Mi nombre es SIENNA, la GORDA (COMPLETA)

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Advertencia, contenido sensible.

- Háblame Sienna ¿Que está pasando? ¿Porque actúas así? Si no me lo dices, lo averiguaré pero por favor háblame- dijo mi mamá a mi oído.

Estaba acostada en mi cama, después de el colapso que tuve, mamá me preparo un baño en la tina, logró relajarme, ella no dijo nada ni yo, me ayudó a cambiarme, me sentía muerta en vida, me peino, y me acostó, pasaba sus suaves dedos por mi cabello, aunque no decía nada, se sentía bien, tener a mamá se sentía bien.

- No quiero hablar mamá, solo déjame dormir- dije, escuche la decepción en su voz.

- Ok cariño, estoy aquí para ti, siempre lo sabes verdad? cuando estés más calmada hablamos- dijo, me dio un beso en mi frente y salió.

Me levante rápidamente y le puse seguro a la puerta, busque mi celular, pensé que encontraría mensajes de Tamira, no había ninguno, mucho menos respuesta de Matt, me sentí una basura, arruino todo, no sirvo para nada, comencé a llorar, entonces recordé el video que había visto días atrás, "cortarse cura el dolor" sería posible? Podría funcionar? Entonces camine hacia mi escritorio, abrí el primer cajón, y  saque una cuchilla, la que ocupaba para sacarle punta a mis lápices de dibujar.

La mire, no tenía idea de cómo hacerlo, así que abrí mi laptop de nuevo y busque el mismo video, al abrir el link aparecieron como sugerencias otros videos de la misma chica, había uno con el teme "como cortarse" le di click, era un video de dos minutos, ella decía que si queres cortarte y no querías que nadie te viera lo podías hacer en las piernas, también podías hacerlo en el abdomen, en las muñecas, incluso en los pies, cerré la laptop, me levante de nuevo de la cama, tome de nuevo la cuchilla, me dirigí al baño, me puso frente al espejo, comencé a llorar.

Me odio, soy horrible, arruino todo, ni siquiera tengo la fuerza par dejar de comer.

Tome la cuchilla, levante la blusa y comencé a cortarme en el abdomen, el primer corte dolió demasiado, pensé en no seguir, pero lo hice, me corte una vez más, y otra, y otra, muchas más, vi como sangraba, por alguna razón me gusto ver esa sangre ahí, en la parte el cuerpo que más odiaba, entonces me corte muchas más veces mientras lloraba, hasta que no pude más.

Comencé a llorar más fuerte! Mi blusa estaba llena de sangre, la quite rápidamente, tome un trozo de papel y comencé a secar la sangre, entonces tenía razón, cortarse ayuda, ayuda a dejar de sentir el dolor de el alma.

¿Como es posible eso? - Es más soportable el dolor físico, que el del corazón, nadie lo entiendo, tú no lo entenderías.

Me dirigí a mi cama, con el alma seca, no pensaba, solo sentía el ardor, el dolor de los cortes, me acosté en mi cama, cerré mis ojos.

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El sonido de mi alarma me despertó de un golpe, al moverme, mi estomago ardió y dolió, me levante de la cama y fui al baño, me levante la blusa y vi las heridas, estaban abiertas, busque entre mis cosas benditas, hasta que encontré un par.

Me mire en el espejo, me reí irónicamente, me miraba horrible.

Me metí a bañar, y las heridas me dolieron más al sentir el agua, pero debía resistir, me hacían sentir mejor, aunque dolieran.

Mire el reloj 7:15 am, no tenía señales de Tami, deduje que no iba a venir por mí, seguramente seguía enojada, por primera vez no me importaba, solo quería que el día pasara como cualquier otro, solo deseaba que Rubí no me molestase, me puse triste al no obtener respuesta de Matt, me sentía triste.