Capítulo 39

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Tratar de conquistarla

Klaus

Esta vez encontré necesario la manera de no tomar demasiado, en parte porque no quería que Elijah enfureciera por mi forma de escapar a los problemas y en segunda no quería que Marcel volviera a llevarme a mi casa para después burlarse de mí por teléfono durante mucho tiempo.
Estaba listo para irme cuando vi llegar a Brittany, maldije para mis adentros aún tenía que arreglar algo con ella pero no sabía de qué manera, tenía en cuenta de que lo que le dijera a mi manera terminaría lastimándola pero si quería recuperar a Meghan tenía que romper con aquella "relación" que ella se había inventado y no era que no lo hubiera intentado, sino que tratándose ella cualquier intento de alejarla de mí parecía acercarla todavía más.
-Klaus-dijo cuando se acercó a mí-Pensé que estabas en Kansas aún.
-Decidí que ya era momento de volver, ya sabes tres semanas lejos-mire que Marcel sonreía de lado.
-Me preguntaba si quieres ir a algún lado conmigo-sonrió ampliamente.
-De verdad tengo que regresar a casa antes de que a Elijah le salgan canas, pero Marcel no tiene nada más que hacer y mañana no va a ir a la constructora-ella lo miró y él la saludo-Tal vez puedas ir con él y después me platican que tal les fue-ella asintió ahora sin sonreír.
Los deje solos y me fui del Grill mire mi reloj aun no era tarde pero no me hubiera gustado estar con Brittany en el mismo lugar no después de que había planeado cortar todos los lazos que me unieran a ella.
Entre a la casa y agradecí que no hubiera nadie ahí, subí a mi habitación pero antes de entrar un voz me detuvo.
-Klaus-cerré los ojos y me di la vuelta, mamá se encontraba en la puerta de su antigua habitación.
-¿Qué?-dije tratando de no sonar grosero.
-Hijo sé que no me perdonarás por el daño que les cause a ti y a tus hermanos-me miró-Pero de verdad estoy arrepentida de lo que hice.
-No, no finjas que estas arrepentida ahora que no tienes nada, tal vez Elijah acepte que te quedes pero yo no y te pido que no me llames hijo nunca más-entre y cerré la puerta.
Saque el teléfono del bolsillo y marque el número de Kol.
-¿Diga?-su voz sonó adormilada.
-Kol lamento llamarte a esta hora, ¿te desperté?
-Algo así, ¿qué pasa?-dijo y dude en decírselo.
-Tenemos un problema aquí-espere unos segundos-Mamá ha vuelto y Elijah aceptó que se quede en la casa.
-Vaya-dijo sin el tono de voz de antes-¿Les dijo por qué?
-Tal parece que se quedó sola y tenías razón sobre los niños, ella se parece a Rebekah-dije recordándola.
-¿Cómo se lo tomó Rebekah?
-Aún no lo sabe, llegara hasta mañana supongo, pero creó que no dirá nada.
-Está bien, Klaus gracias por decirme pero ahora necesito ir a dormir.
-Sí, me parece lo mejor, buenas noches-colgué y deje el celular a un lado.
No podía dormir, quería quedarme despierto para pensar en cómo haría que Meghan me perdonara a ella no le gustaban las cosas caras era demasiado sencilla, en eso difería a Brittany, sabía todo sobre ella en parte gracias a Rebekah y a Damian y en parte porque me había dedicado a aprender de ella y entonces la respuesta vino a mi mente.

Meghan

Estaba aún despierta había escuchado que Klaus apenas había llegado pero eso no era lo único que estaba en mi mente, el regreso de la mamá de Elijah seguramente traería nuevas peleas ente ambos eso sin mencionar que Rebekah regresaba mañana y que ambos tratarían de convencerla, poner a su hermana en medio de sus peleas era un juego que ambos empleaban siempre.
Elijah había subido a la habitación cuando ambos niños se habían quedado dormidos después de jugar con Chip, le comenté que Klaus me dijo que sabía la verdad, no me había enojado de todas maneras algún día tenía que enterarse.
En la mañana cuando me levante, me vestí rápido y baje para empezar las clases con Elijah pero en el estudio sólo se encontraba Niklaus leyendo.
-¿Elijah no está?-él quito la vista del libro y negó.
-Salió hace rato para el despacho, pero me dijo que te diera estos libros-se levantó y fue hacia el escritorio.
-Gracias-dije cargándolos, iba a salir del estudio cuando hablo de nuevo.
-Meghan-lo mire-En caso de que no entiendas algo voy a estar aquí-asentí y salí del estudio.
Cuando iba para la habitación la madre de Klaus salió de la habitación en la que se había quedado.
-Buenos días-saludo con una leve sonrisa.
-Buenos días-dije tratando de devolverle la sonrisa.
-¿Cómo te llamas?-dijo aún con esa expresión en el rostro.
-Meghan Owen-dije y su expresión cambió.
-Oh, de verdad lamento lo que les paso a tus padres y hermano-no tenía idea de cómo se había enterado, pero sabiendo que en el pueblo todos se enteraban no me sorprendía y me preguntaba si ya todos sabían que ella había regresado a su antigua casa después de quedarse sola
-Gracias-dije intentando no ser grosera, sonrió ampliamente y paso a mi lado para bajar las escaleras.
Después de media hora realizando apuntes con la ayuda de las notas que Elijah me había dejado, Klaus aprecio en la puerta.
-Hola-dijo y yo lo mire-¿Puedo pasar?-asentí en respuesta.
Se quedo parado frente a la cama y yo sabía que en parte se encontraba nervioso.
-Te traje esto-estiro una caja de mediano tamaño.
-¿Dulces?-dije cuando leí la parte de arriba.
-Tus favoritos, según Damian-lo mire era increíble que todavía se acordará de lo que me gustaba-Ahora te dejo estudiar-iba a salir de la habitación cuando lo llame.
-Klaus-se dio media vuelta y me miró-Gracias-asintió y sonrió antes de salir.

Se Llama Promesa (Klaus Mikaelson). ActualizadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora