-XXXVI-

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La primavera llegó y de nuevo Harry , Liam, Zayn, Niall y Matthew junto con los demás hombres zarparon al alba, a conquistar nuevos tesoros y nuevos lugares, pero no llegaron lejos, pues la nueva guardia los aguardaba en alta mar, los tomaron por sorpresa pues no los esperaban, alguien se había ido de la lengua, pues siempre hacían todo con sumo secreto y cuidado.

No pudieron hacer mucho pues sus espadas no sirvieron de nada ante las armas de los soldados, así que muertos mucho de ellos y heridos la mayoría, Harry se rindió y los apresaron.

A Harry por ser el Capitán y el responsable del barco y de sus hombres, lo encarcelaron a parte y los demás compartieron el calabozo.

Todos sospecharon y acusaron a Matthew, era el más evidente y él que no quería navegar, lo hacía obligado, además era el más interesado en deshacerse de Harry.

—¿Has sido tu desgraciado?, ¡confiesa tú nos has vendido!, ¿verdad?, ¿Qué te han prometido?.

—Yo no tengo ni idea de lo que decís, yo no he sido—dijo aparentando una falsa sorpresa.

Claro que había sido él, en los días anteriores de zarpar, el jefe de la guardia habló con él pues sabía de sus deudas de juego y que su lealtad a Styles era precaria a pesar de ser familia y a cambio de un cofre lleno de monedas de oro, Matthew contó todo lo que sabía de Harry y sus saqueos, cosas que Harry le confió en secreto ya que iba a ser miembro de su tripulación.

El capitán jamás pensó que Matthew llegaría a morder su mano, a su primo, a quien le perdonó y le dio techo y comida, esperaba que pudiese robarle si, pero nunca delatarle ante la guardia.

Anna y Gemma acudieron a los calabozos a ver a Harry, el pobre estaba muy mal, temía no poder volver a ver a sus hijos y tampoco a Louis, estaba seguro que lo ahorcarían o lo condenarían a cadena perpetua, pero lo que más le preocupaba a Harry era su familia si él moría, ¿qué sería de ellos?.

El jefe de la guardia Labort que así se llamaba, tenía muy en secreto el tener a Harry en el calabozo pues sabía que podría negociar, pues el estúpido de Matthew le contó maravillas de las riquezas del capitán.

La madre de Harry intentó convencer al jefe de la guardia para que soltase a su hijo y a los demás, pero después de hablar largas horas con él y ofrecerle oro, plata, joyas, llegó a la conclusión de que no quería dinero, ni joyas sino otro tipo de pago.

El jefe Labort quería poseerla a ella y a su hija, a cambio de la libertad de los hombres de su hijo pero Harry tenía un precio mayor pero aún no sabía cuál.

Anna no le dijo nada a Harry y lo habló con su hija, juntas acordaron que debían acceder a las peticiones pues sino no podrían convencerlo de liberar a Harry.

Así que madre e hija yacieron con el jefe de la guardia, primero fue Anna, llena de repugnancia y asco pero su sacrificio valía la pena.

Labort liberó a la mitad de los hombres alegando que tras interrogantes eran inocentes, el resto de los hombres los liberó después de poseer a Gemma días después.

—Bien Labort gracias por liberarlos a todos, mi sobrino puedes quedártelo de momento, ahora hablemos de  la libertad de mi hijo.

—Querida Anna, el Capitán es muy valioso, tiene que ser un alto precio a pagar, me lo pensaré.

Matthew se quedó encerrado pues Anna y Gemma no respondieron por él y Labort accedió a ahorrarse el cofre de monedas y además necesitaría un culpable si las cosas se ponían feas y tendría a alguien a quien juzgar.

Anna quiso verle la cara a ese mal agradecido antes de irse.

—Gracias tía por venir... ¿me van a soltar?, todos se han ido y yo sigo aquí ¿sabes por qué?.

—No me des las gracias y no me llames tía, yo ya no te conozco, tú no eres mi sobrino, eres un mal agradecido y un desgraciado, ojalá te pudras, te acogimos, te pagamos todo, mi hijo te perdonó tu engaño y se lo pagaste traicionándolo, te mereces estar ahí., Adiós!.

—¡Tía!... ¡tía!...¡Tíiiiaaaa perdóname!, ¡no me dejes aquí...!— gritaba​ desesperado Matthew, pero Anna no miró atrás ni una sola vez, al contrario sonrió pues con los Styles no se juega sin pagarlo.

!— gritaba​ desesperado Matthew, pero Anna no miró atrás ni una sola vez, al contrario sonrió pues con los Styles no se juega sin pagarlo

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El jefe de la guardia Labort.

30. Mi ardiente capitán- Larry Stylinson💛 (Terminada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora