Dream (La Última Uchiha) ~Pausada~

Capítulo 17

-¿D-Donde estoy?.-habló debilmente.

-Guarda silencio.-le respondió una gruesa y familiar voz.

Trató de levantarse pero el fuerte dolor de cabeza le detuvo, se dejó caer en la cama.

-¿Q-Qué p-pasó?

-Cometiste la estúpidez que te dije que no hicieras.-le dijo el de la mascara naranja.

-¿Como llegué a-aquí?

-Zetsu me avisó del problema.-le respondió comenzando a quitarse la mascara.

-¿Zet-su?

-Si, otro miembro de Akatsuki que no conocías. Ahora duerme o tardarás en recuperarte.

Ella solamente miró fijamente el techo. Frunció el ceño y apretó los puños.

-Partiré inmediatamente a Konoha.-le dijo a sin nombre.

Él simplemente rodó los ojos y bufó.

-Si claro, con la cabeza partida en dos. Imbécil. Por cierto, le debes a Akatsuki una misión.

Saori comenzó a llorar, comenzó a sentir impotencia de nuevo. Tal y como había pasado aquella noche.

-G-Gracias...-le dijo entre sollozos.

-Tsk, cierra la boca y duerme.-le dijo tapandole los ojos. La Uchiha tomó la mano de este y la entrelazó con la suya.

Para su sorpresa, Sin nombre no se opuso a esta acción.

-¿Me puedes dar un beso?.-preguntó con una gran seriedad en su rostro.

-Me tengo que ir, volveré más tarde.-le respondió soltandola y tomando de nuevo su mascara.
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-¿Qué haces aquí?.-preguntó Itachi con gran molestia.

-Vengo a preguntarte algo.-le respondió apretando los puños.- ¿Qué le dijiste a Saori?

-No sé de que hablas...- se dió la vuelta y siguió su camino.

-Tuviste que decirle algo como para que ella respondiese de esa manera.- le dijo cruzandose de brazos.

-Tal vez comenzó a ser violenta por culpa tuya, Madara. Se muy bien que le haz dicho algo sobre mi.

-¿Qué puedo decirle?

-Algo relacionado con que yo tenga sentimientos.

El de la cicatriz rió sarcasticamente.

-¿Y no es así?

Itachi comenzó a sentirse verdaderamente molesto, aunque solo se limitó a ignorarlo.

-¿Sabes que en cualquier momento tanto Sasuke como Saori van a hacerte pagar?.-le comentó siguiendole.

-No solo a mi me harán pagar mis errores. En especial Saori, parece que comienza a estimarte, sería una pena que se enterara de que no fui el unico asesino esa noche.

Madara frunció el ceño y sin decir más se fue de aquel lugar.

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-Toma.-le dijo dandole un frasco con pastillas.- esto te servirá.

-Ah! Gracias...!.-lo recibió.- ¿No sabes donde está mi mochila?.

-¿mochila? Cuando fui por ti no tenias nada.

-Mierda...-murmuró fastidiada.-Tanto que me costó...

-Un maldita mochila no cuesta mucho.

-No es la mochila, es lo que traía.

-¿Qué traías?

-Nada...-le respondió ruborizandose.

Sin nombre se quitó la mascara.

-¿Que planes tienes para Itachi?.-preguntó cambiando de tema drasticamente.

-Mas bien...para Sasuke.-respondió sonriendo maliciosamente.

Su compañero le miro sin expresión alguna, escuchando atentamente.

-Cambiaré un poco el plan original, iré a Konoha sin cambiar mi identidad...llegaré como Saori Uchiha.

-¿En que te puede ayudar ese cambio?.-preguntó cruzandose de brazos.

-Fácil, el pequeño y manejable Sasuke no se sentirá solo. Trataré de ganarme su confianza usando nuestro linaje.-prosiguió.

-Ajá...

-Utilizaré a Sasuke cuando sea necesario, a tal punto de hacer que su odio hacia Itachi crezca aún más. En pocas palabras...alentaré su espiritu vengador.

-Todo suena bien.-interrumpió el de la cicatriz.-pero...¿estas segura de la existencia de ese espiritu en Sasuke?

Saori bufó y le miró como si hubiera dicho alguna estupidez.

-Es obvio.

-Está bien, supongo que te ayudaré en tú plan.

Saori sonrió, sin embargo borró aquella sonrisa instantaneamente.

-Quiero hablar de algo contigo...

Él no dijo nada.

-Dime querido sin nombre, o más bien querido...Madara. ¿Por qué usas el nombre de ese muerto?

-¿Quién dice que no soy el mismo Madara?.-respondió retante.

-¿El mismo Madara que enfrentó a Senju Hashirama? No lo creo.

-Quieras o no soy Madara Uchiha.

Saori rodó los ojos.

-Se nota que jamás fuiste de las familias principales del clan...

El supuesto ancestro frunció el ceño.

-La familia de Itachi...y la mia. Sabían muy bien como lucía exactamente el verdadero Madara. No trates de engañarme.

Con gran velocidad le tomó del cuello como la primera vez.

-No sabes nada de mi.

-Creeme, sé más de lo que piensas.