SINÓPSIS.
Qué haces cuando la persona que amas y consideras como un todo en ti, juega con el sentimiento más hermoso que le puedes brindar; el amor ¿Cómo intentas enfrentar la vida sin él? Anahí no obtuvo respuesta y se convirtió en una persona m...
Alfonso tomaba de las manos a Anahí y frente a ella decía las palabras que nunca pensó pronunciar...
-Eres el amor de mi vida Annie! Te amo más de lo que imaginas!
Ella acariciaba sus mejillas y exclamaba...
-Te amo Alfonso! Más que a mi propia vida!
Ambos irradiaban felicidad y sus bocas se unían para profesarse el amor que sentían y decían tenerse el uno al otro.
-Quieres ser mi novia Annie?
Ella entusiasmada le respondía...
-Sí, si quiero amor!
Alfonso estaba por besar de nueva cuenta a Anahí cuando un ruido extraño aparecía...
La alarma de su despertador hacía que su sueño finalizara repentinamente...
Abría un ojo y no podía creer que éste marcara las 7:30 de la mañana...
Sentía que había dormido tan poco.
Rápido se levantaba de su cama... Se acercaba a su closet y por primera vez no sabía que ponerse para su encuentro con Anahí.
Se rió al verse en tan penosa situación.
Después de pensarlo 4 o 5 veces tomaba la ropa elegida y la dejaba en su cama...
Abrió la puerta de su baño y metió a ducharse...
A su mente venía el mensaje y la posdata del odio hacia la impuntualidad que manifestaba Annie y no iba a permitirse hacerla enojar apenas empezado su día.
Trataría por todos los medios que ella se sintiera en confianza y que le agradara su compañía para que siguieran más salidas entre ellos dos, su objetivo: ganársela como amiga!
Veía su celular y tenía el tiempo suficiente para llegar antes de la hora acordada... Terminaba de asearse, tomaba la toalla, secaba todo su cuerpo y salía a su recámara, agarraba su bóxer y se lo ponía para darle turno a su pantalón.
Se colocaba su desodorante y aplicaba su loción, un poco más de lo habitual y se acomodaba la playera.
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Se calzaba y peinaba, agarraba su cartera y las llaves de su carro y cerraba la puerta de su habitación con la esperanza de volver feliz y contento.
Bajaba las escaleras y se encontraba a Ruth...
-Mi cielo buen día!
-Días mamá!
-Vas a salir?
-Sí.
-Pero no has desayunado, permíteme 10 minutos Alfonso.
