La vida en familia es complicada, las peleas y el dolor pueden ser cosa de todos los días, así como también el amor y el apoyo que te dan, no sólo la familia de sangre es tu familia
Viktor alfa, Yuri omega y Yurio como su pequeño hijo omega
*ome...
-Yuri tranquilo, la pista de hielo no se va a ir a ningúna parte-
-pero Viktor, están apunto de llamarlo y no lo veo por ningún lado-
-ya saldrá, tranquilo-
Una sonrisa corazón se formó en sus labios al ver el puchero inconforme de su pareja.
Yurio estaba apunto de salir a presentar su programa libre, aunque ya tenía una abrumadora ventaja en el programa corto aún no se podía confiar, además de que era su última competencia en esa categoría.
Ellos, junto con los mellizos, los cuales observaban encantados la competencia, habían decidido esperar en las gradas, mientras que Otabek había acompañado a Yurio.
Su corazón se detuvo al ver a su pequeño entrar a la pista, un ligero gruñido entre lastimero y molesto escapó de su garganta al ver como su cachorro le daba un beso al kazajo antes de comenzar a patinar.
Nunca iba a poder acostumbrarse a eso, su alfa interno siempre lo consideraría su pequeño e indefenso cachorro.
-mas le vale a ese ladrón kazajo cuidarlo bien- susurró antes de que la música comenzar a sonar
Había quedado completamente absorto en el patinaje de su hijo, había mejorado mucho desde la última vez que lo vio en vivo.
Grito con todas sus fuerzas cuando su participación estaba por terminar, sonrió enternecido al oir a los mellizos gritar balbuceos en apoyo a su hermano.
- lo hace maravilloso ¿no crees?- lo llamo su pareja sin despegar los ojos de la pista.
-¡Amazing!-
-se nota que es tu hijo-
-tu también le enseñaste muchas cosas Yuri...tal vez debería...-
-¿qué cosa?- le pregunto curiosos el Omega
-estaba pensando en hacer la coreografía para su debut ¿crees que quiera?-
-Viktor...te ha estado pidiendo que hagas una coreografía para el desde que comenzó a patinar- lo riño con voz cansada
Observo confundido a su pareja, intentando recordar cuando es que Yurio se lo había pedido, pero al final se rindió.
-bueno...entonces le hare uno-
Jusnto cuando parecía que Yuri le iba responder, la audiencia grito eufórica, su cachorro había terminado la presentación.
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Sonrió mientras salía de la pista, con el medalla de oro colgando en su cuello, lentamente recorría el lugar con la mirada, buscando al kazajo.
Dio un par de pasos hacia tras sin proponérselo cuando la prensa lo comenzó a rodear, su Omega interno se removio incomodo cuando reconoció algunos alfas entre los periodistas.
