La vida en familia es complicada, las peleas y el dolor pueden ser cosa de todos los días, así como también el amor y el apoyo que te dan, no sólo la familia de sangre es tu familia
Viktor alfa, Yuri omega y Yurio como su pequeño hijo omega
*ome...
-señor Nikiforov tiene que salir de aquí- la voz de el doctor sonó en su cabeza
-no- gruñó firmemente -no puedo dejar a Yuri- soltó volviendo a toma la mano de su pareja, observando con horror como poco a poco se volvía más pálido
-¡tiene que salir!- grito desesperado, tomándolo del brazo
Se resistió ,veía a las enfermeras correr, gritando varias cosas que no entendía, de pronto, sintió como varios brazos lo tomaban, alejandolo de su omega
Su alfa interno ardió en furia, comenzó a pelear contra los enfermeros, que iban llegando, que lo estaban alejando de su Yuri, no pensaba con claridad, solo quería estar a su lado.
-señor Nikiforov, se que quiere estar con el- le hablo uno de los médicos - pero en estos momentos no puede hacer nada, solo esta estorbando-
Se detuvo, dejó de pelear, las lágrimas comenzaron a recorrer su rostro sin cesar.
-Po-Por favor...salvelo- gimió dolido, con la voz entrecortada por el llanto, observando al doctor, quien asintió levemente
Comenzó a caminar hacia la salida, observado el cuerpo de su pareja, sentía que su corazón se rompía.
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Antes de darse cuenta llego a la sala de espera, Yuri y Otabek lo esperaban ahí.
Sabía que debía tener la cara deformada por la desesperación que sentía, forma angustiada en la que Yurio lo veía no hizo más que confirmar su sospecha.
-¿que paso?- pregunto apenas estuvo cerca
-yo...no se- balbuceo sus ojos nuevamente comenzaron a llenarse de lágrimas
-¿¡como que no sabes!?, ¡dime de una vez que paso!- grito desesperado, había comenzado a llorar
-si algo le pasa....si algo le pasa....Beka....yo no lo soportaría- gimió llorando, escondiendo su cara en el pecho del Kazajo
El tiempo pasar del tiempo era una tortura, poco a poco la sala de espera se iba quedando vacía, había anochecido.
Yurio se había quedado dormido mientras lloraba, Otabek simplemente lo había abrazado en silencio, dejando que se desahogara.
-¿familiares de Yuri Nikiforov?- pregunto una doctora entrando a la sala, inmediatamente Viktor se levantó, llamando la atención de la doctora -por favor sigame- hablo con voz monótona, comenzado a caminar
El Ruso dio un par de pasos, antes de detenerse y observar a su hijo, preocupado por dejarlo solo en ese momento.
-vaya, yo cuidaré- le dijo el Kazajo, adivinando sus pensamientos, lo observó unos momentos agradeciendo en silencio y volvió a caminar
