Capitulo 26

2.1K 264 17
                                    



Dos días después de estar sin salir de la cama, salvo para tomar mis pastillas o cambiar el libro que leía, finalmente me sentía completamente bien físicamente y decidí ir de compras. Después de todo no había mucha comida en casa salvo las naranjas que habían llevado Ignacio y Nano y de esas sólo me iba quedando una.

Compre lo justo y necesario, no era muy bueno con esas cosas, siempre de las compras se ocupaba Tomás yo sólo era el encargado de cocinar y, según él, lo hacía bastante bien. Supongo que fue por eso que los vi en el supermercado: Tomás y Tiziano compraban juntos y ser reían de algo al parecer muy divertido.

No me entretuve mucho mirándolos, la verdad es que no me hacía sentir para nada bien ver cómo ese sujeto me estaba quitando a Tomás, por lo que pagué mis cosas y fui a tomar algo a una cafetería del shopping. No lo hice concientemente, pero seguramente sí sabía qué iba a pasar a continuación y sin embargo me senté y pedí un café cargado...

No tardaron mucho en llegar a la cafetería del frente, la cafetería preferida de Tomás. Se sentaron de manera que no podían verme aunque claro que si lo hubieran hecho no modificaría tanto la situación, después de todo él y yo habíamos terminado. 

Tiziano pidió un café pero Tomás sólo un exprimido... él no era fanático del café pero ese lugar le gustaba por los jugos que hacían. Ambos pidieron un tostado.

Ellos no se veían como una pareja pero yo lo presentía, la forma en que Tiziano había estado actuando últimamente y el hecho de haberlos encontrado durmiendo juntos tenía que estar relacionado. A pesar de todo me alegraba de ver a Tomás sonriendo aunque Tiziano fuera el causante de aquello, pero me alegraba por él, dentro de mí sentía que todo estaba mal, sentía un peso aplastante en el pecho y esta vez no tenía nada que ver con la gripe.

Sin pensarlo demasiado tomé el teléfono y escribí un mensaje, no para Tomás por supuesto, él no había molestado en pasarme su nuevo número.

Creo que tú y yo necesitamos hablar.

Levanté mis ojos a los dos muchachos y observé justo el momento cuando "mi" amigo leía el texto. Tiziano sonrió, guardó el teléfono e hizo una seña a su compañero como si el mensaje que había recibido no tenía importancia; respiré un par de veces, sinceramente traté de calmarme , pero fue más fuerte que mi voluntad zen. Busqué su número y esperé.

Estoy ocupado.

–¿Perdón? ¿Acaso yo te pregunte?

No, pero te estoy avisando porque voy a cortar.

–Tiziano... pensé que éramos amigos –dije rápidamente antes de que él separe el aparato de su oreja. Reflexionó unos segundos y se puso de pie disculpándose con Tomás que lo miraba desinteresadamente.

¿Qué quieres? –largó con brusquedad.

Pensé unos segundos en qué responderle. Pensé si era conveniente hablarlo por teléfono o mi impulso sólo había para que él se separe de Tomás; respiré profundamente y largué un suspiro, por teléfono dolería menos, él no vería mi cara y no sabría cuán lastimado estaba.

–Supongo que te enteraste que fui a hablar con Tomás hace unos días.

Sí ¿Qué tiene que ver eso conmigo?

–¿Qué tiene que ver? Que los encontré durmiendo juntos Tiziano, eso tiene que ver –dije pensando en que no podía hacer un escándalo ahí, no con tanta gente mirando. Bajé un poco la voz y volví a respirar un par de veces aunque no funcionara en lo absoluto. –¿Qué demonios pasa entre ustedes?

No es algo que deberías hablar conmigo –responde y veo su sonrisa de suficiencia.

–Sí, sí porque tú eres mi amigo y me debes una explicación.

Habla con Tomás.

–No me fue muy bien las últimas veces y eso es algo que a ti te conviene ¿No? –Su sonrisa se hizo más amplia y el teléfono crujió bajo mi mano. –¿Tienes esas intenciones con él no?

Rocco, en serio, no es conmigo con quien tienes que hablar –dijo luego de largar un suspiro.

–Sí, pero por tus evasivas evidentemente ya quedó todo más claro...

¿Necesitas algo más? –consultó mirándose las uñas relajadamente. No le respondí, corté y lo observé reír estúpidamente. ¿Cómo había sido que no me había dado cuenta de sus intenciones antes? ¿Si me ponía a reflexionar podría haberme dado cuenta? No lo sé... cada vez estaba más seguro que yo era un idiota.







N/A: Esta nota fue agregada después de subir el capítulo porque me di cuenta que probablemente esta parte haya estado inspirada en la canción que les acabo de compartir... no me di cuenta en un principio, pero (recién) cuando la estaba escuchando una vez más (ya lo he hecho muuuuchas veces) dije... ¿No se parece bastante al capítulo que subí? Así que llegué a la conclusión que inconscientemente esta hermosa canción tuvo influencia en las escenas de este capítulo. 


2. Si tú quieresDonde viven las historias. Descúbrelo ahora