- Recuerda que Jack vendrá en la tarde, me pidió que le ayudara con algo de Francés- dijo Roxanne.
-Yo odio el francés- respondí haciendo un ademán de asco.
- Va a venir Jack, ¿Y tu actúas así de despreocupada?- preguntó Roxanne.
- ¿Y cómo debería actuar?- pregunté de vuelta.
- Mujer... ¿No recuerdas nada, verdad?- preguntó Roxanne.
Negué con la cabeza, apenas recordaba haber azotado contra el suelo, y eso por que al día siguiente tenía el labio partido.
- En la fiesta del mes pasado, me descuidé un momento y ya estabas tumbada en el suelo, ebria, y besando a Jack- dijo Roxanne.
Abrí los ojos como platos.
Vaya, eso explica porque había actuado tan raro últimamente.
-¡¿Qué!? ¿Por qué no me dijiste nada?- pregunté.
-Pensé que lo sabias- respondió Roxanne.
Tapé mi rostro con ambas manos.
Mi vida es una maldita comedia.
* * *
-Gracias Roxanne, no te quito más tiempo, me voy- escuché decir a Jack.
- No, no, ¿Por qué no te quedas un rato? Ya sabes... ¡Podrías invitar a Jeremy! Claro, si no es un universitario muy ocupado...- dijo Roxanne.
- Oh, pues bien... no, Jeremy está... en descanso, creo, no sé bien como funciona, si quieres lo llamo- respondió Jack.
* * *
- Temperance... ¿Podemos hablar? Digamos... ¿Los dos solos?- pregunté Jack.
Demonios.
- Claro- respondí nerviosa.
Le hice un ademán a Roxanne para que saliera al jardín con Jeremy.
- Sobre ese viernes...- dije pero Jack interrumpió.
- Eres una chica de personalidad muy linda, somos muy buenos amigos, lo sabes, y no dudo que seguramente eres muy atractiva pero... yo tengo novia- dijo Jack.
Auch.
- Claro, claro... yo, solo lo hice por que estaba ebria. Lo siento- aclaré.
- Los efectos del alcohol- bromeó Jack rascando su nuca.
Reí sin gracia tratando de restarle incomodidad a la situación, pero solamente empeoré el asunto.
- ¿Y si hacemos como si nada hubiera pasado nunca?- pregunté.
Jack asintió.
- Bueno... ¿Qué hora es?- preguntó Jack.
- Las...- revise mi celular- 10:40 pm- respondí.
- Ya es tarde... debo irme- dijo Jack.
- ¿Te acompaño a la salida?- pregunté, aún no podía dejar de estar nerviosa.
Jack asintió con una sonrisa.
Acompañé a Jack hasta el auto de Jeremy, y antes de que se fuera no supe como despedirme.
- Adiós- dijo Jack besando mi mejilla y subiendo al auto.
- Adiós- dije apenas, con mis mejillas hirviendo.