CAPÍTULO 82.

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Sus besos eran lentos y pausados... ninguno de los dos se imaginaba estar en aquella situación, sus bocas se amoldaban a la perfección y gustaban de lo que hacían sus lenguas...

Mía colocaba sus manos alrededor del cuello de Miguel, cómo estaba disfrutando de ese momento, él se dejaba llevar por lo que sentía, ese magnetismo que le atraía de Mía era muy poderoso y no podía resistirse a sus besos pero el recuerdo de Laura se hacía presente...

Apartándose rápidamente decía...

-Perdón Mía yo... lo siento no debió pasar...

-Pero Miguel...

-Perdóname por favor...

-Sentiste lo mismo que yo?

-No Mía,  mira agradezco que me hayas curado pero es mejor que te vayas...

-Qué has dicho?

-Vete por favor y has de cuenta que aquí no pasó nada...

-Pero pasó Miguel...

-Debemos olvidarlo Mía...

-Tú lo harás?

-Claro, yo sigo recordando a mi querida Laura y tú estás enamorada de mi hermano no?

-Sí pero...

-Fue un error estás de acuerdo?

-Un maravilloso error.

Mía caminaba de prisa a la puerta principal...Antes de abrirla agregó...

-Deseo que te recuperes pronto y gracias por lo que hiciste por mí.

-De nada Mía.

-Adiós Miguel.

Dicho esto ella salía de aquel lugar, cerrando la puerta de un golpe. Al llegar a su carro y entrar comenzó a llorar amargamente...

Por su parte Miguel no sabía si había actuado bien, le dolía el corazón como no pensaba que lo volvería a sentir, recordó el momento en que Lau se marchaba de esta vida y lo dejaba solo para siempre... La despedida de Mía decidida por él  era igual de tormentosa.

-Fue lo mejor! se decía asimismo.

Y los días pasaban...

Anahí y Alfonso disfrutaban su amor a cada momento, su relación era más sólida y estable. Vivían para ser feliz y eso consistía en también hacer feliz al otro. Alfonso había aprendido a controlar sus celos cuando Annie salía a la pista del Classico con sus vestidos sexys y extravagantes, pero no podía ocultar lo fabulosa que se veía con ellos puestos.

Cada fin de semana la miraba bailar y sin duda alguna estaba seguro que la quería como esposa lo más pronto posible.

Las ideas de como le pediría que se casara con él estaban avanzadas gracias a la ayuda de Miguel aunque notaba considerablemente que su cómplice mostraba en ocasiones un rostro de pena y aflicción.

Muchas veces le preguntaba que le sucedía pero Miguel lo negaba, decía sentirse bien.

Desde la noche en que  Mía se marchó de su casa, nada volvió a ser igual para Miguel, su imagen y sus besos rondaban en sus sueños incesantemente, no la podía sacar de su mente y mucho menos de su corazón.

Ella se había instalado sin aviso en su alma y corazón...

Quería tajantemente reprimir sus sentimientos y todo lo que ella le provocaba tan solo al verla, no era nada fácil estar en la misma aula de estudio, pedía que esa tortura acabara ya y eso sería hasta que terminaran la universidad... Faltaba poco pero antes tenía que seguir conviviendo  con ella  en ese viaje de graduación en que se arrepentía de haber aceptado.

.·♥UNA SEGUNDA OPORTUNIDAD♥.·Donde viven las historias. Descúbrelo ahora