Escuche mi nombre entre mis sueños de una voz dulce y tímida, y cada vez era más irritante, abrí mis ojos volviendo a la realidad y dando me cuenta de todo era un sueño excepto la voz de Piscis.
— ¿Desde cuando estabas aquí? ¿Vas a casa para dormir?
Niego con la cabeza para luego moverla en círculos esperando que me deje de doler por dormir en una silla. Observó que detrás de la castaña estaba Sagitario quién se sienta a mi lado.
— Deberías ir a casa.— Dice mientras me sonríe.
— Iré a hablar con Can.— Me levante decidida a ir junto a la pisciniana, no me gustaba que ella siempre estuviera cerca de mi hermano.
Con las justas puedo con Aries, no quiero lidiar con otra.
— Te traeré algo para comer.— Dice mientras me detiene.— A menos que me quieras comer a mí.— Ya empezó sus malos chistes, ruedo los ojos.— Mal chiste, de nuevo.
Sonríe con inocencia y me advierte de quedarme donde estaba mientras me da un corto beso de los labios haciendo que espabile y se vaya el sueño que tenía, me levanto mientras él ya se encuentra corriendo.
Me río por las expresiones que tiene y sus malos chistes, realmente no es mal chico. Me quedo a esperarle mientras un ruido se escucha detrás mió y cuando me doy vuelta para ver que paso dos figuras me tapan la vista.
Eran dos señores, una mujer de largos rizados cabellos castaños quien se vestía de ética, muy elegante y con una seriedad absoluta mientras que el señor era un poco más mayor que ella y sus cabellos eran castaños lisos, él vestía de un elegante más informal y trataba de sonreír mientras se le arrugaban las comisuras.
Las palabras se atoraron en mi garganta mientras me levantaba lo más rápido posible sintiendo como mis piernas flaqueaban. Sus rostros eran reconocidos por mi subconsciente, y en mi mente divagaban recuerdos con ellos, desde cumpleaños, navidades como días cotianos.
— Papá...mamá...
— ¡Cáncer!.— Dijo la mujer con alegría sobreactuada.— Cuanto tiempo sin verte.
Había pasado mucho tiempo, demasiado. Desde que ambos son dejaron con 12 años en la puerta de la casa de mis abuelos, desde ese fatídico día, ambos se deshicieron de sus hijos para entregarse a sus nuevas parejas.
Claro, las peleas pararon pero también nuestro tiempo con ellos, ni una carta, ni una llamada y menos una visita. Nosotros no sabíamos nada de ellos, hasta ahora.
Ellos con mucha delicadeza y elegancia se situaron a mis costados, me sentí agobiada mientras intentaba no desmayarme ahí mismo. ¿En qué momento me quede dormida de nuevo?.
Sus palabras tenían un solo propósito y en ningún momento quisieron amortiguar el golpe con un ¿Como están? O preguntarnos por los padres del señor sino sonrieron cada uno y con suavidad dijeron sus palabras que quizás estuvieron preparando hace días o solo cuando llegaron a la ciudad.
— Entonces no creemos que sus abuelos puedan cuidarlos más.— Dice el señor.— Mira Cancer, creo que tú puedes ir a vivir con mamá, ya sabes momentos de chicas y sus variaciones.
Le dí una mirada a mi progenitora y ella tenía sus manos en sus rodillas mientras tenía una pequeña sonrisa en los labios.
— Can, podría ir conmigo.— Dice el señor.
Cuando acaban sé que estoy llorando, sé que esto es una pesadilla de la cuál estoy consciente. Ellos no podían hacernos esto. No podían simplemente abandonarnos y luego querer recuperarnos como si fuéramos sus juguetes y menos separarnos.
— Yo no quiero.
Sus miradas se endurecieron, mientras replicaban que ya habían conversado con nuestros abuelos y ya que cuando Can salga del hospital, teníamos que empacar nuestras cosas. Solo les dí una mirada de desprecio mientras les decía lo qué sabia de memoria.
— No son nuestros padres.
Vi salir a Piscis corriendo de la habitación y luego escuche como algo caía al suelo haciéndose añicos así que entre rápidamente. No pude conterme mucho en sus brazos así que lloré mientras nos aferrabamos el uno al otro, mientras que le contaba todo lo ocurrido.
Cuando decidí salir de la habitación para limpiarme las lágrimas y lavarme el rostro, hasta pensar en arreglarme un poco para evitar la vergüenza de ser vista así por aquellos individuos me encuentro con Aries y Escorpio en la sala de espera.
Me acerco a ellos con cuidado para indicarles que ya pueden hablar con Can, pero ambos no alzan la mirada, solo están serios. Hasta que carraspeo para que noten mi presencia.
— Cáncer.— Pronuncia mi novio.
— Iré a ver a Can.— Anuncia mi amiga de los rulos mientras se va sin siquiera darme una mirada.
Parpadeo y recuerdo que debo ir al baño por si veo de nuevo a esos desconocidos problemáticos.
— Cáncer, debemos terminar.
Se levanta, a pesar de que yo sea alta él es mucho más grande y debo de alzar la mirada confundida por sus palabras.
— Nuestra relación es una mentira. No te quiero y no me quieres.
Sus palabras hacían eco en mis oídos y el coraje crecía en mí.
¿Como se atreve a pensar eso?
— ¿Sabes lo que siente mi corazón? No acepto tus palabras y me niego.
— Cancer, es lo mejor para nosotros. Date cuenta.
Frunci los labios mientras luchaba para no golpearlo y salir a correr. ¿Por que después de tres años de relación duda? ¿Por qué cuando mis padres me hicieron pedazos de nuevo?
Me lance a él para abrazarlo mientras que él me correspondía.
— ¿Es por esa rubia, no?.
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¡Aquí D1Laurentis!
¿Que creyeron? Cáncer no es tonta, Cáncer observaba como el escorpión la veía.
¿Que pasara con estos hermanos?
Cada vez más cerca de Anónimo.
Pueden apostar aquí quien creen que es.
Y el ganador recibe otro capítulo entero de su signo de 850 palabras 7u7Dejen sus supociones y sus signos el ganador será anunciado al final del capitulo donde se revela la identidad de anónimo.
¡D1Laurentis fuera!
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Teenagers Zodiac
Teen FictionAdolescentes con problemas. Mad guys Bad guys Nerds y Famous. ¿Que pasaría si se mezaclaran con alguien que no es de su grupo? ¿Que pasaría si los 4 grupos más conocidos del instituto se juntarán.