CLARKE POV
Había pasado una semana desde que ella terminó conmigo, con Raven estábamos intentándolo todo por llegar a Lexa, pero casi siempre Octavia o Costia nos lo impedían, cualquier plan por acercarme, ellas simplemente la alejaban de mi, he intentado con la campana pero me sigue ignorando, he dejado notas románticas en su casillero con ayuda de Raven, pero cuando nos escondemos para ver su reacción, Octavia se la saca de las manos y la rompe en nuestras narices, literalmente, ella nos mira con cara de satisfacción y se la lleva. Mi amiga se lo ha tomado de manera personal, le ha agarrado una manía y no de las buenas a O., dice que es el mismo demonio, mientras que a mi la que realmente me preocupa es la otra, esa tal Costia, he visto como se miran, como busca cualquier excusa para poner sus manos en contacto con mi Lexa, si, tal vez estoy un poco paranoica pero es que intenté durante toda la maldita semana cruzar aunque sea dos palabras con ella y ni siquiera me mira, preferiría que me mirara con enojo, odio o lo que sea, pero que me dedicara un minuto de su preciado tiempo a mi.
Esa mañana no pintaba diferente a las mañanas anteriores, nuestros planes nuevamente truncados, le mandamos globos de corazones con un chico al que Raven le pagó y vimos como Octavia los pinchó uno por uno frente a nuestra atenta mirada.
- Uff como la detesto - bufó Raven cuando por fin nos sentamos en unas de las mesas para almorzar.
- Actúan bastante bien improvisando, debo destacar - admití erróneamente porque si las miradas mataran, Raven ya me hubiera fulminado con la suya.
- ¿Que dices? es que se lo hemos puesto muy fácil Clarke, hemos fallado porque no hemos separado a Lexa de Octavia y Costia - me dice muy segura.
- Pero si eso es imposible, prácticamente se han vuelto inseparables, no dejarán a Lexa sola y menos sabiendo que estamos detrás de ella - le digo convencida.
- Pero hoy tenemos una baja, y ahora estamos igualadas dos a dos - me dice divertida como si se le hubiese prendido una idea, Costia hoy no vino en eso tenía razón, era una ventaja y un gran alivio para mi.
- Rubiaaaa - dice exaltándome del grito que pegó, me agarro el pecho con ambas manos, temía que mi corazón quisiera salirse.
- Hey, estoy aquí al lado, no a dos metros de distancia, Raven - la reto - ¿que pasa? - pregunto.
- No cancelamos los bombones - abro mis ojos en par en par - si mal no recuerdo - mira su reloj - ya tendría que estar entregándoselo - nos miramos y sin decir una palabra, salimos corriendo en busca de Lexa.
- Si llego a ver que Octavia tocar mis bombones la mato - dice Raven enojada, y agitada mientras corremos al pasillo en contra de la multitud que corría desesperada por llegar a clases.
- Son mis bombones Raven y son para Lexa, te lo estás tomando demasiado personal - le confieso y me mira.
- Es personal rubia, ¿no has visto como se nos burla en la cara cada vez que descubre la manera de acercarnos a Lexa? - me dice molesta.
- Si bueno pero - no me dejo terminar.
- Pero nada Clarke - se para en seco, poniendo su mano en mi estómago, haciendo que me frene de inmediato.
- Que carajos Raven - le digo pero me hace una señal con la cabeza para que mire hacia la dirección que ella está mirando. Viendo como una Octavia despreocupada se está chupando los dedos llenos de chocolate al estar comiéndose los bombones que eran de Lexa, temía por ella, Raven estaba colorada de la rabia y cuando menos me lo esperé ya se estaba dirigiendo donde estaban ellas, eso no era nada bueno por lo que salí inmediatamente a agarrar a mi amiga.

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Nada es lo que parece
Hayran KurguCuando la persona que alguna vez fue tu mejor amiga, hoy día se ha transformado en tu mayor enemiga, es sinónimo de problemas, me llamo Lexa Woods, y esta es la historia de mi vida.