le su susurro, hoy a sido la mejor navidad de todas. 

                                           —

Me encuentro empacando, saco la ropa de Alberto y de esta sale un sobre abierto.

Al ver el sobre siento una pulsada en el pecho y no una buena, lo tomo y saco lo que contiene adentro.

Empiezo a leer.

Noviembre—12— 2002

Ally cuando leas esto apenas habrás cumplido 18 años, como comenzar esto...bueno. Tú siempre estarás en mi corazón sabes que te amo y siempre lo e echo.

Mi amor, yo me fui por qué tenía que protegerte tu contienes esa sangre que tanto anhela la gente y tú mi vida te tienes que proteger.

Por eso deje a Alberto a cargo tuyo él es el agente 2.k, él te protegerá de todos tus males tal como acordamos hace años.

Él te protegerá...tiene prohibido separarse de ti,  ya que por eso le pague.

Te quiero con todo mi corazón nunca me olvides corazón te ama papa y que siempre serás todo para mi preciosa, hoy y siempre corazón.

Te ama hoy y siempre, papá.

Al terminar de leer eso caigo de rodillas llorando, Alberto solo estaba conmigo por dinero, no puede ser, me quedo ahí un momento analizando lo que acabo de leer. Lloro y grito de la tristeza y enojo.

—¿Ally que tienes?—escucho la voz de Alberto por detrás, me abraza, yo le empujó y me levanto—ya lo sé todo, maldito imbecil, tú, tú, tú, y tú, solo estás conmigo por la plata que te dieron por mi—grito y él se queda pasmado.

El me mira con ojos llorosos—no mi amor, eso no es cierto—no le doy tiempo de hablar y cuando mi mano retumba en una de sus mejillas—lo leí, maldita sea lo leí todo, lo sé todo—le grito.

Yo me caigo de rodillas—te entregue mi virginidad, te entregue mis secretos, te entregue mi libertad y tú solo lo hicistes por dinero—no grito, lo digo tranquilamente, él se me acerca.

El se pone aún lado mío—Ally deja explicarte—lo callo—¿dime cuánto te pagaron?—le digo—no eso no importa, el dinero no me importa—dice el—lo callo de nuevo—dímelo, quiero que me digas por cuanto me e vendido—digo en voz calmada.

—diez millones—dice en un susurro y eso fue la gota que derramó el vaso, me quedo en silencio en unos momentos.

Alberto me toma de un hombro—Ally déjame explicarte—trata de decir de nuevo.

—Déjame—salgo del cuarto y tomo las llaves de la mesa.

Escucho como Alberto me sigue detrás—¿a donde vas?—grita el y me sigue, yo corro pero siento como el mi segue,  llego antes de que me alcanze al carro y subo, pongo las llaves y piso el acelerador dejándolo a él la banqueta de la entrada.

Cuando avanzó unos kilómetros más empiezo llorar y a preguntarme, ¿por qué?, ¿por qué a a mi?, las lágrimas me impiden ver y no puedo respirar, estoy desecha.

Y esta vez no hay nada ni nadie que impida que me rompa en pedazos.

                                        —

Las personas que comenten este capítulo serán personajes en el siguiente capítulo.

All the love . MJ.

Enamorada de mi primoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora